¡Fuera la Minustah de Haití!

Otros Mundos A.C./ Amigos de la Tierra México

Miércoles 14 de octubre del 2015
San Cristobal de las Casas, Chiapas, México

Al presidente de la República de los Estados Unidos Mexicanos,
A la embajada de Haití en México,
A las embajadas en México de cada país participando a la “Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití” (Minustah) (Efectivos militares: Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Filipinas, Guatemala, Honduras, Indonesia, Jordania, México, Nepal, Paraguay, Perú, Sri Lanka y Uruguay ; Agentes de policía: Argentina, Bangladesh, Benin, Brasil, Burkina Faso, Burundi, Camerún, Canadá, Chad, Chile, Colombia, Côte d’Ivoire, Egipto, El Salvador, Eslovaquia, España, Estados Unidos, Federación Rusa, Filipinas, Francia, Granada, Guinea, Guinea-Bissau, India, Jamaica, Jordania, Kirguistán, Madagascar, Mali, Nepal, Niger, Nigeria, Noruega, Pakistán, Paraguay, Portugal, Rumania, Rwanda, Senegal, Sierra Leona, Sri Lanka, Túnez, Turquía, Uruguay, Vanuatu y Yemen).

    Exigimos el fin de la militarización en Haití. Mañana, 15 de octubre, se acaba el año de prolongación del mandato de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas (Minustah), iniciada en 2004, y se discutirá de su futuro en la Organización de la Naciones Unidas (ONU). Otros Mundos A.C., miembro de la federación Amigos de la Tierra Internacional, como defensores de los derechos de los pueblos de Chiapas y México frente a los megaproyectos, la represión y la militarización, pensamos que es tiempo de acabar con esta misión que lleva ahora 11 años. Su presencia ha generado un saldo de muertos, enfermos y violencia hacia las mujeres haitianas. Millones de dólares se están gastando en la presencia de militares mientras el pueblo haitiano sufre de hambre y pobreza.

    Es tiempo de respetar el derecho del pueblo haitiano a su soberanía, a vivir en paz y no con la presencia de 4,577 soldados de 19 países y más de mil agentes de policía de 46 países invasores; 317 personas civiles internacionales, y 128 voluntarios de Naciones Unidas erogando más de 500 millones de dólares que no generan desarrollo local sino mayor pobreza para el pueblo haitiano.

    Si el presidente haitiano ha confirmado en Naciones Unidas el pasado 1o. de octubre que el actual proceso electoral legislativo y presidencial está “en buen camino” y que “el pueblo haitiano ha comprobado su capacidad a tomar su destino en sus manos”, ¿por qué pide un retiro progresivo de la misión y no su fin definitivo? ¿Por qué seguir imponiendo la presencia de miles de militares en las calles?

    La presencia de la Minustah no ha sido un factor de paz ni de estabilización en Haití sino de mayor violencia e impunidad. El personal de la misión ha violado los derechos de los Haitianos en varias ocasiones. Se reportaron casos de abuso sexual y de recurso a la prostitución, que ni siquiera fueron investigados sino solapados por la ONU y los mismos gobiernos que mantienen sus tropas en territorio ajeno. En 2010, se reprimió una protesta de la población local opuesta a la Minustah en la que un haitiano fue asesinado. También cascos azules provenientes de Nepal fueron acusados de ser al origen de la epidemia de cólera que provocó miles de muertos en Haití. La Minustah no está en Haití para proteger a su pueblo sino para resguardar los intereses geopolíticos y económicos de los Estados Unidos de América y otros países del Norte en su territorio, lleno de riquezas en su subsuelo.

    Como ciudadanos mexicanos, queremos aclarar que el anuncio del presidente de la República de los Estados Unidos Mexicanos, Enrique Peña Nieto, el pasado 27 de septiembre en la Asamblea General de la ONU, no nos representa. En este informó del despliegue de militares Mexicanos en Haití antes del fin del año 2015. ¿Qué tipo de retiro progresivo es este? Nos parece totalmente paradójico y criminal de parte de la ONU pretender asegurar la paz en Haití enviando allí a militares mexicanos acusados de violaciones a derechos humanos y ejecuciones extrajudiciales en su propio pais. Recordamos que son sospechosos de haber participado en la desaparición forzada de 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, Guerrero, el 26 de septiembre del 2014.

¡Queremos paz para el pueblo de Haití!

¡No militares!

Otros Mundos A.C./Amigos de la Tierra México

Invitan a la marcha por el Día de la Indignación #26Septiembre

A un año de la desaparición forzada de 43 normalistas y el asesinato de 3 más. Familiares de desaparecidos y estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, Guerrero, invitan este 26 de septiembre de 2015 a la manifestación de Los Pinos al Zócalo de la Ciudad de México a las 12:00 del día.

#DiadelaIndignación

Ayuno 43×43:
    Zócalo del Distrito Federal
    23 de septiembre, 19 hrs.- 25 de septiembre, 14 hrs.

Marcha:
    26 de septiembre de 2015, 12 hrs.
    Pinos-Zócalo (Distrito Federal)

Campaña Es hora de dejar en paz a Haití

ALBA Movimientos

Desde la Articulación de los Movimientos Sociales hacia el ALBA (ALBA Movimientos) se ha impulsado la Solidaridad con el Pueblo Haitiano, además de denunciar la intervención de las Tropas de Minustah allá.

Dando seguimiento a esta Campaña produjeron los afiches para difundirlos ampliamente entre los militantes de los Movimientos Populares de todo el mundo.

El lema del Afiche es “Es hora de dejar en paz a Haití” además de poner las palabras del Ministro de Defensa Brasileiro anunciando que se retiraran las tropas en 2016. Brasil hoy es el país que tiene mayor contingente militar en Haití, seguido por Chile y Uruguay. Por eso es necesario presionar a  estos gobiernos desde los Movimientos Populares de todo nuestro continente.

Todos los años, en Octubre, el Consejo de Seguridad de la ONU se reune para definir la continuidad o no de la Minustah, por eso es muy  importante que en este mes de Septiembre y Octubre avancemos en una amplia Campaña Comunicacional en todos los medios que tenemos (afiches, páginas de internet, redes sociales, debates, conferencias, movilizaciones, etc).

Informe: Justicia fallida en el estado de Guerrero

Open Society

El 26 de septiembre de 2014 decenas de estudiantes activistas de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa fueron detenidos e introducidos en vehículos policiales en Iguala, Estado de Guerrero. Desde entonces, ninguno de los estudiantes—43 en total—ha sido visto de nuevo.

La desaparición de los 43 estudiantes, atribuida a intereses corruptos entre políticos locales, narcotraficantes y policías, desató protestas a lo largo y ancho del país debido a la frustración que provoca la impunidad. Esta atrocidad se convirtió en símbolo de la incapacidad de México de proteger a sus ciudadanos de homicidios y desapariciones, así como para investigar y sancionar a los culpables.

Justicia fallida en el estado de Guerrero analiza los factores que subyacen a dicha incapacidad, y ofrece recomendaciones para cambiar la situación. El resultado de más de dos años de investigación y análisis por parte de expertos nacionales e internacionales se condensa en este informe, que ofrece el análisis más exhaustivo hasta la fecha de las deficiencias estructurales del sistema de justicia de Guerrero; fallas que han permitido a los autores de la violencia actuar con casi absoluta impunidad.

