Efectos secundarios del ‘fracking’ que la industria no quiere que sepa

Actualidad RT

La lista de los efectos secundarios nocivos del ‘fracking’ se está ampliando con cada estudio científico sobre el tema, y los riesgos ambientales, de salud y de seguridad que representa esta técnica de extracción de gas siguen siendo un tema que divide a la sociedad estadounidense.

 

En un artículo publicado en el portal alternet.org el periodista Reynard Loki enumera ocho efectos secundarios del ‘fracking’ que la industria no quiere que sepamos.

1. Contaminación del agua

De acuerdo con el artículo, durante el proceso de fractura hidráulica, el gas metano y productos químicos tóxicos se filtran del pozo y contaminan las aguas subterráneas de la zona, que luego se utilizan para obtener el agua potable para las comunidades locales.

 

Así, ha habido más de 1.000 casos documentados de contaminación de las aguas cerca de las zonas del ‘fracking’, así como los casos de daño sensorial, respiratorio y neurológico causado por la ingestión de agua contaminada.

«Estamos quemando los muebles para calentar la casa», lamenta John H. Quigley, exsecretario del Departamento de Conservación y Recursos Naturales de Pensilvania. «Alejándose del carbón hacia el gas natural, estamos buscando un aire más limpio, pero estamos produciendo grandes cantidades de aguas residuales tóxicas con sales y materiales radiactivos», explica.

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2. Escasez del agua

Más del 90% del agua utilizada en el ‘fracking’ nunca regresa a la superficie, retirándose definitivamente del ciclo natural, lo cual es «una mala noticia para los estados afectados por la sequía o escasez de agua», reza el artículo.

La reorientación de los suministros de agua para la industria del ‘fracking’ no solo provoca el aumento de los precios del agua, sino también reduce la disponibilidad del líquido vital para el riego de los cultivos.

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3. Daño para los niños

El líquido residual del proceso de fractura hidráulica se deja en pozos a cielo abierto. Al evaporarse, libera los peligrosos compuestos orgánicos volátiles (COV) a la atmósfera, contaminado el aire y provocando las lluvias ácidas y el ozono a nivel del suelo.

La exposición al aire contaminado en las zonas del ‘fracking’ puede conducir a una serie de problemas de salud, incluyendo asma, dolores de cabeza, presión arterial alta, anemia, ataques al corazón y cáncer.

También puede tener un efecto perjudicial sobre los sistemas inmunológico y reproductivo, así como sobre el desarrollo fetal e infantil, advierte alternet.org, citando un estudio del 2014 llevado a cabo por el Departamento de Medio Ambiente y Salud Laboral de Colorado, que reveló que las madres que viven cerca de sitios de ‘fracking’ son un 30% más propensas a tener bebés con defectos congénitos del corazón.

4. Gas mortal

Un reciente estudio realizado por investigadores de la Universidad Johns Hopkins descubrió que los hogares ubicados en zonas rurales cercanas a los sitios del ‘fracking’ tienen una concentración de radón un 39% más alta que los ubicados en zonas urbanas ‘no fracking’.

El radón, un gas radiactivo de origen natural, es la segunda causa de cáncer de pulmón en todo el mundo, después de fumar.

5. Arenas movedizas

El ‘fracking’ requiere el uso de arena fina o arena ‘frac’, lo que ha impulsado un auge de la extracción de arena de sílice en Minnesota y Wisconsin.

«El sílice puede dificultar la respiración y causar irritación respiratoria, tos, obstrucción de las vías respiratorias y un mal funcionamiento pulmonar», cita el autor del artículo, Reynard Loki, las palabras del Environmental Working Group (el Grupo de Trabajo Ambiental).

«La exposición crónica o prolongada puede conducir a la inflamación pulmonar, la bronquitis y el enfisema, así como provocar una enfermedad pulmonar grave conocida como ‘silicosis’, una forma de fibrosis pulmonar. La enfermedad pulmonar relacionada con el sílice es incurable y puede ser fatal; mata a cientos de trabajadores en EE.UU. cada año», añade el grupo.

6. Terremotos

El 20 de abril, el Servicio Geológico de EE.UU. publicó un informe muy esperado que confirmó lo que muchos científicos ya habían especulado durante mucho tiempo: que el proceso de ‘fracking’ provoca terremotos.

En concreto, durante los últimos siete años, las regiones geológicamente estables de EE.UU. han experimentado movimientos de fallas que no se han movido en millones de años. Además, los terremotos causados por el ‘fracking’ son difíciles o incluso imposibles de pronosticar.

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7. Impacto climático

Cuando hablamos del gas natural, se trata principalmente de metano, un gas de efecto invernadero muy potente que atrapa 86 veces más calor que el dióxido de carbono. Y debido a las fugas de metano durante el proceso de fracturación hidráulica, el ‘fracking’ puede ser peor que la quema de carbón.

«Incluso las pequeñas fugas en el sistema de producción y suministro de gas natural pueden tener un impacto climático suficiente para destripar todo el beneficio que trae el cambio de energía de carbón a la de gas», escribe Joe Romm, el editor fundador del blog ‘Climate Progress’, citado por alternet.org.

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8. Compra de favores políticos

Por último, uno de los efectos secundarios más dañinos del ‘fracking’ «no tiene que ver con la cantidad de productos químicos que fluyen hacia el suelo, sino más bien con la cantidad de dinero que fluye hacia el bolsillo de los políticos» que apoyan al ‘fracking’.

Según un informe de 2013 citado por el artículo de alternet.org, las contribuciones de los grupos comerciales y empresas relacionadas con el ‘fracking’ a los candidatos al Congreso que representaban a los estados y distritos con ‘fracking’ aumentaron más de un 230% entre los ciclos electorales de 2004 y 2012.

Este crecimiento es casi dos veces mayor que el de las contribuciones de la industria del ‘fracking’ a los candidatos de los distritos ‘no fracking’ durante el mismo periodo, señala el artículo.

 

 

 

MINERAS: ¿IMPUNIDAD CON EL PERMISO DEL ESTADO?

Por Ilse García, sinembargo.mx

En el país existen al menos 36 conflictos mineros, la mayoría relacionados con casos de contaminación, daño a las comunidades y despojos a los pobladores donde se ubican estas zonas generadoras de una riqueza; de todos estos casos, al menos 70 por ciento son de compañías extranjeras. Datos del observatorio de Conflictos Mineros de América Latina y de la propia Secretaría de Economía, destacan que al menos tres cuartas partes de los proyectos mineros son de empresas de capital canadiense, que ampliaron su presencia en México tras la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
De acuerdo con datos del sector, siete de las minas de oro más grandes en nuestro país, están concesionadas a las firmas canadienses Goldcorp, Agnico Eagle, Alamos Gold, New Gold, Yamana Gold y Torex Gold Resources.
Diversas mineras canadienses a menudo son objeto de conflictos, algunos incluso de gran trascendencia, como el caso del asesinato del dirigente comunitario Mariano Abarca, en noviembre de 2009, luego de que se pronunció en repetidas ocasiones sobre los impactos ambientales y sociales de una mina de la firma candiense Black-fire Exploration en el municipio de Chicomuselo, Chiapas.
Pero también hay mexicanas, como Grupo México, que han sido señaladas por ambientalistas y organizaciones internacionales por actuar con impunidad, situación que hasta ahora ha dejado contaminación, despojo y daños a la salud de miles de personas.

 

El 30 por ciento del territorio mexicano está en manos de 293 empresas de capital extranjero que extrae, explora y transforma los recursos minerales, así lo destacan cifras oficiales y grupos ambientalistas que defienden el derecho de los ciudadanos a su tierra y a la propiedad de lo que ésta genera. A la par del crecimiento de la industria minera, también han aumentado las violaciones a los derechos de las comunidades y a las garantías laborales de quienes trabajan en la extracción, así como la cada vez más preocupante “devastación” al medio ambiente que, de acuerdo con diversas organizaciones, ha generado daños irreversibles que afectan a todo el país.

Miembros de organizaciones globales como Greenpeace, y las mexicanas Proyecto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (ProDESC) y el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), plantearon a SinEmbargo que en el país hay una visión generalizada de “pagar para contaminar” y no de prevención, puesto que en la mayoría de las concesiones que otorga el Estado, los estudios de impacto ambiental se realizan luego de firmarse los contratos y, en muchos casos, esos estudios son “débiles”.

 

Además, denunciaron esos organismos, imperan también las constantes violaciones a las comunidades indígenas y a sus sitios sagrados, la criminalización y el hostigamiento de los defensores de la tierra y del medio ambiente.

 

En México existen al menos 36 conflictos mineros en proceso, según el Observatorio de Conflictos Mineros de América Latina, que en su mayoría se relacionan con accidentes, como la explosión que se registró en 2006 en la mina Pasta de Conchos, en Coahuila, donde 65 trabajadores perdieron la vida, y de los cuales 63 cuerpos aún no han sido rescatados. O como la defensa del pueblo Wixárika ante la devastación del territorio Sagrado Wirikuta, o el caso de La Sierrita en Durango, donde la empresa canadiense Excellon Resources ha violado los contratos que había signado, y los ejidatarios han tenido que enfrentarse no sólo a la minera sino a la complicidad de las autoridades mexicanas y el Gobierno canadiense.

