Compartimos esta nota publicada en Página 3 a través de Pie de Página – A 12 de febrero de 2020 — Comunicado de la REMA (aquí)
Este pueblo zapoteco que se rige por sistema normativo de usos y costumbres ganó un amparo contra la minería en su territorio. Sin embargo, las empresas Continuum Resources LTD y Minera la Natividad desacatan dicho mandato judicial federal
Por Pedro Matías
OAXACA, Oax. (pagina3.mx).- Pese
a que pueblo zapoteco de Capulálpam de Méndez ganó el amparo donde el
Juzgado Tercero de Distrito cancela todas las concesiones mineras en su
territorio, la minera canadiense Continuum Resources LTD, la compañía
Minera la Natividad y Anexas y otros particulares, desacataron este
mandato judicial federal.
Las autoridades municipales y comunales cuestionaron al gobierno de
la Cuarta Transformación porque la Secretaría de Economía también se
amparo contra esa sentencia judicial, lo que calificaron como una
incongruencia presidencial porque con esa actitud “el presidente Andrés
Manuel nos niega el derecho al territorio que el tribunal nos reconoce,
hay una contradicción en el discurso del presidente de la república”.
En una conferencia de prensa, el presidente municipal de Capulálpam
de Méndez, Adrián Pedro Arreortúa Méndez; el presidente del comisariado
de Bienes Comunales, Néstor Baltazar Hernández Bautista y el presidente
del Consejo de Caracterizados, Miguel Ramírez Domínguez, reiteraron la
decisión de su asamblea comunitaria para decir: “Si a la vida, no a la
minería”.
Aunque su lucha lleva 15 años, fue en febrero de 2015 cuando la
comunidad indígena agraria de Capulálpam de Méndez interpuso una Demanda
de Amparo para solicitar la protección de la justicia federal ante la
autorización de concesiones mineras ubicadas en su territorio comunal.
Explicaron que estas concesiones fueron otorgadas a la minera
canadiense Continuum Resources LTD, a la Minera la Natividad y Anexas y
otros particulares por la Dirección General de Regulación Minera de la
Secretaría de Economía para la exploración y explotación de oro, plata y
otros minerales sin haber consultado a la comunidad indígena como prevé
el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo.
Después de un largo litigio de casi cinco años, el Juzgado Tercero
dictó Sentencia en octubre de 2019 donde reconoce jurídicamente la
ancestralidad indígena de la comunidad de Capulálpam y, por tanto, su
propiedad y posesión de sus tierras comunales que ocupa desde la época
prehispánica.
La Sentencia establece que la comunidad indígena agraria de
Capulálpam fue fundada antes de que se formara el actual Estado mexicano
y por tanto tiene el derecho a la protección de la justicia federal
como lo establece el Artículo Segundo Constitucional federal.
En consecuencia, el Juzgado Tercero en su sentencia cancela todas las
concesiones mineras que fueron otorgadas a las empresas mineras en el
territorio de Capulálpam por haber sido otorgadas sin la Consulta Previa
Libre e Informada que establece el Convenio 169 de la OIT.
Así, el Estado mexicano protege la ancestralidad indígena de
Capulálpam de Méndez en materia de extractivismo de minerales, le
reconoce su derecho a tener una vida digna y a permanecer como comunidad
indígena libre del extractivismo de minerales pro encima de los
intereses de particulares.
Mencionaron que la sentencia también hace justicia a las comunidades y
pueblos indígenas de Oaxaca quienes históricamente han padecido
discriminación y racismo en la impartición de justicia.
Sin embargo, tanto las empresas mineras como la Secretaría de Economía se ampararon contra esta sentencia.
“Ya se dio a la sentencia ahora sigue la lucha mas fuerte porque la
empresa aun no se retira, está en desacato, ya impugnaron la sentencia
la empresa y Secretaría de Economía federal. Esperamos que la sentencia
se mantenga firme y se ejecute. La lucha legal sigue; estamos luchando
contra un monstruo económico y no podemos dar marcha atrás y esta lucha
de 15 años que iniciamos, cinco años duro el proceso de amparo y ahora
sigue la lucha más fuerte”, comentaron las autoridades.
El comunero Salvador Aquino recordó que en este año 2020 se cumplen
30 años de que el Senado de la República ratificó el convenio 169 de la
OIT y “en esos 30 años no ha habido una sentencia similar en México y
América Latina como la que gano Capulálpam en octubre de 2019.
Mencionó que efectivamente ha habido sentencias pero por múltiples
razones jurídicas y artificios legales estas sentencias no se han
llevado a cabo, pero ahora “tenemos la firme convicción que esta
sentencia va a llegar a ser efectiva y se tiene que cumplir”.
Respecto a la postura presidencial dijo que “nosotros hemos estado
siguiendo de manera muy detallada las conferencias del presiente Andrés
Manuel López Obrador y en efecto él ha dicho que protege los derechos de
las comunidades indígenas, sin embargo, ya nos demostró lo contrario
porque la Secretaría de Economía interpuso una impugnación derivado de
la sentencia de octubre de 2019 donde el Juzgado tercero cancela las
concesiones”.
“Es decir, el presidente actual, a través de la Secretaria de
Economía, nos está negando el derecho que ya un tribunal federal nos
está asignando en términos de nuestro reconocimiento como comunidad
indígena ancestral en el estado mexicano. Es decir hay una contradicción
en el discurso del presidente”, abundó.
Sin embargo, agregó, “lo sentimos pero nosotros como pueblos vamos a
seguir defendiendo nuestro derecho a nuestra identidad indígena”.
Finalmente resaltó que “las leyes en este país se mueven por el
dinero, por la corrupción, pese que el impacto al medio ambiente ha sido
brutal y nos afecta a todas las comunidades que vivimos en la cuenca
del río Capulálpam, río San Pedro y del río Grande. Todos padecemos la
cuestión ambiental que hemos padecido por casi 300 años y ninguna
institución han hecho absolutamente nada”.
Insistió en que “las empresas mineras se basan en las corruptelas para funcionar pero no cuentan con argumentos ambientales ni jurídicos para poder operar y ahí están las consecuencias, el impacto en los veneros de agua porque 13 manantiales han desaparecido debido a los trabajos subterráneos de la minera”.
Imagen: Conferencia de Prensa 11 de febrero 2020, Capulálpan de Méndez Crédito: Agencia EF
En el marco del Seminario Permanente de la Sustentabilidad,
Otros Mundos A.C.
Invita a su cine-debate:
“LAWQA, que el Parque vuelva a ser Parque”
Martes 18 de febrero de 2020, a las 18.00h en FORO CULTURAL KINOKI Calle Belisario Domínguez #5 A, Zona Centro, San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México
ENTRADA LIBRE
Los cines-debates de Otros Mundos están de regreso, les esperemos este martes 18 de febrero, a las 6 de la tarde en Kinoki, proyectaremos este documental chileno sobre la minería en una parque reserva natural, aquí una reseña sobre el documental.
La Reserva Mundial de la Biosfera “Lauca”, es una zona de biodiversidad única en el planeta. Ubicada en el altiplano de Chile, junto a la frontera con Bolivia, está siendo contaminada por relaves mineros abandonados y destruida por la desenfrenada explotación de la industria minera del bórax que atenta contra sus recursos naturales. Un destacado pescador con mosca, Gabo Benoit, recorre estas rutas solitarias en su mountain bike, en busca de un espacio único y mágico donde practicar la pesca deportiva.
En esta ruta con destino al Parque ”Lauca”, se encuentra con
enigmáticas historias sobre el abandono de este espacio, la dificultad
de la vida de los últimos habitantes de la región y las maniobras
políticas que han llevado al uso del altiplano Chileno como un vertedero
de relaves y desechos mineros a costa de sus maravillas naturales. En
este viaje, Gabo Benoit, junto a Fundación Relaves y activistas locales;
reconstruyen y revelan la historia de como se llegó a esta situación,
invitándonos a ser parte del mágico altiplano y de esta Reserva Mundial
de la Biósfera.