Justicia fallida en el estado de Guerrero pone de manifiesto la profunda ausencia de voluntad política para frenar los abusos y llevar ante la justicia a los agentes estatales implicados en ejecuciones extrajudiciales, torturas y desapariciones forzadas. Asimismo, propone un plan de reformas que sienten las bases para la recuperación de la confianza en el sistema de justicia y el Estado de Derecho en Guerrero.

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Comunicado urgente de la REMA: ¿Elecciones democráticas?

Al Pueblo de México
Mientras la partidocracia en todos los medios electrónicos, una vez más, hace cuentas alegres de la “gran contienda electoral” al unísono de sus múltiples académicos, analistas y portavoces para refrendar la felicidad del Secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, por su exitoso operativo “de seguridad” y gran despliegue militar y de fuerza federal, para hacer callar a los de por si siempre descalificados “rijosos e inconformes”, y a la vez que Lorenzo Córdova Vianello, árbitro de la contienda, da un “mensaje positivo y minimizador” de la jornada electoral con los previos y nobelescos (de nobel) indígenas manipulados y pagados para intentar superar su resbalón telefóbico (si, telefóbico) lleno de racismo contra los pueblos indígenas de este país, mientras todo ello cubre a toda la sociedad mexicana, lo cierto es que en varios estados del país van surgiendo infinidad de casos, comunicados, videos e información que evidencian como dicha contienda estuvo plagada de agresiones, golpes, intimidaciones y hasta asesinatos.

Ahí está ya lo sucedido en Tlapa de Comonfort Guerrero, en donde la policía y el ejercito golpearon brutalmente a la población incluyendo niños, allanaron sus casas y asesinaron de un tiro en la espalda, al joven Antonio Vivar Díaz, estudiante de último semestre de la UPN, quien lamentablemente se suma a la larga lista de agravios, asesinatos y desapariciones forzadas que, en Guerrero, la población general sufre constantemente, pero en particular los jóvenes, maestros, líderes sociales y representantes de organizaciones sociales, quienes en esta contienda también salieron a emitir de forma distinta su voto y voz, manifestándose abiertamente en contra de que siga prevaleciendo como forma de gobierno la corrupción, la impunidad y la falta de procuración de justicia en manos de políticos -mujeres y hombres-, carentes e ignorantes de toda teoría y práctica de la verdadera democracia y quienes, recurrentemente violan todos los derechos de la ciudadanía de forma directa e indirecta.

No obstante que la celebración de los partidos con sus “nuevos puestos” de poder corre a cántaros por los medios de información que tiene controlados, las redes sociales rompen el cerco informativo y a través de la comunicación de mano a mano, de oído a oído, de twitter a twitter y de periodistas y reporteros comprometidos con la verdad, va trascendiendo información de Puebla, de Oaxaca, de Guerrero, de Michoacán, de Chiapas y hasta del DF, en donde el saldo rojo se va incrementando conforme se van documentando los daños. Basta citar a la Sra. Laura Chinchilla presidenta de la delegación de la Organización de Estados Americanos (OEA), quienes tuvieron que suspender su misión de observación electoral en Oaxaca, porque ni para ellos había seguridad.

No deja de sorprendernos la capacidad que tiene el estado para realizar un gran despliegue de fuerza militar y policiaca para enfrentar a una ciudadanía que protesta contra la incapacidad y corrupción de sus gobernantes. Ojalá algún día esa gran fuerza letal deje de parecer de juguete para enfrentar la corrupción de sus propios políticos o cuando las empresas privadas nacionales y extranjeras despojan a los pueblos, y ni que decir, de siquiera amedrentar al crimen organizado con quien comparten la misma mesa, lo cual no es un supuesto, porque en todos los estados los hemos visto juntos degustando la vísceras de sus víctimas y por ello es inviable realizar denuncias sin sufrir más agravios.

Este 7 de junio a nivel nacional más de la mitad de la población del padrón nominal no participó en la contienda y no lo hizo por ver el futbol, ni por apáticos, ni por apolíticos…. lo hizo porque los partidos no representan ni la dignidad, ni una verdadera democracia y por ello no se han ganado ese voto. Quienes participaron en la contienda y anularon su voto, lograron un porcentaje más alto que la mitad de los partidos, pero ello no significará nada porque al gobierno no le importa. Y por si fuera poco, quien gobierne lo hará con menos del 13% del padrón nominal a nivel nacional, del cual más del 70% son votos corporativos logrados bajo coacción de prebendas, de ofrecer espacios políticos o de entregar cuotas de poder locales, mismo que se traducen en sus grandes esbirros de golpeadores. En otros casos, como Guerrero, el nuevo gobernador tendrá la credibilidad de solamente un tercio de la población, pero también con un altísimo porcentaje de votos corporativos, que por supuesto agreden y destruyen el espíritu de una verdadera democracia, que incluyendo la tan cacareada acción de “patriotismo electoral” la vuelven un mero acto de matemáticas básicas.

Nos cuesta trabajo entender cómo es que a pesar de la grave situación que vive la nación, y a pesar de las elecciones, que de una u otra forma son un escaparate para olvidar momentáneamente la crudísima realidad nacional, es el Estado quien se obstina en reprimir toda acción social y ciudadana. No tiene otra forma de hacer política social. Son incapaces de cambiar de rumbo porque suponemos no saben hacer otra cosa que robar y entregar los bienes de la nación para su beneficio personal. No tienen una visión ni una mira política orientada a la soberanía nacional y son en sí mismos politiqueros de baja monta quienes suponen que el uso de la fuerza les dará poder eterno. Realizar elecciones en un contexto militarizado desmorona la escaza legitimidad que ello conlleva y por ello este gobierno abona a seguir incrementando el descontento social. En estas elecciones no ganaron los partidos, en realidad perdieron, pero no se dan cuenta por soberbios e ignorantes.

A ustedes la partidocracia se les olvidan hasta sus propios muertos, porque ya están de fiesta y ni quien les lleve una veladora a los 21 asesinatos políticos que tuvieron durante las campañas electorales. Sólo son “victimas colaterales” no existen más, los sustituyeron por otros cuerpos vivos pero inertes, y quizás es por esa carencia de sentimientos, dignidad y falta de vergüenza lo que les da rabia y por ello les lleva a reprimir a los padres, madres y alumnos de Ayotzinapa, porque ellos les recuerdan y recordaran por años que no debe haber elecciones hasta que aparezcan los 43 para que participen en la contienda electoral. Sin embargo, qué son para ustedes 43 votos si ni siquiera sus 21 muertos respetan. Los asesinatos de sus candidatos son fruto de la impunidad, corrupción, violencia y colusión que han amasado con el crimen organizado y sus grupos de choque corporativizados.

Hoy en varias regiones del país las elecciones forzadas han sembrado la discordia entre la población, porque sus grupos de choque viven ahí mismo, pero ahora que no estén los militares protegiéndoles, verán que también están expuestos a la población indignada y agraviada. Este fruto nos lo ha dejado su “democrático” proceso electoral, porque son incapaces de calcular sus actos. Seguirán con sus cuentas alegres, pero lo cierto es que ya no pueden ocultar la realidad de sus hechos porque esta elección se llevó a cabo con un baño de sangre.