 

Según las organizaciones, el Estado mexicano se ha dedicado durante los últimos años a darle a las empresas trasnacionales y nacionales del sector la garantía de que en el país “ellos van a poder hacer lo que quieran”, comprometiendo así el futuro de las comunidades indígenas y el derecho ambiental de todos los mexicanos.

 

LA PRODUCCIÓN MINERA

 

VER MAPA : Proyectos Mineros de Empresas con Capital Extranjero

 

De acuerdo con la Secretaría de Economía (SE), el sector minero contribuye con el 4.9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB). Tan sólo en 2013, la inversión en este sector alcanzó un monto de 6 mil 575.8 millones de dólares, y para el año 2014 se estimó un total de 6 mil 175.5 millones de dólares, de acuerdo con la Cámara Minera de México (Camimex).

 

La SE reportó que México ocupó en 2013 el primer lugar en la producción de plata a nivel mundial, con un volumen de producción de 5 millones 821 mil toneladas, lo que representó el 26 por ciento de la productividad del mundo. La Nación ocupó también el segundo lugar en la producción de bismuto –un elemento químico para tratar los males estomacales–, con 824 mil toneladas; de fluorita, con un millón 210 mil toneladas, y de wollastonita –mineral que se utiliza en el sector de pinturas–, con 57 millones 302 mil toneladas.

 

Además se posicionó en el cuarto lugar en la producción mundial de cadmio, uno de los metales más tóxicos existentes, con un volumen de un millón 451 mil toneladas. De igual forma fue el cuarto productor de plomo, con 253 mil toneladas.

 

México fue también el octavo productor de oro a nivel mundial en 2013, al producir 118 mil toneladas del metal áureo.

 

En la República Mexicana al menos 25 estados registran producción minera. De ellos, Sonora fue la entidad con mayor participación a nivel nacional durante 2013, año en el que generó 66 millones 554 mil 248 pesos.

 

La dependencia federal destaca en sus informes que nuestro país es el primer destino en inversión en exploración minera en América Latina y el cuarto en el mundo.

 

Esta industria ha registrado un considerable crecimiento durante los últimos dos sexenios. En 2014 se registraron al menos 902 proyectos mineros operados por 293 compañías de capital extranjero, 205 de origen canadiense.

 

El mayor número de concesiones mineras de empresas con capital extranjero se concentran en Sonora con 216, Chihuahua con 114, Durango con 98, Sinaloa con 93, Zacatecas con 69, Jalisco con 60, Guerrero con 37, Oaxaca con 34, Nayarit con 22, Michoacán con 23, Guanajuato con 19, San Luis Potosí con 17, Coahuila con 12, Baja California y Colima con 11 cada uno, Puebla con 10, el Estado de México con ocho, Chiapas con 7, Baja California Sur también con 7, Querétaro con 6, Hidalgo y Veracruz con 4 por cada entidad, Tamaulipas con 2 y Morelos con 3. Finalmente, el estado de Nuevo León registra un solo proyecto de exploración.

 

De acuerdo con el Sistema de Administración Minera (SIAM), dependiente de la Secretaría de Economía, durante 2013 y 2014 se otorgaron más de 2 mil concesiones. Sin embargo, la dependencia federal no ofrece datos específicos de cuántos proyectos mineros se aprobaron durante la administración de Felipe Calderón Hinojosa, periodo en el que asegura organizaciones civiles, el territorio concesionado creció en un 53 por ciento.

 

Toda la información con respecto a la producción e inversión minera que ofrece la SE en su página oficial de la Internet está relacionada con empresas de capital extranjero, pero no reporta la participación de empresas de capital mexicano ni tampoco cuántas concesiones se les han otorgado.

 

LEGISLACIÓN LAXA

El director de Comunicación de Greenpeace México, Raúl Estrada González, expone que en el país la legislación minera está enfocada principalmente en incentivar la inversión en este sector y, sin embargo, no existe un marco regulatorio que permita cuidar el medio ambiente, ni que proteja los derechos de las comunidades.

Mientras en otras partes del mundo las compañías tienen que cumplir con estándares muy altos para cuidar el impacto ambiental y las afectaciones a las comunidades por las actividades que realizan, en México hay ocasiones en que ni si quiera se llevan a cabo de manera previa los estudios necesarios para comenzar a explotar las tierras.

El coordinador del Área de Justicia Trasnacional de ProDESC –una organización no gubernamental que tiene como objetivo defender y promover los derechos económicos, sociales y culturales–, Juan Antonio López Cruz, sostiene que el Estado mexicano ha comprometido “la seguridad de las y los ejidatarios, así como la de las comunidades indígenas, en esta idea de poder abrir las puertas a la inversión extranjera”.

López Cruz expone que la corrupción que existe en nuestro país, es otro de los factores que permiten a las empresas pasar por encima de los derechos de los propietarios de la tierra, a quienes ponen en desventaja ante esos corporativos, debido a que las autoridades “ejercen sus funciones por ciertas cantidades de dinero”.

 

“La corrupción, la participación del Gobierno aceptando algún tipo de dádiva por parte de las empresas, eso es algo que afecta no sólo en el tema de la minería sino en el tema de muchas otras trasnacionales o grandes proyectos nacionales, en los cuales se permite que estas empresas puedan llegar a violentar los derechos de las y los propietarios de la tierra”, añade.

 

Una investigación de Greenpeace Internacional exhibió en varios países, entre ellos México, cómo las débiles legislaciones que existen han fallado en su objetivo de proteger la salud de las personas y sus comunidades, al tiempo que se promueve la negligencia en el cumplimiento y seguimiento del buen manejo del medio ambiente en la industria minera.

 

En el caso de México, explicó la organización, “las leyes sobre descarga de desechos son laxas y en la mayoría de los casos no son cumplidas por las industrias, quienes cuentan con la ayuda de la pasividad del Gobierno”.

La abogada ambiental Larisa de Orbe explicó a Greenpeace que en México las leyes se han vuelto cada vez más flexibles en los últimos años, un ejemplo es el haber excluido de la legislación local las manifestaciones de impacto ambiental y de riesgo que viven las poblaciones.

Por otra parte, el activista Raúl Estrada indica que durante el sexenio del Presidente Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) se dieron una serie de cambios y decretos en la legislación minera, para que este tipo de empresas se pudieran instalar en el país con mayor rapidez y facilidad. Esa misma política, afirma, continúa en la administración de Enrique Peña Nieto, así como la entrega desmedida de concesiones.

Andrea Cerami, abogado del Cemda, asegura que un tema fundamental en la legislación minera debería ser “no tratar las cuestiones ambientales como las últimas. En México para poder hacer una minera la empresa generalmente solicita el permiso a la autoridad para poderlo hacer, y después se ocupa de los temas ambientales, como último”.

Destaca que por lo regular cuando las autoridades y las empresas abordan los temas ambientales, los proyectos ya están listos, e incluso ya se han dado todos los permisos.

 

LA COMPLICIDAD CANADIENSE

 

En México, de acuerdo con datos del observatorio de Conflictos Mineros de América Latina y de la propia SE, el 70 por ciento de los proyectos mineros pertenecen a empresas de capital canadiense, las cuales ampliaron su presencia en México luego de que entró en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

 

Según la Camimex, siete de las minas de oro más grandes en nuestro país, están concesionadas a las empresas canadienses Goldcorp, Agnico Eagle, Alamos Gold, New Gold, Yamana Gold y Torex Gold Resources.

 

Diversas firmas canadienses a menudo son objeto de conflictos. Algunos de gran trascendencia, como fue el caso del asesinato del dirigente comunitario Mariano Abarca, en noviembre de 2009, luego de que se pronunció en repetidas ocasiones sobre los impactos ambientales y sociales de una mina de la firma candiense Black-fire Exploration en el municipio de Chicomuselo, Chiapas.

Otra empresa de ese mismo país, First Majestic Silver, dueña del Proyecto La Luz, ubicado en la región de San Luis Potosí conocida como Wirikuta, ha sido objeto de reclamo. En noviembre de 2014, el Consejo Regional Wixárika exigió que la mina abandone la zona, luego de que IDM Mining INC, otra canadiense, ya había dejado el proyecto.

 

Mientras, en 2004, la minera Excellon Resources comenzó a explorar las tierras de la comunidad del ejido La Sierrita de Galeana, en el municipio de Tlahuililo en Durango, donde buscaba plata, plomo y zinc, fuera de los territorios establecidos en el contrato de arrendamiento con los ejidatarios de la zona.

 

En su acompañamiento a la comunidad de La Sierrita, la organización ProDESC ha detectado muchas irregularidades de las autoridades mexicanas, quienes incluso han llegado a “parecer representantes de las empresas”.

 

Estas actitudes, asegura la organización, son reiteradas en diferentes estados en donde operan minas y en donde hay una protesta legítima en contra de la instalación o en contra de las afectaciones que está haciendo una empresa.

 

Juan Antonio López expone que en el caso de Durango la participación de diferentes autoridades estatales y federales están en complicidad con la Embajada canadiense, ésta última señalada por presionar a las autoridades mexicanas “para que violentaran a las y los ejidatarios de La Sierrita”.