Documental: Lawqa (Lauca), que el Parque vuelva a ser Parque Duración: 32 minutos Protagonista: Gabriel Benoit Dirección: Raimundo Gómez Dirección de fotografía: Franco Davico Producido por: Patagonia – Fundación Relaves – Más Verde – Media Factor – Gabriel Benoit Filmado por: Más Verde Investigación: Victoria Caroca – Ladislao Palma – Javier Calvo – Juan Pablo Sanguinetti Edición: Franco Davico – Raimundo Gómez – Franco Sanguinetti – Javier Calvo
Compartimos esta investigación especial publicada en Sin Embargo sobre los daños ocasionados por la Minería – 19 de enero de 20202
La Platosa, como su nombre lo dice, es un yacimiento de
plata, el tercero más importante de México por su calidad, situado en
tierras del Ejido La Sierrita, en Durango, y operado por una minera
canadiense llamada Excellon Resources Inc.
Estos campos acolchados de forraje y contaminados con
arsénico, a decir de los ejidatarios de La Sierrita, enclavado entre los
municipios de Tlahualilo y Mapimí, Durango, son el único “beneficio”
que hasta ahora, y desde hace 12 años, ha dejado al pueblo la minera
Excellon.
Por Jesús Peña
Durango, 19 de enero (Vanguardia).– Desde arriba del gran bordo donde
descansa la vía del ferrocarril, con sus recios rieles y sus toscos
durmientes, se ve un vasto campo sobre el que se extiende una afelpada y
verde alfombra de alfalfa, que en el ocaso estepario da la sensación de
estar en un paraíso.
Debajo del puente, por el que transita el tren, corre un arroyo, un canal, una zanja, una acequia, como río de aguas cristalinas, que se pierde en el horizonte del crepúsculo y ofrece la vista de un oasis en medio del bolsón.
Y todo aquí da la impresión de estar en el edén, la tierra prometida, un vergel.
Parece un vergel, de no ser porque las aguas que bajan por esta rivera caudalosa y clara, son las aguas contaminadas con arsénico, y otros metales pesados, como el plomo y el zinc, que provienen de la mina La Platosa.
Con estas aguas contaminadas se riegan cientos y
cientos de hectáreas de forraje, (entre cinco mil y ocho mil hectáreas
de alfalfa, sorgo, avena, trigo, maíz): alimento de las miles y miles de
vacas que pacen sin malicia en los establos de la Región Lagunera.
Los
procesos de saneamiento del agua son rebasados por las cantidades de
arsénico y conseguir agua es complicado en este ejido. Foto: Jordi
Sifuentes, Vanguardia
La Platosa, como su nombre lo dice, es un yacimiento de plata, el
tercero más importante de México por su calidad, situado en tierras del
Ejido La Sierrita, en Durango, y operado por una minera canadiense llamada Excellon Resources Inc.
Estos campos acolchados de forraje y contaminados con arsénico,
a decir de los ejidatarios de La Sierrita, enclavado entre los
municipios de Tlahualilo y Mapimí, Durango, son el único “beneficio” que
hasta ahora, y desde hace 12 años, ha dejado al pueblo la minera Excellon.
Además de una cansada disputa por el territorio, entre el ejido y la minera, que comenzó en 2012 y aún se libra en los tribunales.
La Sierrita es apenas una trocha polvorienta y seca, bordeada de jacales de adobe, donde no hay pavimento ni drenaje, sólo el recuerdo de una planta purificadora de agua que ya no funciona y unos talleres de carpintería y costura que están parados por falta de dinero.
En La Sierrita, la mayoría de la gente, unos 100 de los 120
ejidatarios, han preferido huir y buscarse la vida en Ciudad Juárez,
Torreón o los Estados Unidos, ante la falta de oportunidades en una zona
donde su futuro está en peligro de extinción.
“Hay una página de la Excellon que dice que el Ejido La
Sierrita es ejemplo a seguir en Durango. No es cierto, estamos jodidos,
estamos en la ruina”, dirá Carlos Godoy Rivera, el secretario del
comisariado ejidal de este poblado.
“Esa tierra ya no sirve, porque ya tiene más de 10 años que se riega
con esa agua. Pa producir buena alfalfa, buen maíz, ya no. Trae muchos
metales, minerales, mucho arsénico, mucha sal, mucho plomo, zinc. No
está tratada. Es agua contaminada y está contaminando las tierras, los
pastos, la alfalfa, el maíz, la avena, el trigo, todo se está
contaminando aquí”.
Dice César Pulido Barrón, ejidatario y presidente del Consejo de
Vigilancia de La Sierrita, mientras señala a lo lejos, desde lo alto del
bordo del ferrocarril que va y viene de Ciudad Juárez a Torreón, las
campiñas y campiñas tapizadas de forraje que conceden al paisaje
desértico una belleza inusitada.
César denuncia que la minera Excellon Resources Inc vende el agua
contaminada con arsénico, plomo y zinc, a unos 13 pequeños propietarios,
(agricultores productores), socios de las grandes empresas lecheras en
La Laguna tales como Lala, Chilchota, Alpura.
Unos
100 de los 120 ejidatarios, han preferido huir y buscarse la vida en
Ciudad Juárez, Torreón o los Estados Unidos, ante la falta de
oportunidades en una zona donde su futuro está en peligro de extinción.
Foto: Jordi Sifuentes, Vanguardia
Al respecto un empleado de una reconocida empresa lechera, que pidió
no ser identificado, corroboró de manera extraoficial la versión de los
ejidatarios, al ratificar que una parte del agua de la mina la Platosa
es utilizada por más de una docena de agricultores productores, socios
de varias compañías lácteas de la región.
“Desde luego se hace en el marco de la ley, no hay
perjuicio a ningún tercero y sólo se utiliza una parte de total
disponible”, dijo la fuente.
Y deslindó a la firma que representa, de toda responsabilidad sobre
el manejo que sus socios agricultores productores hacen de sus negocios.
“Cada socio tiene la gestión que le puede convenir más
para su negocio en términos de compra de tierra, compra de forrajes,
derechos de agua y noria, y cada uno puede responder de lo que está
haciendo bien o, en su caso, de lo que está haciendo mal…”.
“Eso lo puede hacer la canadiense – dice Miguel Ángel Mijangos Leal,
enlace de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA), en el
estado de Guerrero –, gracias a que en la ley minera, cuando una mina
encuentra agua la norma dice literalmente que puede utilizarla conforme a
los intereses que le empresa defina y ahí lo que definieron fue echarla
para afuera, porque obviamente si no sacan esa agua no pueden sacar la
plata que está allá abajo. Hay empresas que hacen contubernio con la
minera para que les dé esa agua y meten forraje para la industria de
todo el corredor de Tlahualilo, que es muy grande. No sólo es la minera
como tal, sino que se va encadenando a otros megaproyectos como la
producción de forrajes que luego cae a otros intereses vinculados a esa
zona, que tienen que ver con la cuenca lechera”.
Un estudio realizado por Juan Enrique Márquez Silva, ingeniero
agrónomo, experto en uso y conservación del agua, señala que el volumen
de líquido que sale de la mina, como resultado de su laboreo, asciende a
unos dos mil metros cúbicos por segundo, cantidad que bastaría para
surtir a Gómez Palacio, Durango, y de paso a otros municipios.
“Se dice fácil, pero si lo vemos en una zona desértica es
mucha agua. La Platosa es un proyecto que agota el acuífero principal,
una mancha que viene de una seria de fracturas de la Sierra de
Bermejillo. Y según lo que hemos detectado toda esa sierra está formada
por grandes cavernas de yeso. En todas esas grandes cavernas primero
está el yeso y luego viene la plata. Ellos dicen que no va a pasar nada,
pero sí pasó y la Semarnat les dio permiso: un barreno rompió esas
capas, rompió lo que teóricamente son grandes cavernas que por millones
de años llenaron esas sierras calizas que son las fuentes de que se
alimenta el acuífero principal”.