CASTIGO A LOS POLICÍAS Y MILITARES QUE PARTICIPARON EN EL COBARDE ASESINATO DE ANTONIO VIVAR DÍAZ EN TLAPA DE COMONFORT, GUERRERO.
LIBERTAD INMEDIATA A QUIENES FUERON DETENIDOS POR PARTICIPAR DE FORMA ORGANIZADA EN SUS LOCALIDADES CONTRA LAS ELECCIONES.
ATENCIÓN MÉDICA Y PSICOLÓGICA PERMANENTE Y DE CALIDAD A TODOS LOS HERIDOS QUE AYER, EN DIVERSAS PARTES DEL PAÍS, FUERON AGREDIDOS DURANTE LA CONTIENDA ELECTORAL POR PARTE DE LAS FUERZAS POLICIACAS, MILITARES Y SUS GRUPOS CORPORATIVOS DE CHOQUE.
NUESTRA SOLIDARIDAD CON LAS DIFERENTES LUCHAS Y MANIFESTACIONES SOCIALES DE TODO EL PAIS QUIENES EN ESTOS MOMENTOS SIGUEN SUFRIENDO LAS CONSECUENCIAS DE ESTE GOBIERNO REPRESOR.
SI FALTAN 43 CÓMO ES QUE VAMOS A IR A VOTAR.
PORQUE VIVOS SE LOS LLEVARON VIVOS LOS QUEREMOS.

RED MEXICANA DE AFECTADOS POR LA MINERÍA (REMA)

Los acuerdos de San Andrés: 19 años

Magdalena Gómez. La Jornada

El pasado 16 de febrero se cumplieron 19 años de la firma de los acuerdos de San Andrés en 1996, en el marco del diálogo entre el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y el gobierno federal, suspendido por los zapatistas siete meses después sin que el gobierno de Ernesto Zedillo hiciera nada por rencauzarlo. Más bien provocó la crisis con el incumplimiento a los acuerdos y el virtual sabotaje a la mesa sobre democracia y justicia. El espejismo del gobierno foxista pronto condujo a la imposibilidad de reanudar el diálogo ante la contrarreforma indígena de 2001, que se distanció de los históricos acuerdos en aspectos fundamentales.

Han transcurrido 14 años y tanto el gobierno de Felipe Calderón como el de Enrique Peña Nieto definieron la línea de aplicar el carácter de «cosa juzgada» sin abrir la posibilidad de otra reforma constitucional que enderece los entuertos. En cambio, las múltiples concesiones mineras y megaproyectos del anterior gobierno, y sobre todo el actual, que avanzó con reformas como la energética, plantean un desafío a la subsistencia misma de los pueblos indígenas. Ante ello los movimientos indígenas se rearticularon regionalmente con otros nuevos a fin de enfrentar la dinámica de conflictos desatados por la agresión a sus territorios. Por cierto, hay que destacar que el Estado no ha logrado cooptar al movimiento político indígena organizado. La decisión que anunció el EZLN tras la marcha del silencio, en diciembre de 2012, de reactivar vínculos con el Congreso Nacional Indígena (CNI) forma parte también de otra etapa del mismo movimiento, aún armado, en la cual se retoma la centralidad de la causa indígena, si bien no exclusiva en la agenda zapatista.

No se debe olvidar que durante casi 20 años el EZLN ha enfrentado la continuidad de la contrainsurgencia por diversas vías, pese a que está vigente la Ley para el Diálogo y éste se suspendió, pero formalmente no está roto. Dos décadas que encierran agravios ominosos, como el intento de desmantelar los municipios autónomos, la creación de grupos paramilitares, la impune masacre de Acteal, el divisionismo propiciado activamente mediante la zanahoria de los programas gubernamentales. Este factor debe tenerse presente cuando valoremos el proyecto autonómico de las juntas de buen gobierno en Chiapas, construido por el zapatismo a contrapelo del Estado.

El balance que ofreció la primera compartición EZLN-CNI en agosto de 2014 es muy significativo, pues los 29 espejos de despojo y movimientos de resistencia en curso fueron acompañados por un informe sobre criminalización que dio cuenta detallada de los asesinados, los desaparecidos, los presos, los perseguidos con orden de aprehensión y los casos de hostigamiento.

Tras una densa reconstrucción histórica señalaron: «En la actualidad los capitalistas neoliberales, con el apoyo de todos los partidos políticos y los malos gobiernos encabezados por el criminal y jefe paramilitar Enrique Peña Nieto, están aplicando las mismas políticas de despojo a gran escala que aplicaron los liberales del siglo diecinueve, los carranzas o los obregones, apuntalándose en la militarización y paramilitarización, asesoradas por los cuerpos de inteligencia estadunidense, en aquellas regiones donde las resistencias se enfrentan al despojo».

Y concluyeron que se reafirma el rompimiento del EZLN y el CNI con toda la institucionalidad: «Nadie va venir a salvarnos, nadie absolutamente nadie va a luchar por nosotros. Ni partidos políticos, ni políticos, ni leyes, ni nada hay para nosotros». En síntesis, ofrecieron un fiel retrato de la política de Estado de reprimir antes que resolver y dar cauce a los conflictos. Este panorama nos muestra que la mira de la lucha de estos pueblos está en la defensa de sus derechos autonómicos y territoriales y al acercar la lupa a cada uno se puede observar que su resistencia se apoya en diversas estrategias. Algunos mantienen en jaque al Poder Judicial, a tribunales agrarios, y lamentablemente su experiencia demuestra que no se logran concretar los triunfos jurídicos, por lo que las vías de hecho se imponen.

Los acuerdos de San Andrés se convirtieron en el programa de los pueblos, que se expresa en la resistencia y estrategias de defensa y ni hablar de la razón de Estado que definió el suyo desde 2001 para ofrecer a los pueblos políticas asistencialistas, culturalistas que nada tienen que ver con la autonomía y la libre determinación. Por ello no respetan sentencias de la Corte a favor de la tribu yaqui ante la violación a su derecho territorial al agua sin pasar siquiera por el derecho a la consulta; por ello están presos Nestora Salgado, comandante de la policía comunitaria en Guerrero; Marco Antonio Suástegui, del consejo opositor a la construcción de la presa La Parota, y Mario Luna y Fernando Jiménez, de la tribu yaqui. Por ello los pueblos no esperan que se cumplan los acuerdos de San Andrés.

Minustah en Haití al servicio del capitalismo

Entrevista Beverly Keene :”La Minustah busca mantener a Haití al servicio de los intereses de Estados Unidos, las empresas y los capitales que ellos representan”

Beverly Keene, de Jubileo y Dialogo 200 Argentina

Resumen Latinoamericano/ Por Mario Hernandez.

M.H.: Se cumplieron 5 años del terremoto que costara entre 250.000 y 300.000 vidas y también un nuevo aniversario de la independencia de Haití, primer país independiente de Latinoamérica, en 1804, 6 años antes de nuestro 25 de mayo. Con la característica particular de convertirse en la primer República negra que, entre otras cosas, eliminó la esclavitud. A estas efemérides se suma el hecho coyuntural que el Comité por el retiro de las tropas de Haití, en representación de una serie de organizaciones de nuestro país y latinoamericanas, se hizo presente en la Embajada de Chile con el objetivo de entregar una carta dirigida al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que visitó Haití entre los días 23 y 25 de enero y este mes está presidido precisamente por Chile. Esta declaración lleva una serie de firmas, como las de Jubileo Sur, Diálogo 2000 Argentina, Encuentro Sindical Nuestra América, Comité Argentino de Solidaridad por el retiro de las tropas de Haití, el premio Nobel de la paz Adolfo Pérez Esquivel, Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo (Línea Fundadora), Mirta Baravalle de la misma organización, Frente Popular Darío Santillán, etc. Para conversar sobre esta carta al Consejo de Seguridad que aborda varias temáticas que queremos profundizar, hoy hemos invitado a Beverly Keene de Jubileo Sur, Diálogo 2000, miembro también del Comité argentino por el retiro de las tropas de Haití.

