-La campaña Tras la Marca y la presión de consumidores y consumidoras lleva a Kellogg’s a anunciar que abordará el cambio climático
-La noticia llega una semana después de que Nestlé declarara Tolerancia Cero con el acaparamiento de tierras.
Saviano Abreu, Oxfam Intermón
en eldiario.es
Gracias a que 238.000 consumidores y consumidoras como tú habéis alzado vuestra voz, Kellogg’s se ha comprometido a reducir sus emisiones contaminantes (tanto en sus cadenas de suministro como en el conjunto de sus actividades), a ayudar a los pequeños agricultores y agricultoras a adaptarse al cambio climático y a presionar para que se lleve a cabo una incidencia efectiva contra este tanto en el sector privado como en los Gobiernos.
Esta rápida respuesta de la empresa solo ha sido posible gracias a la actuación de los colaboradores y colaboradoras de la campaña Tras la Marca.
Entre las medidas más importantes que Kellogg’s adoptará está la de instar a sus principales proveedores a que midan y hagan públicas sus emisiones de gases y sus objetivos de reducción de los mismos. Es decir, utilizar su fuerza y poder de influencia para crear el necesario cambio de tendencia en materia ambiental.
Un escenario que necesita de la presión de grandes compañías, la compañía también movilizará a otras empresas y sectores de la industria para que actúen contra el cambio climático y se unirá a la iniciativa de la industria Business for Innovative Climate and Energy Policy (BICEP) para impulsar una legislación climática en Estados Unidos.
Definir y hacer públicos sus compromisos de reducción de gases de efecto invernadero, incluidas las emisiones agrícolas, para diciembre de 2015, así como una estrategia de adaptación al cambio climático que incluya las necesidades de los pequeños agricultores y agricultoras son otras dos de las consideraciones que Kellogg’s tomará.
Consulta la hoja de ruta de Kellogg’s para saber más sobre las medidas que la empresa pretende adoptar durante los próximos años de cara a cumplir con sus promesas
Es una decisión correcta, que beneficia a millones de agricultores y agricultoras en todo el mundo que tienen que enfrentarse a los efectos de una meteorología errática como resultado del cambio climático. Pero aún queda mucho cambio en materia ambiental y la exigencia que desde organizaciones no gubernamentales y movimientos sociales se le hace a las grandes empresas no puede disminuir, a pesar de estos significativos triunfos.
La protección de agricultores y agricultoras de todo el mundo en algo tan injusto como el acaparamiento de tierras debe seguir siendo firme y la presión y compromiso de las grandes empresas –como el reciente anuncio de Nestlé de adoptar una política de tolerancia cero ante esta mala práctica- debe ser recibido como una gran victoria, pero sin olvidar que a las 10 grandes empresas mundiales de comida y bebida aún les queda mucho para tratar de manera adecuada a las personas y al planeta.