 

También dice que la participación del Gobierno mexicano y del canadiense ha llegado a niveles de violentar a los ejidos usando a la fuerza pública para desalojar a los habitantes que se han manifestado en contra de la mina.

 

Recuerda que la importancia de este caso radica en que la mayoría de las minas en México y en toda Latinoamérica son canadienses, y con ello está implícita la participación de su Gobierno, “que es el que presiona e influye dentro de nuestro Gobierno, para que se violente y se reprima a los ejidatarios que están protestando y defendiendo sus derechos en contra de una mina canadiense”.

 

En febrero pasado, las organizaciones Mining Watch Canada y United Steelworkers, presentaron el informe “Las entrañas de la complicidad canadiense”, en el cual recordaron que se considera un aspecto normal de las actividades consulares de Canadá respaldar los interese de las empresas del mismo origen a nivel internacional.

 

Sin embargo, denunciaron, existen pruebas contundentes en el comportamiento de representantes canadienses en México que han intentado ayudar a la empresa Excellon Resources a evadir sus responsabilidad por violaciones al contrato pactado con el ejido en cuyas tierras opera la mina La Platosa en el estado de Durango.

Este conflicto es uno de los muchos en los que empresas mineras canadienses han estado involucradas en México. Incluso, a través de su análisis, estas asociaciones concluyeron que las misiones canadienses promueven y protegen los intereses de las empresas mineras originarias de ese país “a costa de los derechos individuales y colectivos de las comunidades afectadas”.

 

En el caso de otra canadiense, Blackfire Exploration, en Chiapas, las organizaciones United Steelworkers, Fronteras Comunes y Alerta Minera Canadá alertaron en un informe basado en una solicitud de acceso a la información, que la representación de ese país posibilitó que se estableciera la mina presionando al estado de Chiapas, luego de que la firma encontró dificultades para instalarse.

 

En este conflicto, en el que perdió la vida el activista Mariano Abarca, la Embajada de Canadá en México se encargó de resolver los problemas de la firma en la entidad, ignorando las protestas de las comunidades e incluso hizo caso omiso de las amenazas a los activistas locales.

 

Abarca fue asesinado en 2013, posteriormente la mina fue clausurada por razones ambientales y se supo que la empresa había realizado pagos directos a la cuenta personal del Alcalde local para limitar las protestas, lo que en la actualidad es objeto de una investigación de la policía federal (RCMP) de Canadá.

 

Estos casos, alertan las organizaciones, representan un preocupante ejemplo del significado que el Gobierno de Canadá le puede estar dando a la “diplomacia económica” que figura como uno de los aspectos centrales de su Global Markets Action Plan (Plan de Acción sobre los Mercados Mundiales) dado a conocer en noviembre del 2013, que indica que la totalidad del cuerpo diplomático canadiense se mantendrá al servicio de los intereses privados, y de las maneras en que este enfoque podría posibilitar mayores abusos empresariales.

 

Finalmente, destaca el estudio, esas revelaciones “escasamente sorprenderán a muchos en Latinoamérica que ya estiman que las autoridades canadienses actúan con una notable parcialidad”.

 

UN EJEMPLO CLARO: LA SIERRITA

 

El 29 de agosto del 2012, en el estado de Durango, aproximadamente un centenar de elementos del Ejército Mexicano y de las policías federal y estatal utilizaron la fuerza para desmantelar un campamento pacífico enfrente de la mina La Platosa, propiedad de Excellon Resources. El ejido La Sierrita, una comunidad agrícola de 127 ejidatarios propietarios de los predios, exigía que la firma respetara el contrato de arrendamiento que ambas partes habían firmado en 2008, y que la empresa había violado.

 

Las protestas inciaron desde el 8 de julio de ese año y desde ese momento la firma decidió suspender las operaciones de la mina, debido a que los trabajadores se unieron a los pobladores en un gesto de solidaridad.

 

Juan Antonio López, abogado de ProDESC, detalla: “Presentamos una demanda de recisión de contrato, precisamente por incumplimientos a un contrato ya existente y por violaciones a los derechos de las y los ejidatarios”.

 

La demanda se presentó al mismo tiempo que la mina interpuso también una demanda de recisión. Actualmente se está llevando a cabo la etapa de pruebas, luego se dictará sentencia al caso y sea cual sea el resultado, implica la devolución de mil 100 hectáreas, que contempla el contrato.

 

En esos ejidos ya se llevó a cabo la etapa de exploración, explica el también activista, pues se detectaron obras de barrenos y hoyos por donde se iba diseñando la veta de plata. Por esto, en esos terrenos ya hay una afectación, como el compactamiento de tierra así como la contaminación por tiradero de aceite.

El litigante dice que se había mantenido un diálogo con la empresa para tratar el tema de cómo se iban a resarcir los daños causados en los terrenos, además de cómo se reivindicarían los derechos violados de los ejidatarios. Sin embargo, desde el año pasado esas negociaciones se rompieron y pese a que se ha intentado retomarlas, hasta el momento “la empresa no ha querido sentarse aún ha dialogar”.

 

“Las ejidatarias y los ejidatarios han apostado por el desarrollo de la región, tanto económico y la inversión, pero también por el respeto a sus derechos”, precisa.

 

Aunque actualmente, la gran parte de los ejidatarios están pidiendo que “se vaya la empresa, que se vaya la mina”, porque no ha producido, y además ha violentado a los habitantes de la comunidad.

 

¿Y LAS EMPRESAS MEXICANAS?

 

Pese a que la mayoría de las concesiones están en manos de empresas extranjeras, las firmas nacionales también se han visto involucradas en conflictos mineros, accidentes, y una gran contaminación del medio ambiente.

 

De acuerdo con la Camimex, el 30 por ciento de las concesiones en el país se encuentran en manos de firmas mexicanas. Entre ellas destacan Grupo México, de Germán Larrea; Industrias Peñoles, de Alberto Baillères González, y Frisco, que es propiedad de Carlos Slim Helú.

El accidente más importante, y que abrió las puertas a un sinnúmero de investigaciones al sector minero, fue el sucedido en la mina de carbón de Pasta de Conchos, de Grupo México, en Coahuila. La tragedia se registró el 19 de febrero de 2006 y ahí murieron un total de 65 mineros luego de una explosión provocada por una alta concentración de gas metano.

 

Los mineros fallecidos se encontraban trabajando a 490 metros y dentro de un túnel horizontal de 1.6 kilómetros de largo. De acuerdo con los peritos, quedaron a 150 metros bajo tierra y únicamente se lograron extraer dos cuerpos de las 65 personas que murieron sepultadas. A nueve años del siniestro, las familias aún reclaman los cadáveres que permanecen en el fondo de la mina.

 

Uno de los desastres ecológicos más recientes del sector minero es el derrame, sucedido el pasado 7 de agosto, de 40 mil metros cúbicos de ácido súlfurico procedentes de la mina Buenavista del Cobre, propiedad de Grupo México, en los ríos Bacanuchi y Sonora. De acuerdo con Greenpeace, es el peor desastre ambiental registrado en esa entidad y en el país. Ese derrame afectó a unas 22 mil personas de siete municipios: Arizpe, Banamichi, Baviacora, Aconchi, Cananea, Ures y Hermosillo.

 

Sobre el tema, Sinaí Guevara, coordinadora de la campaña de Tóxicos de Greenpeace México, plantea que “(en el caso de Sonora) esta minera no va a cerrar a pesar del daño causado, inclusive la compañía ha mostrado su interés particularmente en proyectos peligrosos como el fracking”.

 

En tanto, Raúl Estrada expone que el desarrollo del caso, sobre todo el tema de la reparación del daño, se ha manejado sin transparencia y no se sabe si se han llevado a cabo todas las medidas necesarias de saneamiento.

 

Además, en Sonora, las minas de Industrias Peñoles también se han visto involucradas en diferentes casos. Uno de los más recientes, es La Parreña, que ha sido señalada por contaminar un río y una presa en la entidad, la cual, según ejidatarios de la zona, vierte desechos tóxicos [sulfato de cobre] en el arroyo Milpillas en el municipio de Santa Cruz, ubicado a unos 15 kilómetros de la frontera entre México y Arizona.

A finales de abril, ex empleados de la mina Fresnillo PLC, del mismo consorcio y ubicada en Caborca, Sonora, denunciaron una serie de irregularidades en sus despidos, además sostuvieron haber sido objeto de acoso y amenazas por parte de esa compañía, luego de que exigieron al Sindicato Nacional Minero Metalúrgico, Sección 94, que hiciera una rendición de cuentas.

 

Los mineros acusaron que la empresa, al momento de despedirlos, los obligó a firmar una carta donde la deslindaban de cualquier accidente o enfermedad que hayan sufrido o contraído durante sus años en la mina.

 

Los ex trabajadores aseguran que durante los despidos, de hasta ahora al menos 30 empleados, se han registrado una serie de irregularidades tanto en la manera en que realizaron sus liquidaciones, como en la forma en que los corrieron, pues aseguran han sido amenazados e intimidados. Explicaron que la minera tampoco les dejó corroborar si sus liquidaciones eran las que marca la ley, puesto que los presionaron para que firmaran.