Una carta al Consejo de Seguridad que creo es una pintura bastante ajustada de la situación que vive el pueblo haitiano, donde se han producido algunas novedades de la coyuntura política de ese país como ser lo que humildemente he denominado un golpe de Estado, porque el pasado día 13 de enero han caducado las autoridades parlamentarias del Senado y la Cámara de Diputados y el actual presidente Martelly se ha hecho de la suma del poder público estableciendo un gobierno que funcionará por decreto, a través de la designación de un Primer Ministro, Evans Paul, quien reemplazó a Laurent Lamotte y que ha prometido en su asunción convocar a elecciones durante el transcurso del corriente año. Mientras tanto esa situación se produzca, lo cierto es que Michelle Martelly va a gobernar por decreto. ¿Qué nos podés comentar respecto de esta situación?

-B.K.: En primer lugar agradecer el espacio para hablar sobre Haití, a veces parece algo muy lejano a nosotros, pero aquí en Argentina tenemos muy presentes las estrategias diversas de intervención de Estados Unidos, Canadá y Francia, los poderes centrales en nuestro mundo hoy, en lo que son las vidas y las decisiones políticas de los pueblos de América Latina. Sin ir más lejos, tenemos el golpe de Estado que se produjo en Paraguay hace unos años atrás, el golpe en Honduras en 2009, y también el golpe de Estado en Haití en 2004, que llevó a la constitución de la Minustah, esta misión que se suponía era para la estabilización de Haití, cuando en realidad lo que se percibió en ese momento y que se ve con mucha más fuerza hoy, es que busca mantener a Haití al servicio de los intereses de Estados Unidos, las empresas y los capitales que ellos representan.

Efectivamente, el golpe de Estado que se está dando en este momento en Haití, por las vías más modernas, no hace falta que los marines estadounidenses ocupen Haití como lo hicieron en 1915 porque se pueden dar el lujo de tercerizar la ocupación militar, como en este caso con las tropas de nuestros países de América Latina, de Argentina, Uruguay, Brasil, Chile, etc., una serie de países que se utilizan no por un decreto del Departamento de Estado de Estados Unidos sino a través del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, al que recientemente el Presidente boliviano bautizó muy correctamente como “Consejo de Inseguridad”. En este caso se lo utiliza para imponer la voluntad de los poderes de siempre. En Haití esto significa en este momento el inicio de un período de gobierno por decreto. Justamente esta visita que se realizó el fin de semana el Consejo de Seguridad, sin duda tiene como objetivo legitimarlo, rodear esta nueva situación de un nuevo Primer Ministro, que puso un gabinete que los medios llaman “de consenso”, buscando legitimar este proceso que no es la voluntad del pueblo haitiano, sino de los poderes que en este momento ocupan Haití a través de las tropas de la Minustah.

Esta es una situación a la que tenemos que prestar mucha atención, en la que estamos involucrados directamente a través de la presencia de tropas argentinas en Haití, por ende, apoyando esta situación, y tenemos que escuchar la voluntad que expresan las voces de las organizaciones sociales y populares haitianas, reconociendo que tanto en Haití como en todos nuestros países hay una gran diversidad de opiniones políticas.

Hay partidos que se llaman y se dicen de la “oposición” que están acordando con Martelly para poner en marcha este nuevo golpe de Estado y hay partidos de la oposición que están en contra de esto y siguen manifestándose día por medio de manera masiva en las calles de Puerto Príncipe y en otras partes del país. También hay otros partidos, organizaciones sociales, movimientos populares en Haití que siguen reclamando lo que es lógico, su soberanía, el derecho del pueblo haitiano de hablar y poder decidir por sí mismo sin la intromisión de Estados Unidos, Francia, Naciones Unidas, la OEA o la Minustah, en sus asuntos internos. Muchas de estas organizaciones con las que tenemos un contacto permanente expresan su preocupación, no solamente por esta pérdida de soberanía sino por lo que está sucediendo por detrás de esto, un proceso de recolonización donde la política de mantener los salarios de Haití como los más bajos de todo el hemisferio, favoreciendo la instalación de la maquila, industrias sobre todo textiles que exportan a Estados Unidos a precios de miseria y favoreciendo la instalación de grandes empresas de exploración petrolera y aurífera.

En estos momentos han llevado una queja formal al Banco Mundial por su apoyo al gobierno de Haití por la posibilidad de reformar la Ley minera para que las empresas mineras ingresen y consoliden su posición sin ninguna posibilidad que el Parlamento las supervise o controle.

También hemos visto en estos últimos meses muchas manifestaciones y protestas de parte de comunidades pesqueras costeras en algunas partes de Haití, que han sido señaladas como sedes de futuras inversiones para el turismo de lujo, oponiéndose a la política de desplazar a las comunidades locales y quitar al pueblo no solamente los medios de su subsistencia sino también cualquier posibilidad de decir algo al respecto.

Hay protestas casi todos los días frente a estos avances en lo que es un proceso de recolonización y saqueo, porque aunque no lleguen a nuestros diarios hay una sociedad muy activa y alerta. Tenemos una situación muy compleja, de la que nos llega poca información, la clave es entender que hay un golpe de Estado en curso en Haití y la Minustah, la Misión de estabilización de las Naciones Unidas, es cómplice de ese golpe.

Las tropas de Argentina, Brasil y otros países no están cumpliendo misiones humanitarias, sino cumpliendo como guardia pretoriana de la verdadera ocupación de Estados Unidos, Canadá y Francia. La situación es de mucha dificultad para un pueblo que es el más empobrecido de nuestra América Latina y el Caribe. Es importante recordar que en su época de colonia francesa fue la más rica de Francia, entonces no es que Haití, como todos los países de América Latina seamos pueblos pobres, hay un proceso concreto de empobrecimiento que el pueblo haitiano sigue sufriendo. No podemos aceptar que esos países extranjeros sigan determinando su destino y menos aceptar tropas de nuestros países ayudando en ese cometido.
 

La presencia de la Minustah forma parte de una industria rentable para las Fuerzas Armadas latinoamericanas

-M.H.: Luego vamos a volver sobre la realidad interna de Haití. Has mencionado la presencia de tropas argentinas, y las has denominado como tropas de ocupación, no son las únicas tropas que forman parte de la Minustah, recientemente se ha producido un debate entre el gobierno saliente y entrante en Uruguay, el futuro Canciller Nin, quien fuera vicepresidente de Uruguay habló del inminente retiro de las tropas uruguayas y rápidamente el Canciller Almagro y el Ministro de Defensa, Huidobro, salieron a desautorizar ese punto de vista. Más allá de estas “contradicciones” me gustaría que le expliques a nuestros oyentes cuáles son los fundamentos por los cuales las autoridades argentinas sostienen la presencia de tropas de nuestro país en Haití.

-B.K.: En cierto sentido te podría responder que es muy fácil, en septiembre del año pasado le tocó al Congreso Argentino aprobar la salida de las tropas que participan en Haití de la Minustah, es una autorización que tiene que dar el Congreso en cualquier situación en la que Argentina quiera enviar tropas fuera del país o recibir dentro del país la visita de tropas de otro. En ese debate que se hizo en septiembre en la Comisión de Relaciones Exteriores y la de Defensa de la Cámara de Diputados, un debate que el partido oficialista no esperaba, ya que esperaba un trámite como en anteriores oportunidades, varios partidos se presentaron para reclamar y exigir que hubiera un debate sobre la participación de Argentina en la Minustah y acordaron que los funcionarios del gobierno que fueron a defender la posición de la participación de Argentina en la Minustah no tenían argumentos, pero es una decisión que se sigue manteniendo.