Un documento relativo a un estudio de impacto ambiental del proyecto
La Platosa, promovido por la empresa Excellon Resources Inc. y publicado
en internet, dice que, “se han detectado estructuras como fallas
rellenas con yeso, cavidades y cavernas de varios metros de ancho…”, y
más adelante dice, “el área se ubica dentro de la unidad hidrológica
denominada acuífero principal, región lagunera, en una zona de veda y en
donde se presentan dos componentes: uno somero, que manifiesta
aportaciones a profundidades de entre 20 y 30 metros de escurrimientos
asociados a infiltraciones de recientes periodos de lluvia; y un
componente profundo del orden de 150 metros, en el que el agua
subterránea presenta concentraciones minerales que le dan un carácter
químico no apta para fines de consumo humano”.
Semanario colectó una muestra de las aguas de la Platosa y
las llevó al Laboratorio de Análisis Químico del Centro de Investigación
y Estudios Avanzados, (Cinvestav), del Instituto Politécnico Nacional,
(IPN), en Ramos Arizpe.
La Sierrita es apenas una trocha polvorienta y seca, bordeada de jacales de adobe. Foto: Jordi Sifuentes, Vanguardia
El examen arrojó que dicho líquido contiene 0.468 microgramos de
arsénico por litro de agua, cuando lo permitido por la norma nacional es
de sólo .025.
César dice que hace algunos años habitaban en esta sierra, la sierra
de Bermejillo, Durango, donde se encuentra asentado el ejido, manadas de
venados, jabalíes y otros animales silvestres, sin embargo, muchas de
estas especies han perecido tras beber las aguas del arroyo contaminadas
con metales pesados que extrae la minera de la mina y derrama, sin
permiso, en tierras de la comunidad.
En un estudio de impacto ambiental del proyecto La Platosa, difundido en la red, se lee que entre la fauna que caracteriza a La Sierrita, Durango, se encuentran el águila real, aura, cenzontle, correcaminos, conejo, coyote, gato montés, liebre, víbora de cascabel, zorro, ardilla, cacomiztle norteño, rata cambalachera y ratón, “(….), poco vistas, posiblemente, debido a las perturbaciones por las explosiones mineras realizadas en el área, el movimiento en la zona de cultivo de la zona de influencia o por el tráfico continuo en la carretera, lo que ha ocasionado el desplazamiento de la fauna hacia mejores condiciones del hábitat y menos perturbaciones”.
Y más abajo señala que “la acción de desmonte provoca que la
relativamente escasa fauna silvestre menor presente en la zona, se
desplace a sitios con menos perturbaciones cerca del área del proyecto,
afectando su comportamiento y dinámica poblacional por la migración”.
Esta contaminación, provocada por la minera, ha ocasionado también la
muerte de vacas y cabras propiedad de los ejidatarios, que al no
encontrar abrevaderos en la sierra, se sacian con el líquido letal
derramado por la empresa.
“Las vacas de los mismos ejidatarios que andan aquí
sueltas en el agostadero, se han muerto porque toman agua de ahí y luego
les faltan pedazos de carne a los animales, a las yeguas, a las vacas, a
las chivas. Se están muriendo donde toman agua de ahí”, dice César
Pulido Barrón, ejidatario y presiente del Consejo de Vigilancia de La
Sierrita.
Por estos pueblos proliferan las historias sobre labriegos que se han
encontrado reses muertas, botadas, en el desierto y que tras abrirlas,
tras realizarles una autopsia exprés, han descubierto las carnes
quemadas, ennegrecidas del animal.
“La gente dice, ‘la carne de los animales que toman agua
de esa, sale quemada’, son los daños que está haciendo esta agua
contaminada. Estos animales cuando mueren, que usted los quiere comer,
que los destaza, mira que no sirve la carne, está muy negra”, contará
Juan Enrique Márquez Silva, ingeniero agrónomo, experto en uso y
conservación del agua.
Habla Miguel Ángel Mijangos Leal, enlace de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA), en el estado de Guerrero:
“Sí, nosotros medio sabíamos de unas historias, no de
ahorita, de hace unos seis años, sobre varios animales que fueron a
tomar agua, se les infló el vientre y murieron”.
El
tren, corre un arroyo, un canal, una zanja, una acequia, como río de
aguas cristalinas, que se pierde en el horizonte del crepúsculo y ofrece
la vista de un oasis en medio del bolsón. Foto: Jordi Sifuentes,
Vanguardia
“El agua va rodada y pasa por tierras del ejido. Sin permiso la
pasan, les vale… Quieren que salga lo más lejos posible. A parte ellos
están haciendo su negocio, están vendiendo el agua para la siembra y
están tirando el agua que sobra al ejido, sin permiso. Están dañando la
tierra y nomás están ganando, ellos están explotando, están sacando a
diario, no sé cuántas toneladas de plata, plomo, zinc”, dice Juan
Guadalupe Zamarripa González, el presidente del comisariado del Ejido La
Sierrita, un atardecer de vendaval que ha venido con otros ejidatarios
para recorrer el área afectada por la contaminación de la mina.
Carlos Godoy Rivera, secretario del comisariado, dice que al
principio la minera puso unos letreros que decían “agua no apta para
consumo humano”, letreros que más tarde fueron retirados cuando la
empresa comenzó a vender el líquido a los pequeños propietarios.
Camino de la carretera 49 a Ciudad Juárez, que parte las tierras del ejido ubicado a unos cinco kilómetros de Bermejillo, Durango, y a 50 kilómetros de Torreón, el ejidatario César Pulido dice que las aguas que corren por el arroyo situado debajo del puente del ferrocarril, son las aguas que la mina desecha, que le sobran, después de haberlas repartido entre los pequeños propietarios de la región, muchos de los cuales rentan tierras al ejido.
“Esta agua ya está sobrante eh, esta agua ya es sobrante
de la que agarran todos, pero esa agua que están tirando, la que sobra,
ya nos perjudicó todo el terreno, porque ya secó todo el pasto, lo
quemó”.
Y dice que esta contaminación ya ha hecho estragos incluso en la
flora, cactáceas, plantas medicinales y árboles, que vive en este
desierto.
“Aquí había monte de buena calidad. Aquí era buen pasto y
todo, buenos mezquites. Todo eso amarillo que uste mira ya está quemado
con esta agua, ya de ahí no sale nada de pasto ni mezquites, todo eso
amarillo ya está quemado, el terreno ya está quemado. Si se mete usté y
saca ese mezquite lo saca con salitre, ahí sale con salitre ese
mezquite, ya está muerto ese mezquite, la pastura ya está muerta, ahí ya
no sale el zacate”.
Miguel Ángel Mijangos Leal, enlace de la Red Mexicana de Afectados
por la Minería (REMA), en el estado de Guerrero, aclara que esta
deforestación se debe a que, además de ir cargada con altas
concentraciones de arsénico, el agua de la Platosa es rica en carbonato
de calcio y magnesio.
“Además de sacar el arsénico y ponerlo en la superficie
con estos cultivos, también se está salinizando el suelo, es decir,
después de algunos años ese suelo ya no va a quedar ni siquiera para que
crezcan nopales…”.
Los ejidatarios cuentan que no hace mucho tiempo había en el pueblo
una noria de la que se abastecían los habitantes, pero que se secó
después que la minera iniciara sus actividades de exploración y
explotación.
Los
ejidatarios cuentan que no hace mucho tiempo había en el pueblo una
noria de la que se abastecían los habitantes, pero que se secó después
que la minera iniciara sus actividades de exploración y explotación.
Foto: Jordi Sifuentes, Vanguardia
“Había norias jalando bien bonito. Una pequeña
(propiedad) aquí tenía cinco norias. Se secaron por lo mismo de que la
mina saca el agua y ya las norias no produjeron nada. Muchas de las
norias al derredor de Bermejillo y de Gómez se han secado por culpa de
la mina”, dice César.
“Las mineras canadienses vienen a hacer, en pocas palabras y
discúlpeme, pero puro desmadre”, dice Verónica Pulido Barrón,
ejidataria.