PAGAR PARA CONTAMINAR

En México, de acuerdo con datos del observatorio de Conflictos Mineros de América Latina y de la propia SE, el 70 por ciento de los proyectos mineros pertenecen a empresas de capital canadiense, las cuales ampliaron su presencia en México luego de que entró en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Cifras de la Camimex muestran que siete de las minas de oro más grandes en nuestro país están concesionadas a las empresas canadienses Goldcorp, Agnico Eagle, Alamos Gold, New Gold, Yamana Gold y Torex Gold Resources.

Además, diversas firmas canadienses a menudo son objeto de conflictos. Algunos de gran trascendencia, como fue el caso del asesinato del dirigente comunitario Mariano Abarca, en noviembre de 2009, luego de que se pronunció en repetidas ocasiones sobre los impactos ambientales y sociales de una mina de la firma candiense Black-fire Exploration en el municipio de Chicomuselo, Chiapas.

Finalmente, las organizaciones consultadas concluyeron que en México existe una política generalizada de que las empresas pueden pagar para contaminar. Alertan también, que si en México no se regula la actividad minera, se seguirá acumulando una descomposición del entorno ambiental, que aunado a los futuros proyectos que dará paso la Reforma Energética, como es el caso del fracking, se continuará con la destrucción del territorio nacional.

El activista de Greenpeace Raúl Estrada sostienen que en México “la visión que se tiene es de pagar y entonces ya resuelves el problema. El asunto de fondo aquí es que no deberíamos de permitir en el país que existiera este tipo de producción que daña a las personas, daña a las comunidades. […] Además de que produce una descomposición del entorno ambiental”.

En tanto, dice, “las minas subterráneas, generan una extracción de agua impresionante, miles de litros por segundo, y toda esa agua la utilizan para su laboreo, proceso que implica romper piedra y estar sacando minerales, esa agua sale de la mina ya contaminada, con altos grados de zinc, de plomo, y de otros minerales; [y a pesar de ello] la depositan directamente a la tierra sin un tratamiento adecuado, así como la sacan, así la depositan, y todos esos minerales se va acumulando en la parte superior de la tierra, lo cual la deja inservible para cualquier vegetal”.

Además de que el resto del agua contaminada se vuelve a filtrar sobre los mantos acuíferos, por lo que se tiene un ciclo de contaminación repetitivo que va afectando, aunado a las grandes cantidades de líquido que se desperdician.

Finalmente, el activista precisa que la mayoría de las comunidades que están en defensa de sus territorios no están en contra de las empresas, sino a favor del respeto, reconocimiento y reivindicación de los derechos humanos de los ejidatarios y comuneros.

“Esta defensa es porque se respeten sus derechos humanos, se da porque las empresas trasnacionales, del rubro que sea, no respetan los derechos”, asegura.

“Me da hasta un poco de miedo pensarlo […] las afectaciones por la minería y por la extracción de gas shale, así como las que se están dando por proyectos hidroeléctricos, todas estas afectaciones del territorio nacional […] son afectaciones con las que se está destruyendo el territorio nacional”, concluye.

Libro Resistencia Global al Fracking

Ver/Descargar Libro

En este libro se presentan una selección de quince luchas icónicas a niveles muy diversos. En la mayoría de los casos las cuentan sus protagonistas, en primera persona, como no podría ser de otro modo. Hay luchas personales en los tribunales como las de la familia de Lisa Parr en Texas, o la de Diana Daunheimer en Canadá. Batallas a nivel local por obtener el derecho a prohibir la técnica, como la acontecida en el municipio de Dryden en el estado de Nueva York. Rumanía o Polonia por su parte nos inspiran con la lucha estoica de campesinos pacíficos frente al poder corporativo defendido por un Gobierno represor. Encontramos también campañas que buscaron la alianza de diversos sectores para hacer frente común, como el caso de la Multisectorial contra la Hidrofractura de Neuquén, en Argentina, o la exitosa alianza de Neoyorquinos Contra El Fracking. O iniciativas que se extendieron como la pólvora, como la decisión de «cerrar la puerta» a los perforadores en Australia, los municipios «libres de fracking» en el Estado español o la Resolución de Korbach en Alemania. Estas y otras luchas icónicas e inspiradoras son la principal aportación de este libro a la resistencia global al fracking.

LA TRIBU YAQUI CONVOCA A LA CARAVANA NACIONAL “POR LA DEFENSA DEL AGUA, EL TERRITORIO, EL TRABAJO Y LA VIDA”

El lunes 11 y martes 12 de mayo la Caravana de la Tribu Yaqui estará en Chiapas (Pijijiapan, Tonalá, Tuxtla, San Cristóbal y Comitán)

Frente a la ola de reformas estructurales capitalistas que están poniendo en peligro la existencia de nuestra Nación, despojándonos de nuestro propio territorio y poniendo en riesgo la vida misma con los llamados megaproyectos, la militarización, la inseguridad y la privatización de los bienes comunes, la Tribu Yaqui, junto con decenas de pueblos originarios, organizaciones campesinas y urbanas, no partidistas, afectados ambientales, usuarios del agua y la energía eléctrica, sindicatos, universidades, maestros, jóvenes, ecologistas, comunidades eclesiales de base y organismos de derechos humanos.

CONVOCAMOS A
La Caravana Nacional por la Defensa  del Agua, el Territorio, el Trabajo y la Vida
Que se llevará acabo del 11 al 22 de mayo de 2015

La Caravana tendrá los siguientes objetivos:
•Visibilizar las múltiples crisis del agua, el territorio, el trabajo y la vida que se están profundizando en todos los estados de la República.
•Fortalecer y articular las luchas de resistencia popular en contra del modelo neoliberal y sus reformas estructurales haciendo frente a la creciente criminalización y represión de la protesta social en nuestro país.
•Abrir un proceso nacional de organización y articulación en torno a la defensa del agua, su reapropiación por parte de la población y contra la propuesta de ley privatizadora del mal gobierno.

Ver info en la página web: http://caravanaporlavidamx.blogspot.mx/

La guerra química contra los pueblos

por Raúl Zibechi, en cipamericas.org

Campaña Paren de Fumigados

En los pequeños pueblos de la pampa argentina, las fumigaciones con glifosato enferman a la población y contaminan la vida. La resistencia al modelo de agricultura industrial crece día tras día.

“Estoy aquí porque enterré a cuatro familiares”, dice Raquel en un tono casi inaudible. “Mi papá, mi primo y un hermano de mi papá que trabajaban fumigando, además de mi hermano que trabajaba en una escuela rural”. Raquel es maestra y vive en Elortondo, un pequeño pueblo de seis mil habitantes a 300 kilómetros al sur de Santa Fe, donde reinan la soja y las enfermedades provocadas por las fumigaciones.

“El 80 por ciento son gente de campo”, agrega.

 

Raquel carga una pesada carpeta con trabajos de sus alumnos de 7° grado, casi todos de 13 años. Con ellos hicieron una amplia encuesta para conocer la realidad sanitaria de la población. La escuela está pegada a las vías del tren y frente a los silos secadores de soja. Casi todos los encuestados por los niños, sus vecinos y familiares, tienen conciencia de los problemas de salud que provocan las fumigaciones.

“Para llegar a la escuela hay que pasar cerca de los silos y no se puede respirar. Los niños que salen a la calle mientras funciona la secadora quedan con la ropa blanca, que es el polvillo que sale de los silos que se difumina en la escuela y en todo el pueblo”, explica la maestra. El proyecto que encabeza Raquel se llama “Somos lo que respiramos”, pero las autoridades les impidieron concursar ya que aborda un tema “polémico”.

Se pone triste y apaga aún más la voz cuando relata la indiferencia de las personas que podrían implicarse en la defensa de la salud. Es común que en los pueblos el presidente comunal, la directora escolar y la cooperadora con la escuela tengan algún tipo de relación con los plantadores de soja. “Vine porque en el pueblo queremos formar un grupito, para hacernos sentir”. Con esa intención llegó al 17° Plenario de la Campaña Paren de Fumigarnos de la provincia de Santa Fe.

Los pequeños grandes avances

Carlos Manessi y Luis Carreras, dos de los militantes del Centro de Protección a la Naturaleza (Cepronat), sienten que el muro de silencio se va resquebrajando por las dos noticias que se difundieron en las semanas anteriores a la celebración del plenario, a cuya organización dedicaron muchas horas de trabajo al “viejo estilo”: dedicar todo el tiempo posible a la causa.

La primera es que la Organización Mundial de la Salud declaró el 20 de marzo que “hay pruebas convincentes de que el glifosato puede causar cáncer en animales de laboratorio y hay pruebas limitadas de carcinogenicidad en humanos (linfoma no Hodgkin)” y que el mismo herbicida “causó daño del ADN y los cromosomas en las células humanas”. El periodista ambiental Darío Aranda escribió que “el glifosato desde hace más de diez años es denunciado por organizaciones sociales, campesinas, médicos y científicos independientes de las empresas” (MU, 22 de marzo de 2015).