Esa sería la respuesta más fácil. Otra es la que nos dio el Ministro de Defensa, Agustín Rossi, que en marzo del año pasado visitó Haití durante 36 horas haciendo un saludo de rutina a las tropas estacionadas en Haití, cuando volvió de este viaje, al que lo acompañaron un batallón de periodistas, alrededor de 50 de casi todos los medios masivos, el mensaje fue muy claro y lo repitieron todos los medios, diciendo que la Minustah y la participación Argentina es una misión humanitaria, más o menos dando a entender que se había establecido después del terremoto y no 5 años antes del mismo. Se mostraban escenas de las tropas argentinas entregando agua en bidones a la población, como ejemplo de misión humanitaria. Esos son los argumentos oficiales.

En la Cancillería, a la que hemos ido durante los últimos años en repetidas ocasiones distintas organizaciones populares y sociales, para insistir en nuestro reclamo de retiro de las tropas, por lo general tampoco defienden mucho la presencia, sí hacen mucho hincapié en que no es una decisión de la cual Argentina se hace cargo sola, afirman que están ahí con otros países de América Latina y que el retiro sería en conjunto, no se tomaría una decisión unilateral.

Podría resultar respetable o entendible esta posición, pero no quita la responsabilidad de cada gobierno de estar defendiendo una situación para la que no tienen argumentos de peso. Si el motivo por el cual tenemos tropas de Argentina en Haití durante 11 años es para seguir entregando agua a la población, podemos concluir que ha sido un fracaso total, porque supongamos que esa fuese su misión, la verdad es que tanto tiempo y que no se haya podido resolver nada respecto a un problema que obviamente es real, porque el suministro de agua se sigue manejando con camiones y con bidones con agua y no se ha ido más allá de eso, lo que de por sí sería reconocer el fracaso de la misión.

Está claro que ese no es el objetivo. Según el Consejo de Seguridad, Haití representa un peligro para la seguridad de la región. Muchos gobiernos siguen aprobando eso en octubre cuando revén el mandato de la Minustah, y ese peligro se pone en boca de Estados Unidos, que dice que si la situación se complica en Haití van a tener muchos inmigrantes haitianos en las costas de Florida y como no pueden permitirlo la situación debe ser controlada.

Esa es la defensa oficial que se hace en el Consejo de Seguridad. Pero, en realidad, lo que vemos es que la permanencia se da por objetivos de control, dominación, saqueo y colonización del pueblo haitiano. Podemos mirar un poco más los argumentos que esgrimen distintos gobiernos en nuestra América Latina, podemos reconocer que hoy en día existen debates, como el que hemos visto entre el gobierno saliente y el entrante en Uruguay, que significa que hay preocupación sobre esta presencia de tropas latinoamericanas en Haití. Más de uno ha llegado a la conclusión de que se han metido en un callejón sin salida, en una trampa que puso Estados Unidos y Francia cuando invitaron a los gobiernos “progresistas” liderados en 2004 por Lula de Brasil y Néstor Kirchner de Argentina, de hacerse cargo de esa ocupación y que ahora no saben cómo salir con elegancia.

El segundo problema, que puede ser muy pedestre, es que la presencia de los latinoamericanos hoy en Haití, en cualquiera de estas misiones de paz, es una industria, significa recursos, posibilidades de viajar para los efectivos que se anotan, es un privilegio, un premio monetario en su carrera.

En Argentina en estos últimos días, cosa que no sale en los noticieros, las Fuerzas Armadas han creado una escuela de capacitación y entrenamiento para los efectivos que participen en misiones de paz. Todo esto forma parte de una industria y cortar la presencia de Argentina en la Minustah la pone en peligro. Ese es un tema que se ve en la discusión, por ejemplo, con Uruguay. Las Fuerzas Armadas uruguayas tienen muchos más antecedentes en la participación en estas misiones de paz de Naciones Unidas, y es un reducto que también vemos en Brasil, incluso en Bolivia, Paraguay, Ecuador, donde se ponen en juego las relaciones entre los distintos sectores de nuestros propios gobiernos. Aquí, entre las Fuerzas Armadas, el Ministerio de Defensa, Cancillería y Presidencia, no todos tienen la misma postura. Y en más de un gobierno de América Latina en voz baja se ha planteado que no pueden sacar las tropas de Haití porque pueden crear un problema con las Fuerzas Armadas de su país. Esto es importante y lo tenemos que tener presente, si volvemos a los argumentos que los gobiernos esgrimen para sostener esa presencia en Haití, en los inicios se hablaba de la posibilidad de crear una política distinta, de cooperación regional con América Latina, que es algo que la mayoría de nosotros quisiéramos apoyar, como hace Cuba con la presencia de sus misiones médicas desde hace muchos años, como ha sido la política de Venezuela a través de Petrocaribe, un apoyo muy concreto a la vida cotidiana del pueblo haitiano. Pero lo que estamos viendo es que los gobiernos de América Latina están repitiendo los mismos errores, las mismas políticas de dominación y presencia de los poderes centrales. Por eso entendemos que este año, 2015, el centenario de la primera invasión y ocupación de Estados Unidos a Haití, es un momento crítico en la vida del pueblo haitiano, porque las organizaciones sociales haitianas están reivindicando la necesidad de avanzar en la refundación de su país, no con la ocupación de tropas de toda América Latina, sino con políticas realmente de cooperación, solidarias, de los pueblos y los gobiernos latinoamericanos, es el momento para avanzar en ese plano y eso significa, primero, retirar las tropas y luego avanzar en políticas de apoyo en aspectos humanitarios, las cuales sin dudas se pueden ofrecer y también en todo lo que pueden ser políticas de apoyo a la institucionalidad haitiana, pero la que decida su pueblo, no Estados Unidos, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, la OEA o la Comunidad Internacional.

-M.H.: Uno de los argumentos esgrimidos por nuestros gobernantes ha sido el factor que implica que la Minustah ayuda a detener la violencia en Haití. Yo me tomé el trabajo de investigar al respecto y la tasa de homicidios en Haití es de 7 por cada 100.000 habitantes, mientras que el promedio en el Caribe es de 17, en México ese índice llega a 24 y en Honduras a 91. Una de las cosas que llama la atención es que, a pesar de las políticas asistencialistas y de las donaciones que proporcionaron ayuda a los damnificados del terremoto, el país sigue inmerso en la pobreza. Mencionaste en alguna de tus intervenciones anteriores, la construcción de hoteles de lujo. ¿Cómo se entiende esto?

-B.K.: Uno piensa en los intereses económicos que están en juego, tanto Haití como Cuba, están cerca de las costas de Estados Unidos, y es un destino caribeño muy atractivo, con aguas cálidas y hermosas. Esa atracción juega un rol en lo que es la codicia, la política hacia un país al cual efectivamente al poder no le importa que tiene un pueblo con mucha historia, de respeto hacia sí mismo, de resistencia, siendo el primer país en poner fin a la esclavitud, tal vez el único pueblo que logró tanto su liberación de la esclavitud como del yugo colonial.

Haití sigue siendo muy codiciado, sus playas, su sol, la riqueza de su suelo, que si bien ya está muy deteriorado por las políticas de saqueo que se sostienen hace varios siglos, ahora se apunta al subsuelo y las riquezas ahí escondidas. Ese es el problema, el pueblo haitiano estorba, está de más, sea yendo para la costa de Florida en sus barquitos buscando sobrevivir al hambre y la miseria que reina, o el que quiere vivir en su país y seguir luchando.