“Con el Gobierno”, la secunda el comisariado Juan Zamarripa,
“Por eso, aunque nosotros vayamos a pedir justicia a todo mundo… Si
son nuestras tierras, ¿por qué ellos vienen a adueñarse de algo que no
es suyo? ¿Y por qué el Gobierno los apoya?, ¿porque tienen dinero y a
nosotros no…?”, dice Verónica.
Los ejidatarios de La Sierrita dicen estar preocupados por los daños a
la tierra, a los animales y a la salud humana, que en el futuro pueda
provocar esta contaminación, causada por la minera.
“Uno que consume leche y todo eso, Lala, riega con esa
agua, Chilchota riega con la misma agua y producen la leche y todo.
Imagínese cómo está la Comarca”, dice el ejidatario César Pulido.
Al respecto una investigación realizada hace una década por la
Facultad de Agricultura y Zootecnia, de la Universidad Juárez del Estado
de Durango (UJED), reveló cómo las aguas contaminas con altas
concentraciones de arsénico que son usadas en el regadío de cultivos,
tienen un impacto negativo en la cadena alimenticia.
“Si regamos con agua contaminada con arsénico o el suelo
está contaminado con arsénico, la planta extrae este metaloide y pasa a
la cadena alimenticia, es acumulativo, no lo podemos degradar. Del agua
pasa al suelo, del suelo a la planta, de la planta al animal y luego nos
comemos la carne o la leche, ahí va la concentración de arsénico. Aquí
en la región tenemos mucho cáncer, tanto en Coahuila como en Durango, y
es debido a eso, a que la concentración de arsénico está muy alta y las
plantas la absorben y luego nos comemos el maíz o el frijol. O el
arsénico se pasa a la carne y lo vamos a acumular hasta que llega a un
nivel de toxicidad”, advierte Cirilo Vázquez Vázquez, director de la
Facultad Agricultura y Zootecnia, de la Universidad Juárez del Estado de
Durango, (UJED, y doctor en recursos naturales.
Tales resultados se obtuvieron de un estudio sobre cultivos, maíz y
frijol, sembrados en suelos con altos niveles de arsénico o regados con
agua de pozos profundos, altamente contaminados con este metaloide, en
el Ejido Batopilas, municipio de Francisco I. Madero, Coahuila.
“Se evaluó y realmente se observó que el arsénico pasa
del agua al suelo y luego a la planta y después a los animales, la carne
o la leche. Los cultivos absorben la concentración de arsénico y sí,
está en lo que nos estamos comiendo”, reitera Vázquez Vázquez.
Con
estas aguas contaminadas se riegan cientos y cientos de hectáreas de
forraje, entre cinco mil y ocho mil hectáreas de alfalfa, sorgo, avena,
trigo, maíz): alimento de las miles y miles de vacas que pacen en los
establos. Foto: Jordi Sifuentes, Vanguardia
Semanario buscó reiteradamente a Sandra Magaña, la directora
de relaciones corporativas de Excellon en México, a fin de que diera su
versión en torno a las acusaciones vertidas por los ejidatarios de La
Sierrita.
Hasta el momento no ha respondido a las solicitudes de entrevista.
Este medio intento comunicarse, durante casi dos semanas, con Óscar
Gutiérrez Santana, el gerente regional de Cuencas Centrales del Norte de
la Comisión Nacional del Agua, para que fijara su postura sobre este
reportaje.
Al cierre de esta edición no hubo respuesta.
Por su parte, Román Galán Treviño, encargado del despacho de la
Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat),
delegación Durango, declaró que hasta ahora la dependencia no tiene
ningún comunicado, ninguna denuncia en particular sobre el tema de la
contaminación en La Sierrita.
“Sé que han estado en pláticas con la Comisión Nacional
del Agua, viendo precisamente el problema de la contaminación, Es lo que
hemos sabido extraoficialmente, pero no hemos tenido ninguna petición o
planteamiento del ejido”.
-¿Conocía el problema?
-Conocemos el problema, pero a través de los medios, de la prensa, hasta ahí.
José Luis Reyes, encargado del despacho de la delegación de la
Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, (Profepa), aclaró que no
es competencia de esta oficina verificar las condiciones de manejo y
uso del agua en las mineras.
Y añadió que es responsabilidad de la Conagua regular este tipo de aprovechamientos.
“Es quien se encarga de verificar todo lo que es el manejo y uso del agua”.
Compartimos el comunicado del Movimiento Acción Colectiva, la Hermandad de la Cuenca de la Independencia y la Red Mexicana de Afectadas y Afectados por la Minería REMA – A 22 de enero de 2020
Las comunidades afectadas por el Proyecto Minero Cerro del Gallo, junto a las organizaciones integrantes de la Hermandad de la Cuenca de la Independencia y la Red Mexicana de Afectadas y Afectados por la Minería (REMA), tenemos la alegría de comunicar a la población de los municipios del territorio de la Cuenca de la Independencia que, después de un largo proceso informativo y de organización, de manifestaciones públicas, así como de múltiples gestiones ante las autoridades competentes -federales y municipales-, la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental de la Subsecretaría de Gestión para la Protección Ambiental de la SEMARNAT ha tenido a bien resolver -el pasado 17 de diciembre del 2019- el Trámite Unificado de Cambio de Uso de Suelo Forestal, modalidad BRegional solicitado por la empresa San Antón de las Minas, S.A. de C.V -filial mexicana de la minera canadiense Argonaut Gold- para el proyecto de “EXPLOTACIÓN Y BENEFICIO DE MINERALES METÁLICOS CERRO DEL GALLO” a ubicarse en el municipio de Dolores Hidalgo, Guanajuato, en sentido negativo.
La denegación de la autorización solicitada se basa, por un lado, en una serie de inconsistencias, irregularidades y omisiones detectadas por la autoridad en el DOCUMENTO TÉCNICO UNIFICADO presentado por la empresa y por otro, en que el proyecto minero en cuestión se ubica en un territorio actualmente considerado para uso forestal y agropecuario de temporal por lo que no es congruente con la vocación natural de la región, ni con los objetivos establecidos en el Programa Estatal de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Ecológico Territorial de Guanajuato (PEDUOET).
Es importante resaltar la Política Ecológica establecida en el programa mencionado – PEDUOET– para las Unidades de Gestión Ambiental y Territorial (UGAT’s) número 239 y 257, en las que se ubicaría este proyecto minero.
El PEDUOET señala entre otras cosas que, la política ecológica y los lineamientos para estas dos Unidades, son: ”restauración y mejoramiento, recuperación de la cobertura vegetal original y las funciones ecológicas de los ecosistemas, promoción e impulso de actividades alternativas para un aprovechamiento sustentable” de los recursos, que evite la disminución de capital natural, por lo que las actividades compatibles serían: acuacultura, agricultura de temporal, ganadería extensiva, forestal maderable y no maderable, turismo alternativo, entre otras. Y que las actividades no compatibles son: agricultura de riego y de humedad, agroindustria, ganadería intensiva, turismo convencional, asentamientos humanos urbanos, industrias ligera, mediana y pesada y minería, entre otras.
Nos congratulamos de que el gobierno federal haya concluido que es un proyecto inconsistente, incompatible e incongruente con la vocación de la región. Reconocemos también que el C. Miguel Ángel Rayas Ortíz, presidente municipal de Dolores Hidalgo haya honrado su palabra dada a las poblaciones afectadas por el proyecto y no haya otorgado ningun tipo de permiso para la operación del mismo, así como por sus gestiones ante las autoridades federales a favor del territorio y de las comiunidades que lo habitan.
No omitimos señalar que el total de las autoridades a quienes la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental de la SEMARNAT les solicitó una opinión técnica sobre el proyecto, concluyeron que este no era viable. Pese a este triunfo de las comunidades que habitan los territorios de extracción, sabemos que la minera canadiense difícilmente cesará en sus intentos por explotar el Cerro del Gallo. En este sentido, queremos anunciar que continuaremos con el proceso informativo y organizativo con las comuidades para que, en su oportunidad, esten en posición de combatir legalmente un nuevo intento de aprobación.