En Argentina hay 28 millones de hectáreas de cultivos transgénicos (soja, maíz y algodón) sobre los que se riegan 300 millones de litros de glifosato cada año. Pero también se utiliza en frutales, girasol, pasturas, pinos y trigo. Aranda explica que en la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer, uno de los espacios de la OMC, 17 expertos de once países trabajaron durante un año para llegar a la conclusión de que el glifosato es cancerígeno.

El glifosato es el herbicida de mayor uso en el mundo, tanto en productos de aplicación agrícola como en espacios urbanos y en el hogar. El producto de Monsanto se comenzó a usar masivamente con el desarrollo de los cultivos transgénicos. En 1996 en Argentina se usaban 11 millones de litros de glifosato, pero ese año se aprobó la soja transgénica y la Red de Médicos de Pueblos Fumigados estima que ahora se utilizan 320 millones de litros.

En 2009, Andrés Carrasco, jefe del Laboratorio de Embriología Molecular de la Facultad de Medicina de la UBA e investigador principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas (Conicet) advirtió que el glifosato producía malformaciones en embriones anfibios. Como recuerda Aranda, “debió enfrentar una campaña de desprestigio por parte de las empresas, de sectores de la academia y de funcionarios políticos”.

Carrasco abrazó la causa de los afectados por el glifosato, apoyó incondicionalmente a las poblaciones de los pueblos fumigados como las Madres de Ituzaingó[1], afirmaba que “la mayor prueba de los efectos de los agrotóxicos no había que buscarlas en los laboratorios, sino ir a las comunidades fumigadas”. Falleció en mayo de 2014, semanas después de participar en la escuelita zapatista y hoy es un símbolo de la lucha contra los agrotóxicos.

La segunda resolución que anima a Luis y Carlos es la reciente del Ministerio de la Producción de la provincia de Santa Fe, del 25 de marzo, que prohíbe la aplicación del potente tóxico 2,4-D en toda la provincia y restringe severamente la aplicación aérea y terrestre. En adelante sólo podrá usarse en aplicaciones aéreas a más de 6.000 metros de las poblaciones y en las terrestres a más de 1.000 metros de los centros poblados (http://www.cepronat-santafe.com.ar/, 31 de marzo de 2015).

En junio de 2014 Cepronat había presentado un expediente solicitando la prohibición o restricción del 2,4D, el agrotóxico que es el segundo herbicida más usado por la agricultura en la Argentina y el tercero en Estados Unidos. De este modo, la provincia se convierte junto a Chaco, Santiago del Estero, Entre Ríos y Córdoba, en una de las primeras en adoptar restricciones.

38 años resistiendo

Cepronat participa en la Campaña Paren de Fumigarnos, nacida en setiembre de 2006 en las provincias más afectadas del país. Santa Fe es junto a Córdoba y Buenos Aires una de las tres principales provincias sojeras. Sólo en Santa Fe la campaña reúne organizaciones y personas de cien localidades que, como señala uno de sus documentos, “veían deteriorar su calidad de vida y cambios en la forma de enfermar y de morir”.

La campaña cuenta con el apoyo de organizaciones barriales, culturales y sindicatos, como el de los maestros que cedieron el camping a 15 kilómetros de la ciudad para albergar al medio centenar de participantes del plenario. En la ronda de presentaciones se nombran unas 20 organizaciones de varios pueblos, algunos de los cuales se definen como “refugiados ambientales”, que serían hasta 250 mil en la provincia.

Una decena de militantes (del Cepronat y de otras organizaciones que integran el Foro Santafesino por la Salud y el Ambiente) preparan el espacio del encuentro, registran a los asistentes y colocan carteles. Ezio, el “presidente” de Cepronat, transpira bajo el fuerte sol del mediodía junto a la parrilla donde prepara la comida. Luis no para de trajinar, con sillas, con cajas y botellas, de trepar para colocar pancartas. Carlos abre el plenario y explica los modos de trabajo. Un equipo de gente sencilla, entregada a la lucha por la vida.

Cepronat nació en 1977, en plena dictadura militar, dos meses antes que la primera ronda de las Madres de Plaza de Mayo. Todos los meses publican el boletín El Ambientalista (que ya lleva 284 ediciones) con informaciones sobre los pueblos fumigados, denuncias de productos que dañan la salud y de cualquier iniciativa que destruya el medio ambiente.

El Centro de Protección de la Naturaleza “es la primera organización no gubernamental formada por ciudadanos preocupados por el ambiente en el interior de la Argentina”, que ya en 1978 se involucró en frenar las fumigaciones de mosquitos en Santa Fe, realizó cientos de plantaciones de árboles autóctonos en la ciudad y fue una de las primeras organizaciones en oponerse a la IV Central Nuclear y conseguir la ordenanza que declara “Santa Fe No Nuclear” (El Ambientalista N°283, marzo 2015).

En la década de 1990 promovió el rechazo a una represa en el Paraná Medio. Desde que comenzó a implementarse el nuevo modelo agrícola a mediados de la década, se encuentran en una encrucijada que los lleva a abordar los dos problemas principales: las aspersiones con agrotóxicos y la defensa de los espacios públicos urbanos. Es una misma lucha o, mejor, la resistencia a un mismo modelo.

Luis relata con inocultable pasión una de las últimas batallas en la que estuvo empeñado Cepronat: la defensa del parque Alberdi, un emblemático espacio verde en el corazón de la ciudad, muy cerca del río Paraná. El gobierno de la ciudad decidió remodelar el parque que alberga más de cien árboles, con menos verde, más cemento y la concesión a una empresa privada.

Lo que más rechazo generó fue la decisión de construir 300 plazas semisubterráneas para coches porque cambia la fisonomía del parque, mientras los empresarios privados que la construyen tendrán la explotación por 30 años, abonando un canon de poco más de cien dólares mensuales. La comuna les entrega un espacio público de 15 millones de dólares cuya inversión recuperarán en los primeros cinco años.

Cuando comenzaron a talar los árboles cientos de vecinos ocuparon el parque, el 14 de junio de 2014, instalaron tiendas y durmieron allí durante varios días. Crearon la Asociación Ciudadana en Defensa de lo Público y los días 14 de cada mes retornan en grupos al parque recordando la fecha de la toma. La privatización y especulación con los espacios públicos es parte del mismo modelo extractivo que los monocultivos de soja y la minería a cielo abierto.

Enfermedad y dominación

La ronda empieza los debates. Luego de las presentaciones de rigor, Carlos recuerda que la Campaña Paren de Fumigarnos lleva más de seis años recorriendo pueblos, realizando tres plenarias provinciales cada año y que ahora cuenta con la presencia del grupo de médicos de la Universidad de Rosario y de un equipo de científicos de la Facultad de Ciencias Exactas de La Plata, además de un grupo de la vecina Paraná.

Entre los testimonios de los afectados, destaca –además de Raquel de Elortondo- el de Roberto, de Ceres, una ciudad de 15 mil habitantes a 260 kilómetros al noroeste de la capital. Tiene 38 años y trabajó nueve como aplicador de agroquímicos manejando un “mosquito” hasta que comenzaron los dolores de estómago. Hace varios años que no puede trabajar porque perdió movilidad en los brazos. En el hospital le recetaron medicamentos psiquiátricos porque creían que mentía. Muchos médicos son cómplices del modelo y se resisten a aceptar la realidad de las fumigaciones.

Daniel Verzeñassi, bioquímico e integrante del Foro Ecologista de Paraná, advierte que “no sólo nos fumigan a través del aire sino del agua contaminada”. Explica que el agua de lluvia arrastra los tóxicos hasta las capas subterráneas de las que se saca el agua para consumo humano. “Los 800 o mil metros que exige el movimiento de distancia de las fumigaciones del lugar de residencia, es necesario pero insuficiente. Somos todos pueblos fumigados”, concluye.

En la ronda, alguien dice una frase densa, de esas que golpean como piedras: “Cuando predomina la enfermedad perdemos libertad”. Luego explica que la enfermedad se construye como dependencia del enfermo, anulando su autonomía. En los tres grupos que se formaron para profundizar el debate, salieron casi todos los temas centrales: desde el miedo que existe en los pequeños pueblos, que impide la denuncia y la organización, hasta la necesidad de estudiar y formarse para luchar mejor.

Alguien se pregunta “¿cómo cambia la gente?”. En el intercambio hay unanimidad en evaluar que mientras trabajaron contra las fumigaciones y los cultivos de soja, no conseguían remover la indiferencia. Pero cuando decidieron centrarse en la salud y las consecuencias sanitarias del modelo, la gente comenzó a denunciar los casos de cáncer, leucemias y malformaciones.

El médico Damián Verzeñassi recordó que de los cien mil productos liberados al ambiente desde el fin de la segunda guerra mundial (1945), “sólo dos o tres mil fueron evaluados desde el punto de vista cancerígeno”. Sostiene una tesis polémica pero que debemos contemplar: los alimentos forman parte de un proyecto geopolítico de control de la población mundial. ¿Exagerado? Días después del plenario de la Campaña, dos científicos mexicanos del Instituto de Ecología de la UNAM recordaron que “Monsanto y el gobierno de Estados Unidos conocían de la toxicidad del glifosato desde 1981” (La Jornada, 17 de abril de 2015).