La política de dominación tiene intereses geopolíticos muy claros, de Estados Unidos a Venezuela tenés que pasar por encima o alrededor de Haití, si se quiere seguir bloqueando a Cuba, Haití está en un lugar privilegiado y como hemos visto históricamente a Estados Unidos le es suficiente con decir que es el “patio trasero” para seguir manteniendo el dominio. Desde todos esos puntos de vista el pueblo haitiano sigue sufriendo esta política de control y dominación.

La novedad de estos últimos casi 11 años de la presencia de la Minustah es la participación de las tropas de América Latina en ese proceso, lo cual lo torna doblemente inaceptable. La política de Estados Unidos, Canadá y Francia sigue más o menos sus canales de siempre, y han encontrado a muy bajo precio la posibilidad de involucrar tropas de otros países para llevar a cabo el trabajo sucio. Digo esto, porque hay varias declaraciones de los Embajadores de Estados Unidos en los debates del Consejo de Seguridad, e incluso hay un estudio hecho por una oficina de auditoría del Congreso de Estados Unidos que ha arrojado como información que para ese país mantener las tropas de la Minustah es mucho más barato que pagar la presencia de tropas propias. O sea, lo que para los militares de América Latina es un gran premio, por los recursos que se mueven detrás de su presencia en Haití, para Estados Unidos es muy barato.

Para hablar de una realidad que tiene que ver con la actualidad del pueblo haitiano, Estados Unidos, Francia y Canadá son los países que más contribuyen al presupuesto de la Minustah, en este momento están invirtiendo alrededor de U$S 500 millones anuales para mantenerla. Les costaría muchísimo más mandar tropas de sus propios países. Esos mismos gobiernos han sido incapaces, con todo el conjunto de la llamada Comunidad Internacional, de poner U$S 50 millones para agua potable y la erradicación de la epidemia de cólera que fue introducida por la Minustah, es su responsabilidad aunque la ONU está escondiéndose detrás de que las tropas tienen inmunidad.

-M.H.: Quisiera señalar que el cólera había desaparecido de Haití hace 50 años. Hace pocos días un Tribunal Superior de Nueva York, donde se presentaron los damnificados a exigir indemnizaciones, se pronunció en este sentido que mencionabas, que las tropas no son imputables, por lo tanto, no corresponde el pago de ningún tipo de indemnización ni cargo a las Naciones Unidas, por la reintroducción del cólera en Haití.

La prensa mundial tiende a presentar los problemas de Haití de manera tendenciosa, extrapolándolos de su historia y del contexto neocolonial en que se engendraron. Como si la pobreza endémica, la desforestación, el cólera, los daños de las catástrofes nacionales y el arrebato de la soberanía hubieran sido producidos por un pueblo inconsciente o por un clima adverso, poco se habla de los despilfarros y costos logísticos de las más de 10.000 ONGs presentes en Haití que en la mayoría de los casos constituyen más del 60% de su presupuesto.

-B.K.: Yo no conozco exactamente la cifra, pero la presencia de grandes ONGs existe y me consta que es avasallante. No solamente por los informes y las versiones periodísticas y las denuncias de las organizaciones haitianas, sino porque te das cuenta llegando a Haití desde el propio aeropuerto. La presencia principalmente de las grandes organizaciones que se dedican supuestamente al desarrollo o reconstrucción después de una catástrofe como el terremoto, que son una industria que mueve mucha plata, tal vez en algunos casos con mejores intenciones otras con peores, y ve cualquier situación de este tipo como un campo fértil de ganancias, en prestigio, en plata y en la posibilidad de seguir su cometido.

También hay una enorme presencia de organizaciones más chicas pero que pertenecen a los sectores religiosos muy conservadores de Estados Unidos, algunos independientes y otros que forman parte de conglomerados con una clara intencionalidad política. Otros tienen una intencionalidad política menos clara pero sirven a los mismos fines. Esa presencia en Haití que fue terriblemente multiplicada después del terremoto ha sido denunciada por las organizaciones haitianas de manera sistemática. En cierto sentido sienten que detrás de ese ejército llamado de cooperación o de desarrollo, se les escapaba de las manos cualquier posibilidad de opinar sobre la reconstrucción de su propio país.

Las decisiones y la plata siempre se mueven por fuera del presupuesto del gobierno haitiano y el Estado ha sido muy marginado. Es un proceso que lamentablemente no es único en Haití, se puede ver en muchos otros países, como Indonesia después del tsunami en 2005, y lo vimos en Irak, porque las guerras significan una destrucción descomunal de la población y su reconstrucción son industrias de gran escala. En el caso de Irak, las denuncias de la tercerización de la guerra a empresas contratistas de parte del gobierno de Estados Unidos, y luego la reconstrucción de esos desastres realizadas por las mismas empresas. Esta es una realidad de nuestro siglo XXI, la destrucción y la reconstrucción son industrias y significan una exclusión de la población de cualquier posibilidad de participación en la toma de decisiones, en el diseño de esas reconstrucciones, en la construcción de su futuro.

Hoy en Haití esto forma parte importante del contexto, entonces cuando escuchamos a las organizaciones populares haitianas o las manifestaciones callejeras pidiendo el retiro de los extranjeros, tenemos que ubicarnos en esa realidad, están hartos de esa intervención porque están en todos lados, desde lo más cotidiano hasta el debilitamiento del Estado Haitiano. No hay organización popular haitiana que defienda la capacidad del Estado haitiano o del gobierno para resolver los problemas del pueblo, reconocen grandes debilidades, pero en ese reconocimiento también está que, tanto los gobiernos de la llamada “comunidad internacional” como las ONGs, las empresas contratistas y las instituciones financieras, participan con políticas deliberadas en ese debilitamiento del Estado.

Parte de lo que reclaman las organizaciones populares haitianas en este momento es que cambiar simplemente los nombres en el gobierno y en el gabinete y seguir excluyendo al pueblo haitiano de cualquier posibilidad de tomar las decisiones, no va a resolver los problemas políticos y sociales. Es el propio pueblo el que tiene que resolverlos y construir su propia fortaleza con organizaciones populares para lograr esos objetivos.

-M.H.: Personalmente los argumentos me han convencido de que Haití no es una amenaza para la paz mundial ni regional. No sé si a los que han escuchado este programa les ha sucedido lo mismo, pero el objetivo de esta entrevista era justamente clarificar sobre algunos aspectos poco conocidos de la realidad haitiana. Si ha quedado algún tema sobre el que desearías ampliar te invito a que lo hagas.

-B.K.: Algo que me gustaría agregar es una invitación, realmente tenemos una posibilidad y un privilegio pero que es también una necesidad de ir conociendo a este pueblo que ha contribuido tanto a la historia no solamente propia sino de América Latina y el mundo en la lucha por la independencia, por los derechos humanos y el fin de la esclavitud. Es un pueblo que tiene una cultura impresionante en lo que tiene que ver a sus contribuciones en el arte, la música, el teatro, el cine. Tenemos mucho para disfrutar de este pueblo y para aprender de sus luchas y su resistencia hoy en día. Es un deber que tenemos para ir consolidando los lazos de hermandad y de lucha conjunta con otros pueblos de América Latina.