Finalmente, dado el deterioro ecológico de la región debido en gran medida al abandono del campesinado en las políticas de fomento durante las últimas décadas, esperamos que las instituciones de los tres niveles de gobierno se sensibilicen con la situación y favorezcan la participación de la población organizada de las comunidades campesinas en el diseño y aplicación de proyectos de restauración de los ecosistemas, de aprovechamiento sustentable de los bienes naturales -en especial del agua- en concordancia con el Programa Estatal de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Ecológico Territorial de Guanajuato (PEDUOET) para reactivar la economía rural en la región y recuperar las capacidades de gestión de sus habitantes.
Dolores Hidalgo, Guanajuato
CUNA DE LA INDEPENDENCIA DE MÉXICO
COMUNIDADES AFECTADAS HERMANDAD DE LA CUENCA DE LA INDEPENDENCIA ACCIÓN COLECTIVA SOCIOAMBIENTAL, A.C. RED MEXICANA DE AFECTADAS Y AFECTADOS POR LA MINERÍA
Imagen: Rueda de prensa Dolores Hidalgo, Gto, México. 22 de enero de 2020
Movimiento Colombiano Ríos Vivos se solidariza con comunidades afectadas por rompimiento de represas en Brasil
Al cumplirse más de cuatro años del crimen cometido por el rompimiento de la represa de residuos de la minería en Mariana y un año del crimen cometido en Brumadinho en Brasil, que afectó cientos de kilómetros de la cuenca del Río Doce y Río Paraopebas, y con esto, afectó también la vida de miles de familias, destruyendo sus casas, sus formas de vida, sus trabajos y asesinando a cientos de personas habitantes de las cuencas y trabajadores de las empresas, exigimos que la empresas criminales VALE BHP BILLION Y SÁMARCO sean responsabilizadas penalmente por estos terribles sucesos y no se les permita seguir ejerciendo dicha actividad minera ni de ninguna otra que tenga que ver con los bienes de la naturaleza. En el mismo sentido, exigimos que se realicen los desmantelamientos de las presas de manera preventiva, priorizando los niveles de riesgo.
Con dolor y solidaridad en nuestros corazones el Movimiento Ríos Vivos proceso nacional en el que se articulan procesos territoriales de familias campesinas de Colombia afectadas por la política energética en el país, acompaña a las familias pescadoras, campesinas, trabajadores y trabajadoras afectadas por la acción criminal de dichas empresas. Y nuestra voz se une a la de las poblaciones afectadas, al llamar a la empresa de criminal puesto que:
Los informes e investigaciones demuestran que se pudo haber hecho algo para contener o mitigar la catástrofe y no se hizo nada.
A la fecha las familias siguen sin techo y las medidas de atención no corresponden a las necesidades del pueblo ni mucho menos a la situación generada por estas empresas.
Existen varias decenas de otras represas en las que el rompimiento es inminente, allí la tranquilidad se ha perdido, la empresa activa alarmas en medio de la noche sin comunicación con las comunidades. Tampoco se sabe de planes para desmantelar preventivamente y seguir evitando catástrofes.
La situación de Brumadinho y Mariana en Minas Gerais, muestra el horizonte de las externalidades de los grandes proyectos mineros, al igual que se desarrollan en Colombia y América Latina, dado que el vertimiento de lodos tóxicos jamás fue el desarrollo que prometieron, y dado que, a pesar de ser evidente y demostrada la responsabilidad frente a los daños, las empresas continúan empecinadas en negarlo, en dividir a las comunidades y en dilatar los procesos judiciales, para buscar los menores costos de reparación.
Para la VALE solo es el dinero, para los afectados es su vida. Lo que la VALE destruye, el pueblo construye.
Animamos a las familias afectadas a continuar con dignidad en la reclamación de sus derechos, no permitan que les hagan sentir que sus reclamaciones no tienen efecto, por cada voz levantada son miles de corazones conmovidos. Para nosotros en Colombia, para el Movimiento de Afectados por Represas en América Latica –MAR- y el resto del mundo su lucha nos anima a seguir construyendo un mundo para el mañana sin represas y sin abandonar nuestra dignidad.
Enviamos saludos a las conmemoraciones que ocurrirán los próximos días en una masiva movilización desde Belo Horizonte hasta Córrego do Feijão y Brumadinho.
¡Aguas para la VIDA, no para muerte!
#TransicionEnergetica justa de y para los pueblos
Imagen Movimeinto de Afectads por Represas Brasil (MAB)
Compartimos esta nota de Notimex a través del Diario Rotativo sobre otro caso más de resisencia a proyectos mineros de muerte en México – A 2 de enero de 2020
Samalayuca, Chih., 2 Ene (Notimex).- Los agricultores de la región
conformada por los cuatro ejidos Samalayuca, Ojo de la Casa, El Vergel y
Villaluz, iniciaron la resistencia civil al proyecto minero y están
dispuestos a impedir el paso de la maquinaria y a ampararse si las
empresas participantes en el proyecto insisten en su explotación.
Gregorio Valtierra Porras, secretario del comisariado ejidal, expresa
su rotunda desaprobación a la instalación de la mina porque, dice,
eliminará la actividad agropecuaria de los ejidos.
“Hacer un paro a mi ver, a mi ver, definitivo, que no pasara ninguna
persona de ellos hacia donde se va a hacer la mina. No dejar pasar la
maquinaria. Mucha gente, que es la mayoría del pueblo, gente que viene
de Ciudad Juárez, gente que viene de las rancherías también cercanas
están de acuerdo con nosotros; y con el apoyo de todas esas personas me
imagino yo –confía-, vamos a salir triunfadores”.
Valtierra dijo que están decididos a evitar que las mineras
Samalayuca Cobre y VVC Exploration de Vancouver, Canadá, comiencen a
demoler la sierra.
“A estas alturas se trata de no nada más de proteger el beneficio
mío, se trata de defender a la comunidad entera. Creo que hasta allá
llegaremos a hacer el paro definitivo, bloquear, obstruir las entradas a
la mina, donde sea posible llegar y hacerlo”, reafirmó.
Daniel Zamarrón, profesor de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez
(UACJ), integrante del Frente Eco-social Paso del Norte, indicó que los
agricultores cuentan con el apoyo de la sociedad civil y la comunidad
académica.
“Estamos haciendo conciencia del impacto que significa un
emprendimiento de estas características. Hemos hecho foros en la UACJ,
en el Tecnológico Ciudad Juárez, secundarias y primarias de la ciudad.
Se han llevado a cabo asambleas informativas”, expuso.
En el desfile del 16 de septiembre se manifestaron y han instalado
brigadas informativas en distintos puntos de Ciudad Juárez donde
reparten trípticos con toda la información relativa a los efectos
negativos del proyecto.
En tanto, Valtierra Porras recuerda que desde niño ha arado la
tierra, su padre le enseñó a usar el azadón y ahora de adulto,
proporciona 48 empleos en temporada de cosecha.
“Le pediría a las autoridades federales que hicieran un poco más de
conciencia, que se pongan en nuestro lugar, que nosotros como
pobladores, somos de muchísimos años aquí en Samalayuca para que llegue
una cosa de esa magnitud, de la contaminación que va a provocar y nos
destruya nuestras vidas”, advirtió.
Por ello insiste en pedir a las dependencias federales que “se pongan
en nuestro lugar y nos echaran la mano con esto, que la mina no se
llevar a cabo”.
Manuel Belmontes Rea, asegura que “van a meter un amparo en contra de la mina”.
Puntualiza que la justificación de las empresas de que generará mil
200 empleos no es argumento porque aquí lo que sobra es el trabajo.
“Alcanza para 600 plazas en tiempo de cosecha de hortalizas en las
800 hectáreas de cultivo. Con decirle que aquí viene gente a trabajar de
Durango, Puebla, Oaxaca, de la sierra de Chihuahua, en los tiempos que
hay cosecha. Empieza desde mayo hasta octubre, hasta que cae la primera
helada y luego sigue la cosecha de la nuez, como ahorita que está la
cosecha de la nuez”, explicó.