Por su parte, el sindicato de maestros AMSAFE (Asociación de Magisterio de Santa Fe) destacó que en toda la provincia hay 800 escuelas rurales y periurbanas en las que trabajan dos mil maestros. El sindicato recibe muchas denuncias de maestros que enferman de cáncer y de escuelas que cierran los días de fumigaciones. Muchos directores de escuelas tienen miedo a denunciar. Para visibilizar la situación se proponen convocar un Congreso Provincial de Escuelas Fumigadas.

Campamentos sanitarios

La Facultad de Ciencias Médicas de Rosario, la mayor ciudad de la provincia y la tercera del país, vivió un viraje político en 2007, con el triunfo de una corriente que realizó cambios de fondo en la carrera. Uno de esos cambios fue la introducción de los “campamentos sanitarios” que son “un dispositivo creado en el año 2010, como Evaluación Final Integradora del Ciclo de Práctica Final de la Carrera de Medicina, que integra evaluación, investigación, docencia y extensión”, según lo define Damián Verzeñassi, responsable académico de esa materia.

Sostiene que los campamentos son una herramienta de análisis epidemiológico de las comunidades y que un estudiante no debe terminar sus estudios sin tener una experiencia que le deje en claro que obtuvo su título gracias a los aportes de toda la población y no sólo por méritos personales. Los campamentos duran cinco días y participan entre 90 y 150 estudiantes de la misma cohorte, por lo cual se realizan campamentos cada tres meses.

La facultad firma un acuerdo con el municipio, que debe ser de menos de 10 mil habitantes. Al campamentos acuden los docentes, entre diez y quince, la facultad se encarga del traslado y los equipos y el municipio del alojamiento (duermen en colchones en el suelo en escuelas o polideportivos) y la alimentación. En los tres meses anteriores los estudiantes preparan el campamento, ya saben a qué localidad van a ir y todo lo que tienen que hacer durante los cinco días que estarán en el pueblo.

A cada estudiante se le adjudica una manzana para que lunes y martes visiten todas las casas y encuesten a todas las personas. La encuesta busca una caracterización socioeconómica del grupo familiar y los principales problemas de salud que han padecido, en el último año y a su vez en los últimos 15 años. “Conseguimos una cobertura del 76% de la población en los 21 campamentos realizados”, explica Verzeñassi.

El miércoles construyen un perfil sanitario de la población. “Los docentes evaluamos el trabajo de los estudiantes, su capacidad de entrevistar, de generar empatía con el sujeto, de construir una hipótesis de diagnóstico y de identificar los elementos determinantes de la situación de salud de la familia. Además convierten transformando las escuelas en un gran hospital de campaña, donde hacen un examen físico y control de salud de los niños, controlando crecimiento, desarrollo y las posibles patologías.

El jueves hacen talleres de promoción de salud y prevención de enfermedades en las escuelas primarias y secundarias, pero también en las plazas y centros sociales, “porque los médicos tienen que tener la capacidad de compartir con la comunidad sus saberes para construir una comunidad más saludable. De ese modo podemos evaluar al estudiante en la práctica concreta con la gente que es lo que va a hacer cuando trabaje como médico”.

El viernes los docentes hacen la evaluación de los estudiantes y por la tarde convocan a todo el pueblo para hacer la devolución de los resultados. Luego en la facultad comparan los resultados de las diferentes comunidades a lo largo de estos años que llevan haciendo campamentos, fijando la atención en la evolución de las enfermedades en los últimos 15 años.

“Hemos comprobado que ha existido un crecimiento del cáncer que oscila entre cuatro veces y media y hasta siete más que en el primer quinquenio. Cuando empezamos a ver que en los 21 pueblos nos da incrementos similares de cáncer, de abortos espontáneos, de nacimientos con malformaciones, nos preguntamos qué hay en común en todos ellos y es que están en el medio de las áreas de producción agroindustrial con agroquímicos”, señala indignado.

Una guerra química

En 2008 en Argentina había 206 casos de cáncer cada 100 mil habitantes. En algunos pueblos encontraron hasta dos mil casos, casi diez veces más. En cuanto a las malformaciones, se llega a seis niños en algunos pueblos de 4.000 habitantes cuando la prevalencia es de un caso por millón. Pero lo que más les llama la atención es que no aumenta el mismo tipo de cáncer que había antes sino que aparecen nuevos: linfomas, leucemias, cáncer de tiroides, páncreas y mamas.

Un estudio que se divulgó en el Plenario de Paren de Fumigarnos, realizado por la Universidad de La Plata a pedido de las autoridades de Monte Maíz (un pueblo agrícola de 8.200 habitantes en la provincia de Córdoba) descubrió que hay tres veces más cáncer que el promedio del país. La tasa de abortos espontáneos asciende a 9,9% de las mujeres embarazadas, frente al 3% de media nacional.

La hipótesis de “una guerra química” que busca controlar a los pueblos cobra vigor si tenemos en cuenta que empresas multinacionales y autoridades tienen perfecta conciencia de las consecuencias esperables cuando liberaron los plaguicidas.

Sin embargo, algunas cosas están cambiando, como lo demostró el encuentro de la Campaña Paren de Fumigarnos. En los pueblos existe una clara conciencia de lo que está sucediendo, como demuestra la encuesta escolar de Raquel en Elortondo. De ahí a organizarse, hay un paso: perder el miedo. Pero ese paso lo están dando cada vez más personas en más lugares.

La segunda, es que hay cambios en la academia. Verzeñassi nos recuerda que a comienzo de los campamentos había mucha resistencia entre docentes y alumnos que decían, “no querían trabajar gratis”. Pero de los diez últimos campamentos siete se hicieron a pedido de un médico del pueblo que era un graduado que había participado en los campamentos”. Este cambio en los médicos, y en los docentes –que son figuras claves en los pueblos rurales- puede torcer la balanza contra el modelo de agricultura industrial.

Sin duda la situación es bien diferente a la que existía en 2006 cuando comenzaron la campaña. La campaña contra las fumigaciones no conoce pausas. En junio se realiza en Rosario el 3er. Congreso de Salud Ambiental y el 1er. Encuentro de la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad de América Latina. Se inaugura el 16 de junio, fecha del cumpleaños de Andrés Carrasco, símbolo de ese compromiso.

Raúl Zibechi es analista internacional del semanario Brecha de Montevideo, docente e investigador sobre movimientos sociales en la Multiversidad Franciscana de América Latina, y asesor a varios grupos sociales. Escribe cada mes para el Programa de las Américas (www.cipamericas.org)

[1] Ver “El modelo extractivo rechazo en las calles”, en http://www.cipamericas.org/es/archives/10888

Seré emigrante climático

Gustavo Duch   

Hasta hace bien poco mi sensación era diferente. Sentía entonces que la sociedad, si bien mostraba cierto interés por la cuestión del cambio climático, era más bien un interés, digamos, ‘científico’. Es o no cierto lo del cambió climático, por qué o cuáles son las razones, eran las preguntas más frecuentes que durante estos años han recibido respuestas clarificadoras: sí, hay cambio climático, evidentemente, y el origen no es más que un terrible comportamiento de quienes nos llamamos seres humanos. En cambio, en los últimos meses y con estas preguntas ya resueltas, las nuevas que surgen creo que nacen de la preocupación. ¿Cuándo sentiremos con gravedad los efectos? ¿A qué lugares afectará más? ¿Podremos, o cómo podremos, adaptarnos a la nueva situación? ¿Será más difícil la producción de alimentos?

Al respecto, preparando y leyendo los artículos que incluimos en el número 20 de la revista Soberanía Alimentaria, Biodiversidad y Culturas a propósito de esta temática, hay dos cuestiones que quiero compartirles. La primera, una afirmación. La segunda, una intuición.

Se puede afirmar que las respuestas a las preguntas arriba planteadas, a estas alturas de los debates, nos arrastran a una significativa coincidencia entre la ciencia y las conciencias. Así se puede deducir, observando que por el lado de la ciencia, los puntos de vista del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas (IPCC), la principal autoridad científica internacional en relación a todos los aspectos vinculados al cambio climático, son muy similares a los que desde hace años vienen esgrimiendo los movimientos sociales que, como La Vía Campesina, defienden – a conciencia – la soberanía alimentaria.

Efectivamente, el IPCC señala algunos aspectos que ya venían siendo recogidos por los movimientos campesinos como, y en primer lugar, que el rigor de la afectación de los nuevos regímenes climáticos no dependerá exclusivamente de una cuestión de gradientes térmicos sino, básicamente, de las condiciones de vida de cada población y, concretamente, en el caso de las poblaciones rurales, del acceso a los recursos productivos. De lo que se deduce que para disminuir vulnerabilidades lo que hay que acometer son procesos de reforma agraria u otras medidas similares que garanticen el justo acceso a los bienes comunes. O, en segundo lugar, manteniendo la mirada en quienes se encargan de producir alimentos, el IPCC señala que el conocimiento campesino, con mucha experiencia y sabiduría en su ancestral mochila, es una de las mejores prescripciones para hacer de los campos de cultivo espacios de gran resiliencia. Los informes del IPCC indican también que para abordar los problemas del cambio climático, “se requiere de instituciones locales (formales e informales) cercanas y de la propia población, flexibles y fuertes a la vez para facilitar las mejores estrategias por parte de la propia población”. Gobernanzas que bien podríamos reproducir como más y más soberanía popular. Por cuarto y último, el propio IPCC denuncia lo que tantas veces hemos repetido, que si estamos dónde estamos es porque nos hemos dejado guiar por un modelo productivo tremendamente industrializado y que lo mejor que se puede hacer es abandonarlo cuanto antes.