Este año desde el Comité argentino de solidaridad por el retiro de las tropas de Haití esperamos poder avanzar con actividades, para lo cual nos ponemos a disposición de cuanta organización o casa cultural, para acercar la cultura de este pueblo y ver cómo podemos vincular más estrechamente las luchas, conflictos y resistencias también del pueblo argentino por su supervivencia, por su soberanía, por su autodeterminación con las luchas del pueblo haitiano. Va esa invitación, más allá de la presentación mañana de esta nueva carta en la Embajada de Chile.

-M.H.: Justamente aquí, en el barrio de Barracas, la Escuela 11 se llama República de Haití.

Firma Por el Retiro de las Tropas de Ocupación en Haití

Campaña de Firmas Avazz.org.

FIRMA LA CARTA AQUÍ

CARTA A JOSÉ MUGICA:

Señor Presidente de Uruguay

Somos simples ciudadanos de este país, orgullosos de su tradición democrática y pacifista, de su defensa de los principios básicos de autodeterminación y soberanía, que no son simples palabras.

Es claro para todos nosotros y también para usted que la intervención en la tierra hermana de Haití es injustificable, insostenible, y que además ha fracasado y no tiene ninguna perspectiva de aportar algo positivo al pueblo haitiano, ni tampoco al uruguayo. No vamos a repetir de nuevo los argumentos por todos conocidos, y de los que usted mismo ha sido un claro vocero al decir que «no seremos guardia pretoriana de una dictadura».

Luego de eso, señor presidente, no caben los eufemismos ni buscar matices ni palabras para evadir la realidad. Tal vez no podamos y no tengamos potestad para decir quien tiene la razón en Haití y quien no, pero entonces, por eso mismo, no tenemos nada que hacer allí con tropas de ocupación.

Si son altos los motivos para forjar compromisos y relaciones estrechas y recíprocas con los países de la región, causa que todos queremos, con más razón podemos decir que ninguna hermandad entre pueblos podrá construirse empezando con el abuso del hermano más débil, como es en este caso.

No puede haber cálculo ni interés particular ni sectorial ni excusa alguna que justifique ya continuar la presencia de las tropas uruguayas en Haití, en una ocupación que la sociedad haitiana rechaza día a día por todos los medios por los que puede hacerlo, porque los medios institucionales para que que ese pueblo exprese su propia opinión les han sido negados y se les sigue negando.

Se compartan o no los esfuerzos que su gobierno ha hecho en Haití, hoy, ya agotados por completo, resulta más que evidente que la única actitud de coherencia en la defensa de los principios que siempre ha sostenido nuestro país, solo puede ser el retiro total, inmediato e incondicional de las tropas uruguayas

Por lo anterior y por todo lo que usted ya sabe, señor presidente, le pedimos que antes de terminar su mandato sea el vehículo para que el país tenga un gesto supremo de dignidad, y deje de ocupar la tierra haitiana.

(Solicitamos que todos los adherentes a estos conceptos reproduzcan esta carta por todos los medios posibles, incluyendo redes sociales y listas de contacto, y la reenvíen a comunicacion@presidencia.gub.uy y a todos los destinos que les parezcan útiles)

Carta al gobierno de California por Ayotzinapa

¿EL GOBIERNO DE CALIFORNIA (USA), NEGOCIA CON EL GOBIERNO DE MEXICO?
Al Gobernador de California, Edmund Gerald Brown,

Mientras el gobierno de California firma un acuerdo histórico de colaboración internacional sobre el clima con el gobierno mexicano, en julio del 2014, sobre mercados de carbono, la lucha contra la deforestación y REDD, durante el gobierno del presidente mexicano Enrique Peña Nieto aparecen decenas de fosas clandestinas de restos humanos quemados y torturados; se registran asesinatos de periodistas, secuestros, violaciones sistemáticas a los derechos humanos; y por si fuera poco el crimen de Estado de los 43 normalistas de Ayotzinapa desparecidos por la policía que se suman a los miles de desaparecidos y asesinados en los últimos años.

 

El gobierno mexicano no ha logrado garantizar la seguridad, la estabilidad ni la paz en el país. Y si no puede proteger al pueblo mexicano, mucho menos el medio ambiente.

En medio de toda esta violencia el gobierno de Enrique Peña Nieto ha entregado a la deforestación los territorios, los bosques, las selvas, las áreas naturales protegidas, los manglares, entre otros ecosistemas terrestres y marinos a la depredación de los proyectos mineros, de represas, de parques eólicos, de parques industriales, de gasoductos, de extracción de gas y petróleo, de gas fracking, entre otros megaproyectos que lejos de cuidar y mantener un compromiso con el medio ambiente y contra la deforestación, crece la ola de la depredación y el extractivismo acelerado, poniendo en duda su capacidad con los compromisos asumidos con el gobierno de California.

Antes de elaborar acuerdos de compromisos por el medio ambiente y el cambio climático, el gobierno de California debiera impulsar primero un compromiso con aquellos que respetan la vida y los derechos humanos. Al fin, solicitamos con todo respeto al estado de California que abandona cualquier acuerdo con Mexico sobre cambio climatico, mercados de carbono, y REDD hasta que el gobierno de Mexico demuestra su capacidad de garantizar la seguridad de la población, y demuestra su habilidad de responder a las necesidades de sus ciudadanos.

¡PRIMERO, JUSTICIA PARA AYOTZINAPA!

Firman:
-Otros Mundos, A.C./Friends of the Earth, México
-Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA), México
-Movimiento Mexicano de Afectados por las Represas (MAPDER), México
-Acción Colectiva Socio Ambiental AC, Guanajuato
-Bios Iguana AC, Colima
-Procesos Integrales para la Autogestión de los Pueblos AC, Guerrero
-Frente Estudiantil Popular (FEP), Chiapas
-Red de Acompañamiento Popular (RAP), Chiapas
-Red Magisterial Popular, Chiapas
-Movimiento Unidad Popular de Izquierda (MUPI-Tapachula), Chiapas
-Red de Pueblos Zoques-Chapultenango, Chiapas
-Cooperativas de la Unión de Cafeticultores de la Sierra-Jocoltenango de la Paz, Chiapas
-Mesoamérica sin Fronteras-Región Mam, Chiapas
-Mocho-Cachiquel (Mazapa-Motozintla-Tapchula), Chiapas
-Movimiento Campesino Regional Independiente – Coordinadora Nacional Plan de Ayala Movimiento Nacional (MOCRI CNPA MN), Chiapas
-Consejo de Autoridades Agrarias en Defensa del Territorio de la región Montaña-Costa Chica del Estado de Guerrero, Guerrero

España: Informe Inercia, despilfarro y engaño en el gasto militar. Análisis del presupuesto de Defensa español del año 2015

Informe 25.

Autores: Pere Ortega y Jordi Calvo Rufanges.
Centre Delàs d’Estudis per la Pau · Justícia i Pau, Barcelona, diciembre 2014

El Gobierno ha presentado unos presupuestos de defensa para 2015 que suponen un cambio de tendencia en lo que se refiere al gasto militar español de los últimos años. Se produce por primera vez desde que empezó la crisis en 2008, un aumento del presupuesto militar español. Además, de nuevo, se trata de unos presupuestos de defensa tramposos porque, a sabiendas de que el gasto final en algunas partidas será considerablemente mayor, siguen ocultando sus intenciones bajo el más que inexacto cálculo de dos significativas partidas del presupuesto de Defensa: la destinada a los Programas Especiales de Armamento (PEAS) y la destinada al coste de las Operaciones militares en el exterior. Es también de gran relevancia este año el importante aumento del gasto destinado a la I+D militar.