“Por el lado del comercio, a lo mejor nos convendría que pusieran la
mina. Y luego, ¿qué ganamos si como comerciantes nos vamos a llenar de
billetes y al rato nos los vamos a acabar en el hospital porque vamos a
estar enfermos por lo que respiramos, el agua que tomemos, todo eso de
qué sirve?”, cuestionó Belmontes Rea.
Intentan pasar a “la mañanera”
La presión sobre los pobladores los obligó a acudir a la Ciudad de
México a intentar entrevistarse con el presidente Andrés Manuel López
Obrador en la Conferencia Matutina del pasado dos de diciembre, a quien
no pudieron ver.
Jesús Ernesto Pedroza Pineda, uno de los agricultores que acudió a la
capital del país, explicó que se entrevistaron con una diputada federal
del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), quien les
dijo que los apoyará en su petición.
El poblado de Samalayuca comenzó la resistencia contra el proyecto,
algunas viviendas muestran su rechazo al mismo con mensajes colocados en
las bardas y cercas de las casas, han hecho manifestaciones y acciones
para la concientización de la población afectada.
“Hemos estado manifestándonos aquí en el pueblo y en Juárez, fuimos
hasta México, fuimos ahí con el presidente, fuimos al Mañanero (sic), y
no nos dejaron entrar. Y fuimos a Cámara de Diputados, estuvimos ahí y
ya nos regresamos para acá”, explicó.
No queremos ese monstruo
“Como nosotros somos agricultores de siembra, la mina dicen que trae
mucho dinero, las ganancias se las van a llevar los canadienses nada
más, aquí van a dejar puro desastre en nuestro pueblo. Que no nos pongan
ese monstruo aquí en el poblado de Samalayuca. Nosotros estamos
peleando por nuestra vida”, añadió Pedroza Pineda.
Dijo que la preocupación al concretarse el proyecto minero son los efectos en la salud de la población.
Porque como es una mina a cielo abierto trae muchos gases y todo,
aquí pues sembramos y dicen que da cáncer y es un peligro para aquí para
el pueblo”.
Añadió que los trabajos mineros se realizarán muy cerca tanto de la
zona de siembra y cultivo de hortalizas como de la población que radica
en los cuatro ejidos mencionados.
“De aquí para allá empiezan las hortalizas, las calabacitas, ahí
tenemos la Comisión (la termoeléctrica de la Comisión Federal de
Electricidad, CFE), ahorita está jalando, está echando mucho vapor”,
explica Pedroza Pineda mientras va señalando la serie de cultivos que
tienen en esta región donde también producen nueces.
Y añade cada uno de los aspectos que hacen fuerte económicamente esta
parte de Chihuahua, que a su juicio no requiere más oferta de trabajos
que dañarán el medio ambiente.
“Es que aquí es un pueblo turístico, viene mucha gente a visitarnos
de Estados Unidos y de Juárez. Están las albercas, tenemos las dunas, el
Ojo de la Casa, los petrograbados, ahí donde está la mina. Es piedra
laja, con las vibraciones de la mina se van a destrozar los
petrograbados y es lo que no queremos”, reitera.
“Aparte –agrega Ramiro Herrera Alvarado-, aquí hay venado, hay
jabalí, coyote, puma, gato montés, víbora de cascabel, tortuga del
desierto, que casi se extinguieron con otra mina”, alertó.
Por ello solicitó la intervención presidencial: “Que no se haga la mina, aquí hay mucho trabajo, aquí no trabaja y no se supera el que no quiere. Queremos que le llegue la información al presidente López Obrador para que nos ayude, queremos dejar de herencia este ecosistema a nuestros hijos y nuestros nietos”, finalizó.
Imagen: Agricultores de la región conformada por los ejidos Samalayuca, iniciaron la resistencia civil al proyecto minero y están dispuestos a impedir el paso. FOTO: NOTIMEX.
Compartimos el comunicado del Movimiento Acción Colectiva, la Hermandad de la Cuenca de la Independencia y la Red Mexicana de Afectadas y Afectados por la Minería REMA y una nota publicada en Zona Franca a través de Sin Embargo sobre la lucha que se realiza en contra de una minera canadiense en Dolores Hidalgo – A 15 de enero de 2020
El Proyecto Minero Cerro del Gallo no va. Comunidades de Dolores Hidalgo en defensa de su territorio contra el despojo minero
Ante la pretensión de la empresa canadiense Argonaut Gold de explotar una mina a tajo abierto en el Cerro del Gallo en el municipio de Dolores Hidalgo, Guanajuato y luego de una lucha continuada de las y los pobladores de las comunidades que habrían sido afectadas por la defensa de su territorio, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) resolvió negar la autorización en materia de impacto ambiental y cambio de uso de suelo solicitados por la empresa.
Apenas en noviembre del 2019, a invitación del Frente Amplio Opositor a la Minera San Xavier, integrantes de las comunidades afectables visitaron el Cerro San Pedro en San Luis Potosí para constatar, de primera mano, las afectaciones concretas al territorio, a la salud y al medio ambiente que produce la minería en su paso por los territorios de extracción.
Mediante un proceso de información, que concitó la participación de mujeres y hombres de las comunidades del municipio de Dolores Hidalgo en oposición al proyecto minero (Santa Bárbara, Cerrito de Guadalupe, La Colmena, El Durazno, Palacio de Abajo, El Potrero de Guadalupe, San José de la Campana, San José de la Palma, El Llanito, La Ventilla, San Isidro el Sisote, San Marcos, Purísima de Cebolletas, Cabaña de San Jerónimo, La Tinaja, Cerrito de Santa Cecilia, San Vicente, Silleros, San Francisco de la ERRE y El Capulín) las y los potenciales afectados cobraron concienca de la capacidad criminal de la megaminería tóxica.
No olvidamos que apenas en julio del año pasado, en la ciudad de Guanajuato, durante el acto de inauguración de la “Expo México Minero”, Salvador García Ledesma, presidente de la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México, calificó como “ridícula” la preocupación de las comunidades por los daños a la salud y al medio ambiente que genera la actividad minera. Se refería a la preocupación de las comunidades por las posibles afectaciones del Proyecto Cerro del Gallo. Desde la REMA, advertimos entonces, cómo esa declaración revelaba justamente la actitud con la que la actual industria minera en México se relaciona con las comunidades que habitan los territorios que pretenden explotar: desprecio a sus intereses y preocupaciones, desprecio por su vida, su salud y su territorio.
Pues bien, aquí siguen de pie estas comunidades y las organizaciones que las acompañan, dispuestas a la “ridícula” idea de defender su territorio, su vida y su futuro.
Durante este proceso de defensa, las comunidades han contado con el apoyo sostenido de las organizaciones que conforman la Hermandad de la Cuenca de la Independencia (nombre del acuífero que sería afectado por la minera), del Frente Amplio Opositor a la Minera San Xavier y de la Red Mexicana de Afectadas/os por la Minería (REMA).
Para combatir la estrategia de desinformación utilizada por las empresas del Modelo Extractivo Minero, la cual implica el ocultamiento de las consecuencias nocivas de sus proyectos y la oferta de beneficios ficticios, nuestro trabajo consiste en acercar información objetiva y real sobre las diversas afectaciones que produce la minería: contaminación de la tierra, del agua y del aire, erosión y desertificación del territorio y afecciones a la salud; pérdida de soberanía alimentaria, de biodiversidad y del paisaje así como altísimas contribuciones al cambio climático; empleos precarios, violaciones sistemáticas a los derechos humanos, debilitamiento del tejido social, división de comunidades; atentados contra la integridad física y emocional de opositores así como su criminalización, son algunos de ellos cuando las mineras aparecen.
Pese al estado de necesidad que impera en las comunidades que habitan los territorios donde la minera canadiense Argonaut Gold y su filial mexicana San Antón de las Minas, S.A. de C.V. pretenden explotar el Cerro del Gallo, las y los pobladores han expresado su rechazo demostrando dignidad y capacidad de organización. Ello refrenda que desde la organización, la información técnica y la movilización, los pueblos tienen la autoridad y legitimidad necesaria para hacer valer el respeto a la vida y el respeto a su futuro.