¿En qué lugares el saber campesino está más ninguneado? ¿En que lugares el acceso a la tierra ya no es solo un impedimento comercial o político para desbancar al latifundio y sus terratenientes sino que además es un impedimento físico porque todo es cemento, rotondas y polígonos? ¿Dónde las semillas están todas registradas, patentadas y acaparadas? ¿Dónde el modelo intensivista ha derrotado por goleada a la agricultura ecológica, a pequeña escala y biodiversa? ¿Y las gobernanzas? Pues miren, por aquí el estado español, donde yo vivo, las política agrarias las tenemos delegadas en Bruselas, lejos, bien lejos. E incluso, con la antidemocracia del PP en estos años estamos viviendo procesos que van en sentido contrario a las recomendaciones del IPCC, pues sus leyes están dirigidas a favorecer más concentración del poder en altos niveles de la administración y la desaparición de aquellas entidades más cercanas a la población.

La intuición: que voy preparando la maleta.

Asistente para Centro América Programa para América Latina del Fondo para los Derechos Humanos Mundiales

El Fondo esta buscando a alguien para el puesto de Asistente para Centro América para el Programa de América Latina, que actualmente tiene programas de subvenciones en Honduras, Guatemala, El Salvador y México. Este puesto reporta a la Oficial de Programas para América Latina y requiere de disposición de medio tiempo, 20 horas a la semana. Se dará preferencia a personas viviendo en Honduras.

fecha límite para recibir solicitudes es el viernes, 22 de mayo de 2015.
 
Principales responsabilidades del puesto:

Trabajar como asistente a la Oficial de Programas para América Latina del Fondo

-Monitorear y proveer información y actualizaciones de manera constante a la Oficial de Programas para América Latina acerca del contexto de derechos humanos, la situación política y social, temas prioritarios, situaciones de emergencia y actividades destacadas en Honduras, El Salvador y Guatemala, tomados de una variedad de fuentes
Investigar con mayor profundidad temas de derechos humanos en Honduras, El Salvador y Guatemala  y compartir información que pueda ser útil para las prioridades y estrategias del Fondo
-Realizar un mapeo de actores en torno a los temas estratégicos señalados por la Oficial de Programas para América Latina; realizar entrevistas de seguimiento con actores relevantes de derechos humanos de acuerdo a lo solicitado por la Oficial de Programas para América Latina
-Dependiendo de la necesidad, coordinar y/o apoyar las visitas o viajes de personal del Fondo a Honduras, El Salvador y Guatemala, incluyendo apoyo logístico previo, durante y después de las visitas, y acompañar a la Oficial de Programas para América Latina en sus visitas a terreno cuando ella lo requiera
-Asistir a reuniones o eventos destacados, realizar lectura de noticias, informes y publicaciones, y mantener contacto con redes, organizaciones y actores relevantes en el campo de derechos humanos
-Trabajar de manera cercana con la Oficial de Programas para América Latina para explorar alianzas, posibilidades para realizar iniciativas conjuntas  y/o compartir ideas y estrategias de financiamiento con otros donantes en Honduras, El Salvador y Guatemala
-Trabajar de manera cercana con la Oficial de Programas para América Latina en torno a ciertos aspectos del ciclo de financiamiento, que pueden incluir pero no se limitan a, leer informes y propuestas de los donatarios, preparar resúmenes del trabajo de donatarios actuales o potenciales, realizar un mapeo para identificar actores relevantes en áreas prioritarias y temas estratégicos
-Cuando sea apropiado o necesario, comunicarse y compartir información con los donatarios y con la Oficial de Programas para América Latina respecto a posibles apoyos de emergencia en Honduras, El Salvador y Guatemala
-Trabajar de manera cercana con la Oficial de Programas para América Latina y el equipo administrativo del Fondo para asegurar fluidez y eficiencia en cuestiones administrativas relacionadas con las subvenciones otorgadas

PERFIL
Compromiso con los derechos humanos en Centro América y a nivel global
Conocimiento de la situación social, política y de derechos humanos en Honduras, El Salvador y Guatemala
Mínimo cinco años de trabajo en cuestiones de derechos humanos o temas relacionados en Centro América
Excelentes habilidades para establecer relaciones y comunicarse de forma efectiva
Disposición para viajar en la región
Habilidad para manejar responsabilidades múltiples, fechas límites de entregas y problemas complejos
Dominio del español y excelentes habilidades para escribir en español
Capacidad para leer, comunicarse por escrito y hablar en un nivel básico de ingles 
 
Las personas serán elegidas en base a sus capacidades sin importar su etnia, color, religión, sexo, nacionalidad, discapacidad, estado civil u orientación sexual, de acuerdo a la legislación federal y estatal.

SALARIO
El salario se determinará de acuerdo a la experiencia de la persona y tomará como base estándares salariales para consultores/as de país en la región de Mesoamérica.

Como aplicar: Favor de mandar su currículum vitae, carta de interés , expectativas salariales e información de contacto de tres personas que puedan dar referencias profesionales a latinamerica@globalhumanrights.org. Favor de poner  “Asistente para Centro América” en el título de su correo.

Solo los y las candidatas que cumplan con los requisitos previamente mencionados serán contactadas o contactadas. La fecha límite para recibir solicitudes es el viernes, 22 de mayo de 2015. 

LA ORGANIZACIÓN
El Fondo para los Derechos Humanos Mundiales apoya a organizaciones de derechos humanos que trabajan directamente en terreno en diversas partes del mundo. El Fondo está comprometido con encontrar y financiar a las organizaciones de derechos humanos más efectivas en África, Asia y América Latina, ofreciendo subvenciones y facilitando asistencia técnica para garantizar la efectividad a largo plazo y la sustentabilidad de grupos que trabajan en condiciones con altos niveles de complejidad y con recursos escasos.

Desde el 2002, el Fondo ha otorgado 55 millones de dólares a más de 500 organizaciones de derechos humanos en el mundo. Nuestros donatarios trabajan en una diversidad de temas, como desaparición forzada en México, derecho al territorio y recursos naturales en Guatemala, derechos de las mujeres en Moroco, discriminación a personas con VIH en India, y justicia por crímenes de guerra en África Occidental. El Fondo actualmente tiene programas de subvenciones en dieciocho países en el mundo. Para más información favor de consultar www.globalhumanrights.org.

Jamie Oliver, Chiapas y la Revolución

Alejandro Calvillo, Director de El Poder del Consumidor, A.C.
en sinembargo.mx

Estoy con Jamie Olivier frente al gran cartel de Coca Cola que da la bienvenida a Zinacantan. Es la imagen del dorso de una mujer con el bordado tradicional de flores de la comunidad sosteniendo una Coca Cola de medio litro. El cartel tiene las frases “Bienvenido a Zinacantan… Destapa la felicidad” con el gran logo de Coca Cola dominando. Mientras le explico a Jamie, el chef británico que revolucionó la alimentación en las escuelas del Reino Unido sacando la chatarra, que esa publicidad de Coca Cola está diseñada específicamente para esa comunidad, utilizando la imagen de sus bordados tradicionales, se acercan tres niñas de la comunidad, llevando esos bordados.

Las niñas van en 6° de primaria, 1° y 2° de secundaria. Les explico que estamos viendo la publicidad de Coca Cola que da la bienvenida a su pueblo y les pregunto qué piensan de los refrescos, contestan que hacen daño. Les pregunto nuevamente si tienen algún familiar con diabetes y la mayor me dice que sí, su papá. ¿Y qué tiene? le pregunto, “las piernas”, contesta; ¿Qué tiene en las piernas?, “Ya no puede caminar”, ¿tomaba mucho refresco?, “si, tres Cocas al día”. Un litro y medio de refresco al día, 30 cucharadas cafeteras de azúcar, tres veces el máximo tolerable recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), 6 veces más la recomendación ideal que la OMS ha establecido para una mayor protección de la salud. Le preguntamos si hay muchas personas en la comunidad con diabetes y responde que sí, muchas.

En San Juan Chamula entro con Jamie Oliver a una sesión de orientación con mujeres tzotziles que sufren diabetes y en la que reciben orientación sobre los hábitos y cuidados que deben seguir para que esta enfermedad crónica no acabe con sus vidas. De lo primero que se habla es de los refrescos, de la Coca, de la dificultad de dejarla porque está presente en todo lados. Con la  introducción de la Coca Cola la diabetes que era una enfermedad muy poco común en la región y, en general, entre las comunidades indígenas, se convirtió en una epidemia.