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Llaman universitarios a nuevo paro de 72 horas por caso Ayotzinapa

HOY Seminario Otros Mundos sobre Ayotzinapa.

-Especial Guerrero, el tinglado que hace posible Ayotzinapa, de Desinformémonos.

Revista Proceso

La Asamblea Interuniversitaria, integrada por alumnos de la UNAM, la UAM, la UACM y el IPN, convocó a un paro de 72 horas y un cerco en la PGR para exigir la localización de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.

La tercera jornada global de acción fue acordada este sábado en una reunión en donde se determinó el paro de actividades los días 5, 6 y 7 de noviembre.

El próximo miércoles 5 se realizará una marcha de la residencia oficial de Los Pinos al Zócalo, a partir de las 16:00 horas.

Ese día también iniciará el paro de 72 horas de suspensión de actividades en las universidades participantes.

Al día siguiente se efectuará un cerco al edificio de la PGR ubicado en Paseo de la Reforma 211, de las 8:00 a las 14:00 horas.

La Asamblea Interuniversitaria también aprobó la conformación de un comité central contra la represión, con una estrategia para enfrentar las agresiones, hostigamiento y amenazas por parte de autoridades y grupos porriles.

Para ello, este lunes 3 se realizará una reunión a las 17:00 horas en el auditorio Che Guevara de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM.

La Asamblea acordó además seguir el modelo de CGH de la UNAM, movimiento que paralizó a la máxima casa de estudios del país durante más de 10 meses entre 1999 y 2000.

“Se conformó una comisión de enlace para hacer llegar nuestros acuerdos a la Asamblea Nacional Popular que se reúne en Guerrero, así como a las diferentes organizaciones sociales y sindicales que se reunirán el próximo martes en el local del Sindicato de Telefonistas para hacerles un llamado a sumarse al paro nacional del 5 de noviembre y a nuestro plan de acción”, detalla en un comunicado la Asamblea Interuniversitaria.

Eurodiputados piden suspender Acuerdo Global México-UE por desaparecidos de Ayotzinapa

Marco Appel y Yetlaneci Alcaraz. Revista Proceso.

BRUSELAS (proceso.com.mx).- Un grupo de 16 diputados del Parlamento Europeo se manifestaron “profundamente consternados” por los hechos ocurridos en el estado de Guerrero y solicitaron que el proceso de modernización del Acuerdo Global entre México y la Unión Europea (UE), que negocian actualmente las partes, sea suspendido hasta poder “reconstruir la confianza” con las autoridades mexicanas en materia de derechos humanos.

“El Acuerdo Global del 2000 y la Asociación Estratégica del 2008, celebrados entre México y la UE, establecen mecanismos de cooperación entre ambas partes en el respeto indivisible de los derechos humanos y la seguridad de los ciudadanos, como se estipula en la cláusula de derechos humanos”, refieren en una masiva dirigida a Catherine Ashton, la Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores; a Federica Mogherini, quien fue designada para reemplazar a Ashton a partir del 1 de noviembre; y al presidente Enrique Peña Nieto.

“Por lo tanto –continúa la carta presentada con el membrete del Parlamento Europeo–, creemos firmemente que cualquier modernización del Acuerdo Global, como se prevé para el próximo año 2015, tiene que ser puesta en espera y sus objetivos y áreas previstas para la liberalización deben ser revisadas”.

Para los eurodiputados, “el primer y principal deber ahora es reconstruir la confianza en la aplicación efectiva del respeto de los derechos humanos, a los que el Estado mexicano se ha comprometido a nivel nacional e internacional”.

El crimen organizado, se subraya, “tiene que ser detenido, dondequiera que se halle, y las lagunas jurídicas tienen que ser eliminadas más allá del área económica”, ya que “los efectos secundarios son indeseables”.

Los signatarios, entre ellos la vicepresidenta del Parlamento Europeo, la austriaca Ulrike Lunacek, afirman que, en ese aspecto, “las dos partes, tanto la UE y México, tienen una responsabilidad compartida”.

Los 16 eurodiputados firmantes provienen de Austria, Francia, Suecia, Alemania, Finlandia, Reino Unido, España y Bélgica, y a ella se unieron cuatro diputados del Parlamento Alemán (Bundestag). Los eurodiputados pertenecen al Grupo de los Verdes/ Alianza Libre Europea, pero también cuenta con la firma de la presidenta del Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea/Izquierda Verde Nórdica, Gabriele Zimmer.

Los legisladores europeos claman que “ya es hora de acabar con la impunidad en México”, y señalan que “no deben ocurrir nuevos casos como el de los 43 estudiantes secuestrados de Guerrero y de las tumbas encontradas cerca del lugar.

“Le instamos a que haga todo lo posible para esclarecer plenamente los hechos en Iguala, Guerrero y (para) sancionar a todos los responsables. Y exigimos firmemente que no se dé ningún paso adicional en relación con los acuerdos comerciales antes de que la situación de los derechos humanos en México haya mejorado de manera significativa”, exigen los eurodiputados.

El 20 de junio pasado, una de las firmantes de la carta, la eurodiputada alemana Franziska Keller, escribió en su blog que ya era hora de elevar el tono con México en materia de derechos humanos. Se dijo además “muy decepcionada” de la respuesta que le ofreció Ashton cuando le preguntó si consideraba “hacer algo” en ese sentido.

“Creo que la UE debe hablar más fuerte cuando los derechos humanos están en peligro y asegurarse que son respetados. Esa debería ser la prerrogativa de la política exterior de la UE”, concluyó Keller.

¡Ya basta! desde Berlín

En Berlín, Alemania, la vicepresidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo, Bárbara Lochbihler, condenó la desaparición de los 43 normalistas de la Normal Rural de Ayotzinapa y los crímenes cometidos el pasado 26 de septiembre en Iguala, Guerrero y urgió a la Unión Europea a que durante las negociaciones para renovar el Acuerdo Global entre el organismo europeo y el gobierno mexicano, que tendrá lugar el próximo año, se exija a éste el cumplimiento cabal de los derechos humanos y la seguridad de los mexicanos.

En un pronunciamiento hecho a título personal y transmitido desde su oficina en Berlín, la política alemana y miembro de la fracción del Partido Verde en el Parlamento Europeo, se dijo indignada y preocupada por lo sucedido en México y criticó con severidad la política en materia de seguridad de los gobiernos mexicanos.

“Con indignación, rabia y preocupación vemos en el Parlamento Europeo las desapariciones forzadas y los asesinatos en el estado Guerrero de México. Ya se sabía que ni la “guerra contra el narcotráfico” del expresidente Enrique Calderón ni las iniciativas del nuevo gobierno de Enrique Peña Nieto podían disminuir la violencia en el país. Los asesinatos siguen y según las informaciones de defensores de derechos humanos están desapareciendo más personas que antes”, recrimina Lochbihler en su misiva.

Más aún: “Los acontecimientos de Iguala son más que una expresión de la incapacidad de parar a los delincuentes, es un grito que nos dice: Ya basta. (…) ¿Cómo es posible que sabiendo que la mayoría de las alcaldías de Guerrero están bajo el control del crimen organizado, los autoridades federales no intervinieron?”.

La parlamentaria europea señala que a la par de México, la Unión Europea, como comunidad internacional, también debe asumir la responsabilidad que en casos de este tipo le corresponden. Y es que, dice, el crimen organizado que opera en México, lo hace también a nivel internacional con complicidad internacional en lo que se refiere al lavado de dinero, el consumo de drogas y la venta de armas, además del silencio cómplice de los políticos europeos.