Felicitamos a las comunidades que se han movilizado en esta lucha dando un ejemplo de unidad y de capacidad de respuesta en la Cuna de la Independencia de México. Nos congratulamos y felicitamos a las organizaciones que han apoyado este proceso y a nuestros compañeros de REMA implicados en esta batalla por la integridad de los territorios. La confluencia de capacidades y de dignidad prevalece y nos da bríos para continuar esta lucha contra el despojo y por la vida.
¡NO AL DESPOJO DE NUESTROS TERRITORIOS! ¡ORGANIZACIÓN, INFORMACIÓN Y MOVILIZACIÓN POR LA VIDA Y CONTRA EL MODELO EXTRACTIVO MINERO! ¡EL DESPOJO NO ES DE UTILIDAD PÚBLICA!
2020 será año clave en la lucha contra mina en el Cerro del Gallo en Dolores Hidalgo
Por Roberto Gutiérrez Torres, 1 de enero de 2020
Cientos de comuneros, campesinos, y habitantes de alrededor de 20 comunidades, han dado la batalla en este 2019, para que no se instale la empresa Canadiense Argonaut Gold, señalando el caos ambiental y los daños inherentes daño a la salud , que esto provocaría si llega a explotarse la mina en el Cerro del Gallo.
Dolores Hidalgo, Gto. En 2019 la población
dolorense y en específico quienes habitan en alrededor de 20 comunidades
aledañas a San Antón de las Minas, a unos 15 kilómetros de la cabecera,
han iniciado una lucha ciudadana, pacifica cuyo objetivo es buscar la
concientización entre los habitantes de la región que incluye a otros
municipios, y hacer saber al gobierno municipal, estatal y federal que
no quieren la explotación de la mina ubicada dentro de su territorio.
Dentro de su página oficial la compañía canadiense
Argonaut Gold precisa que: “Argonaut adquirió el proyecto Cerro del
Gallo por 15 millones de dólares en noviembre de 2017. Es el tipo de
proyecto que históricamente hemos operado bastante bien y se sitúa justo
dentro del nivel de habilidades de nuestro equipo. Los recursos y
reservas conocidos de mineral solo representan una porción muy pequeña
de la tenencia minera controlada a través de varios objetivos de
exploración en San Antón”, se señala en palabras de Bob Rose,
vicepresidente de Servicios Técnicos.
El Proyecto
La empresa canadiense Argonaut Gold pretende desarrollar su etapa de
explotación en el Cerro del Gallo en las inmediaciones de la Cuna de la
Independencia, misma que ya se encuentra operando en nuestro país, entre
ellos en el complejo El Castillo en el Estado de Durango y en la mina
La Colorada en Sonora.
Entre sus proyectos de exploración avanzada está trabajando en la
mina de San Antonio, en Baja California Sur y en la del Cerro del Gallo;
es en este último proyecto donde la compañía canadiense se ha
encontrado con el rechazo frontal de pobladores, activistas y
ambientalistas .
De realizarse su proyecto abarcaría un área total de más de 20 mil
hectáreas y los minerales extraídos serían beneficiados con cianuro de
sodio mediante la técnica de lixiviación en pila que suele producir
graves afectaciones a la salud de las poblaciones aledañas.
Así como el uso y contaminación de grandes cantidades de agua han
señalado ambientalistas y activistas de la Cuenca de la Independencia.
En el contexto de sobreexplotación, agotamiento y contaminación del
“Acuífero Cuenca de la Independencia”, el acaparamiento de grandes
volúmenes de concesiones de agua subterránea por empresas y la aguda
escasez para los habitantes de las comunidades rurales, donde hace años
se señalado la crisis hídrica.
Organizaciones civiles, comunales, campesinas y pobladores en lucha
Son diversas organizaciones las que se han estado sumando de manera
activa en conjunto con los pobladores en el diseño y ejecución de
acciones de concientización sobre lo negativo que traería la explotación
de la mina.
Las comunidades vecinas de San Antón de las Minas y ella misma tienen
organizaciones campesinas y comunales que han estado trabajando en
métodos alternativos de producción comunitaria entre ellas se encuentra
el Centro de Desarrollo Agropecuario y Social CEDESA, quien tiene ya más
de 50 años en coadyuvancia con los campesinos y pobladores de esa
región.
Otras organizaciones que han encabezado la lucha de “No a la Mina “
es la Coalición por la Defensa de la Cuenca de la Independencia CODECIN y
junto a ellos un colectivo de jóvenes denominados “Guardianes de la
Cuenca de la Independencia”, todas ellas con trabajo continuo municipal y
regional con una gran base activa de miembros.
En otra vertiente otras organizaciones con presencia estatal,
nacional e internacional como la Red de afectados por la Minería Rema,
Acción Colectiva Socio-ambiental, A.C. y la Hermandad de la Cuenca han
estado trabajando sobre el mismo objetivo.
En estos momentos el proyecto minero dependería de que se den en
conjunto tres factores: los permisos correspondientes del gobierno
municipal y federal y la permisibilidad de los propietarios de la tierra
para que la empresa pueda usar sus terrenos y explotar la mina de
acuerdo a declaraciones del activista y abogado Gustavo Lozano, miembro
de Acción Colectiva Socio-ambiental.
Gustavo Lozano precisa que actualmente la empresa está en el proceso
de exploración de la zona para posteriormente, si obtiene los permisos
necesarios por parte de la SEMARNAT, pasar a a la etapa de la
explotación de la mina.
En septiembre pasado SEMARNAT le anuncio a la empresa que en ese
momento no podría determinar los permisos para explotar la mina,
iniciados a principios de este año por la minera y la institución dio un
plazo más largo para analizar el permiso solicitado.
En términos municipales, el edil Miguel Angel Rayas Ortiz, se ha
solidarizado con las organizaciones civiles locales, a las cuales le
manifestado su apoyo en contra la minera, y hasta el momento el gobierno
no ha otorgado ningún permiso de cambio de uso de suelo, ni de
construcción.
Los pobladores con propiedades de tierras en la zona de
la mina, explica el activista que una gran mayoría aun ha no han
accedido a vender sus terrenos. En conclusión señala, Gustavo Lozano ”
al cierre del año 2019 tenemos un tramite en SEMARNAT mismo que
esperemos que sea negado a la brevedad, y de acuerdo a lo declarado por
el gobierno de Dolores Hidalgo, quien ha manifestado que no ha otorgado
ni un permiso de cambio de suelo, ni de construcción así como los
pobladores de San Anton de las Minas un mayoría de ellos no han
negociado sus tierras para que la minera pueda realizar sus actividades ”
Samuel, de 58 años, originario del Ejido El Venado,
municipio de Madero, en la región del arsénico, vive con diabetes y una
malformación congénita en su pierna derecha, que lo mantienen atado a
una silla de ruedas en el portal de su casa de Salvador.
Los estudios más recientes realizados por la la Universidad
Juárez del Estado de Durango, en coordinación con la Universidad
Autónoma de Coahuila, revelan que la ingesta de agua con elevadas
concentraciones de arsénico, puede ocasionar infertilidad e incluso
trastornos como la obesidad.
Por Jesús Peña
Coahuila, 5 de enero (Vanguardia).– A las 3:00 de una tarde húmeda en
“La Manada”, el pequeño rancho jaspeado de espesos pinabetes y
nopaleras frondosas, un enjambre de moscas gordas, atraído por el hedor a
muerto, a carne podrida, revolotea ávido en derredor de la mano
gangrenada, destrozada, de don Santos Martínez.
La mano izquierda de don Santos: apenas un amasijo de carne sanguinolento, pestilente, donde no hace mucho hubo una mano.
La mano de don Santos.
De vez en vez Santos se espanta las moscas, tercas, hambrientas, con
su otra mano regordeta y tostada por el sol, que de un tiempo a la fecha
ha empezado también a picarse.