Unos meses antes, con el Dr. Marcos Arana que lleva más de 20 años en Chiapas, fui a visitar a una familia tzotzil que vive a las afueras de la cabecera municipal de San Juan Chamula. Platicamos con uno de sus vecinos, Don Roberto que había sufrido unas semanas antes una amputación debido a la diabetes. Al terminar la sesión de orientación frente a la diabetes, le pregunto al Dr. Arana sobre Don Roberto, me comenta que ya murió, que los visitó en sus últimos días y que aunque decía que había dejado el refresco, al lado de su cama tenía una Coca. Murió por diabetes como Don Gonzalo protagonista de nuestro documental “Dulce Agonía” y como muchos otros que hemos conocido y que son parte de esas 80 mil personas que mueren al año por diabetes en nuestro país.

Oliver está presente en México, el país al cual se refirió el entonces  Relator Especial de Naciones Unidas por el Derecho a la Alimentación, Olivier de Schutter, como un país Cocacolinizado, recomendando establecer un impuesto a estas bebidas. El chef británico que ha lanzado una cruzada internacional por la salud alimentaria, que ha cocinado para el Grupo de los 20 ministros y presidentes con mayor poder en el mundo, sabe que hay otros poderes e intereses económicos que están enfermando a la gente. Lo ve en el Reino Unido, lo ha visto en Sudáfrica y de cerca viviendo en comunidades marginales de California, conviviendo con población de origen mexicano.

Oliver ha viajado del Reino Unido a México para constatar el deterioro de los hábitos alimentarios, la catástrofe en salud que vivimos y, en especial, el alto consumo de refrescos. Sabe que este es el país en el que se consumen más estas bebidas y uno de los que presenta los mayores índices de sobrepeso, obesidad y diabetes. Un interés especial para él  lo tiene el impuesto que se ha establecido en nuestro país a estas bebidas, una medida que especialistas e interesados en la salud alimentaria están proponiendo a lo largo y ancho del mundo. Viene en medio del lanzamiento de su campaña “Food Revolution” en la que nos está invitando a firmar en http://chn.ge/1DZgcoQ para demandar a los gobiernos alimentos frescos y saludables en las escuelas, a la vez de que se eduque en los planteles sobre los alimentos, que se eduque a los niños para que al salir de la primaria sepan, al menos, cocinar 10 platillos. 5 países ya se han comprometido a cumplir estas recomendaciones.

El viernes 24, Jamie Oliver se sumó al lanzamiento de la campaña “Proyecto Pozol: más sanos comiendo como mexicanos” en San Juan Chamula, una iniciativa para revalorar las bebidas tradicionales frente al alto consumo de refrescos. El Pozol es una bebida tradicional en base al maíz, una bebida nutritiva con muchas propiedades que ha sido abandonada. Jamie Oliver comentó a los presentes: “México no necesita mirar hacia ningún otro lado para resolver el gran problema de obesidad y diabetes que padece, la solución está aquí mismo y es la comida tradicional”, fascinado por la muestra de bebidas tradicionales.

La iniciativa del Proyecto Pozol fue lanzada por el Dr. Marcos Arana Cedeño del Centro de Capacitación en Ecología y Salud de Chiapas y por Yatiziri Zepeda de Proyecto Alimente. Yatziri señaló que: “El pozol, así como los cientos de platillos en los que está presente el maíz criollo y la gran variedad de quelites, insectos, leguminosas, chiles, cactus, frutos, y bebidas fermentadas han sido desplazados en las comunidades originarias y en las grandes urbes por sopas maruchan, papitas, galletitas, refrescos y cualquier cantidad de comestibles ultraprocesados con cero nutrientes y niveles elevados de azúcar, sal y grasa. Los mexicanos ya no comemos como mexicanos y eso nos tiene enfermos”.

El Dr. Marcos Arana agregó: “Un análisis recientemente realizado por el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán señala que el pozol blanco contiene un 5% de proteínas, es una importante fuente de fibra comestible y a pesar de que tiene un 33% de hidratos de carbono, éstos son compuestos complejos que a diferencia del contenido de azúcar de los refrescos, no provocan la misma elevación violenta del nivel de glucosa en la sangre, es una excelente alternativa”.

Mientras se lanzaba la iniciativa ciudadana para enfrentar una de los mayores problemas de salud entre la población chiapaneca, que lleva a miles y decenas de miles de muertes, amputaciones y ceguera por diabetes, sin apoyo del gobierno estatal; se realizaba la boda del gobernador Manuel Velasco y la cantante Anahi. Boda para la cual se invirtieron recursos del Estado para remodelar la catedral de San Cristóbal de las Casas y se llevaron mujeres indígenas para posar con sus bordados tradicionales como telón de fondo en las fotos del nuevo matrimonio telenovelesco: el mirrey Velasco vestido de charro y su esposa Anahí.

De regreso a la ciudad, transito por la carretera de Tuxtla al aeropuerto. En mi vida he visto una inversión semejante, cada 40 metros a los largo de decenas de kilómetros, una luminaria. Las barreras de contención de la carretera que empiezan decenas de metros antes de las curvas están construidas con tubos de acero de muy alto calibre. En curvas, las barreras de contención deben ser flexible para lograr reintegrar a los vehículos. Aquí no lo son, se eligió lo más caro a pesar de que esto pueda representar también vidas perdidas. Algo más que nunca había visto en mi país: la mayor parte de la carretera tiene banqueta y acera adoquinada.

Sin duda, la revolución de la alimentación en nuestro país requiere otra más que nos libere de los políticos y mirreyes, que ponga como autoridad a personas comprometidas y con equipos profesionales al servicio del interés público.

Como decía Tere que decía su tía: “Con pendejos ni a bañar porque pierden el jabón”, y peor si son corruptos.

Por lo pronto, con Jamie Oliver y la Food Revolution, con Marcos y Yatziri en el Proyecto Pozol

Victoria legal mapuche contra el fracking en Argentina

elciudadano.cl

Un representante del pueblo mapuche presentó un amparo contra YPF argumentando que el fracking ponía en riesgo las napas de agua y la jueza Iris Pacheco, del juzgado Laboral 2 de Comodoro Rivadavia (Chubut, Argentina), determinó la paralización de las operaciones en ese sector. Toda una victoria legal para el pueblo orginario.

El pozo está ubicado a 20 kilómetros del centro de la ciudad. El gobierno de Chubut puede apelar la medida.

El recurso de amparo lo presentó Marcelino Pintihueque, del pueblo mapuche, patrocinado por la abogada comodorense Silvia de los Santos. En esta determinación jugó un rol determinante el informe del perito de oficio Roberto Ochandio -designado por el Juzgado- que plantea que la fractura hidráulica pone en riesgo las napas de agua. El argumento de que existe separación entre las capas acuíferas y las capas gasíferas es falso, según la presentación.

La principal argumentación de Ochandio coincidió con la del perito de “parte”, judicialmente un consultor técnico de la parte demandante, el ingeniero en Petróleo y master en Evaluación de impacto ambiental y energías alternativas -entre otras cosas- Eduardo D’Lía. Cabe recordar que Ochandio había sido cuestionado por el gobierno de Chubut al indicar que no tenía como especialidad la explotación petrolera, pero el mencionado es geógrafo y cuenta con más de 30 años de experiencia como trabajador petrolero.

Sobre el fallo, De los Santos indicó que la Justicia consideró que “el pozo no tenía garantías necesarias para no vulnerar el ambiente y que está acreditada la afectación directa del agua hasta que se demuestre lo contrario, pero no existe tecnología en el mundo que evite la contaminación del agua y el aire”.

El pozo fue inaugura con un gran acto en mayo del año pasado en el lugar, al que asistieron el CEO de YPF Miguel Galuccio y el gobernador de Chubut Martín Buzzi. En su momento ambos desestimaron que el pozo ponga en peligro las napas de agua. Ahora la justicia opinó lo contrario y las actividades fueron suspendidas.

VIDEO: Homenaje a Bety Cariño a cinco años de su asesinato

El 27 de abril de 2015, se cumplieron cinco años del asesinato de la defensora mixteca Alberta Cariño Trujillo, mejor conocida como Bety Cariño, fundadora y directora del Centro de Apoyo Comunitario Trabajando Unidos (CACTUS).
Ella y el activista finlandés Jyri Jaakkoola fueron matados por paramilitares mientras andaban en una Caravana Humanitaria hacia el municipio autónomo triqui de San Juan Copala (Oaxaca). Para celebrar la lucha de la que llamaban «La Pitaya Roja», su familia organizó un homenaje estos 25 y 26 de abril en Chila de las Flores (La Mixteca, Puebla), su pueblo natal.

Otros Mundos AC/Chiapas

https://www.youtube.com/watch?v=C6iYe588l44

LEER NOTA:

Familiares, amig@s y compañer@s de lucha rinden homenaje a Bety Cariño a 5 años de su asesinato

Boletín informativo y otros materiales del WRM

El Movimiento Mundial por los Bosques Tropicales (WRM por su sigla en inglés), a través de su trabajo sobre los bosques y los temas relacionados con las plantaciones de monocultivos, busca contribuir a que se respeten los derechos de los pueblos locales sobre sus bosques y territorios. El WRM tiene un secretariado internacional con base en Uruguay, desde donde se interconecta y colabora con otras redes y movimientos en un gran número de países.

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