“Mire lo que tengo ái. Mire, esto, esto… Me resultaron todos estos cuerillos en las dos manos. Es por el agua, por el arsénico del agua…”, masculla Santos.
Se lo dijo un doctor de Madero: que es por el agua que desde crío tomó Santos de los pozos contaminados con arsénico en el Ejido 18 de Marzo, municipio de Francisco I. Madero, en la Comarca Lagunera de Coahuila.
De Francisco I. Madero, conocido como “el corazón de la Laguna”, un corazón cuyas arterias están corroídas por el arsénico.
Los
procesos de saneamiento del agua son rebasados por las cantidades de
arsénico. En la imagen, una bomba de agua en Francisco I. Madero. Foto:
Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
Santos había migrado de su natal San Luis Potosí, con una hermana
suya, a esta feroz región de soles y tolvaneras, hace unos 60 años,
cuando él tenía 13.
Desde entonces, como el resto de los pobladores del 18 y de toda esta ruta, la ruta del arsénico, bebió y bebió el agua de los pozos infestados con veneno.
Cuenta Santos, 73 años, bajito, menudo, el rostro morocho y curtido por el trabajo en las pizcas de algodón.
Mientras, el parloteo de una radio hiere el silencio de la finca, con
sus cuartos de tierra y sus cercos de espinos, que es la casa de don
Santos Martínez, enclavada en los límites de la estepa, a orillas de una
angosta y larga carretera que lleva y trae a otras rancherías por cuyos
veneros corren historias con sabor a arsénico, como la de Santos.
Santos había entregado el alma en el riego y las pizcas, en las tierras de los ranchos y pequeñas propiedades de la región.
Hoy vive pobre y enfermo.
Y casi, se mantiene con la ayuda de dos mil pesos que cada dos meses le pasa el Gobierno.
En el 18 de Marzo, la gente habla del anciano que vive solo en la
última casucha que hay a unos 100 metros de la salida, en los márgenes
de la vereda, y que está “malo” de las manos.
Santos machetea con una mano, su mano buena y sana, una rama de
mezquite, y el golpeteo seco del machete que cercena, destaza, corta,
mutila, el palo, hace eco, como un grito, al otro lado de la leprosa, y a
ratos desolada, autovía: el camino del arsénico y acaso de la muerte.
“Me dicen que aquí murieron dos, de esto… Había otro señor que también estaba ansina. Tiene poquito que murió…”, dice Santos.
Aquí, en los pueblos de la Laguna, cuyos bajos fondos son la morada del demonio del arsénico, ha habido muertos.
No hay números.
Jesús Burciaga, médico general, especializado en hidroarsenicismo. Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
Nadie sabe cuántos.
Pero aquí, en los solares de estas rancherías se cuentan en voz alta
las historias de personas que han fallecido por tomar agua con arsénico;
y de otras que viven con cáncer de piel o mutilaciones de manos o piernas por haber bebido y bebido de las norias contaminadas con este metaloide.
Lo de don Santos empezó hace 10 años.
“Yo estaba sano, nomás de buenas a primeras me resultó esta enfermedad. Yo andaba bien, bien”, cuenta.
Primero fue ese extraño adormecimiento en las manos, luego las llagas
y después la infección que le carcomió, como un ácido letal, el pulgar
de la mano izquierda y de a poco la mano completa.
“El arsénico se aloja en las extremidades: en los dedos
de las manos, en los dedos de los pies, en las piernas…”, dice Jesús
Burciaga, médico general que por más de 30 años ha estudiado el impacto
del hidroarsenicismo en la salud humana.
Santos se espanta las moscas que vuelan, que se le pegan obstinadas a
la herida en carne viva, de la que mana a distancia un penetrante y
viscoso olor a cadáver.
Aquí ya huele a muerto.
“Hicimos unas entrevistas allá para Tlahualilo, Durango, a
mucha gente amputada, con pie negro… Había un señor abandonado con 100
millones de moscas a su alrededor… Son casos patéticos que se conocen y
nadie hace nada. No hay un programa de salud para atender a toda esa
gente. Hay un abandono total…”, dice Jesús Burciaga.
Sólo ver la mano de don Santos desgarrada, descarnada, por el arsénico, es inevitable el vahído, la náusea.
“Fui con el doctor y me recetó medicina, pero no me hizo”, platica Santos.
El médico le dijo que para lo de él, para su enfermedad, ya no hay tratamiento.
Matilde Suárez Rivera es la auxiliar de salud del Ejido Finisterre. Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
“Le dije ‘mire doctor, deme un medicamento que sea güeno pa la infección’, dice ‘no señor, no hay, ya no hay…’”.
El único remedio que puede salvarle la vida, le advirtió el galeno,
es que le amputen la mano izquierda, que a Santos le mochen la mano.
Pero Santos, tiene miedo y no lo disimula.
“Pos yo tengo miedo, tengo miedo, tengo miedo que me la mochen”.
Repite Santos y sus palabras, como torbellinos, se pierden en la inmensidad del páramo.
Santos camina despacio por su finca solitaria, dice que cada día que pasa le cuesta más trabajo mover sus manos, su cuerpo.
“Toy todo inválido…”, dice sin gota de resignación.
• • •
“Las personas que ustedes conocieron, que salieron en sus
portadas, en sus entrevistas, ya no están, ya fallecieron…”, dice
Matilde Suárez Rivera, la auxiliar de salud del Ejido Finisterre, en
Madero.
Ya están muertos, dice Matilde, y sus casas en ruinas.
Matilde evoca el caso de don J. Manuel Donato Mejía, un anciano con
el cuerpo lacerado por las llagas negras del cáncer de piel, el mismo
que en 2010 documentó SEMANARIO.
“Ya falleció”, dice Matilde.
Jorge
Antonio Espinosa Fematt, médico cirujano con doctorado en medicina
molecular y catedrático de la Universidad Juárez del Estado de Durango.
Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
Es la 1:00 de la tarde en el solar de la casa con portal amarillo de
Matilde poblado de tupidos árboles, pero ni eso ahuyenta los más de 40
grados de calor que a esta hora castigan a la sombra.
“Dicen que (el hidroarsenicismo)ya no es tanto, pero yo
no creo…”, suelta Matilde, se vuelve de espalda, se alza la blusa
celeste y muestra las manchas parduzcas que hace no mucho le aparecieron
a la altura de los omóplatos.
“Me dice la doctora que puede ser a raíz del agua que consumíamos”.
Y como si fuera un obituario Matilde recita uno por uno los nombres
de los lugareños de Finisterre que ya se han ido de este mundo por culpa
del hidroarsenicismo:
María Sandoval Casillas, “en paz descanse”, Julia Rodríguez Nery, Telésforo López y Manuel Donato.
Eran los tiempos en que todavía los ojos del orbe estaban puestos en Finisterre.
“El doctor Luis Maeda Villalobos, un oncólogo muy
importante en esta región, fue el que determinó, por primera vez, la
incidencia de hidroarsenicismo en problemas de deformaciones y de
cánceres, allá en el municipio de Francisco I. Madero, por la zona de
Finisterre. Él hizo los primeros estudios”, comenta Fernando Ulises
Adame de León, doctor en biología molecular.
Jesús Burciaga, médico general que por más de 30 años ha estudiado el
impacto del hidroarsenicismo en la salud humana, dice que en la Laguna
existen antecedentes, desde 1958, sobre los efectos del consumo de
metales como el arsénico, el plomo y el cadnio, en el hombre.
“Ya desde 1958 hay antecedentes de cáncer de vejiga, de
pulmón, de hígado, de colón; píe negro, de la frecuencia con la que se
presenta el cáncer. Para 1960 se dieron 260 casos clínicos de enfermos
que se quejaban del crecimiento del hígado…”.
De Japón vinieron a Finisterre médicos y periodistas para ver lo qué pasaba con el arsénico.
“Anduvieron buscando a esas personas que le acabo de
mencionar que ya fallecieron. Yo los llevé con ellas, así como a
ustedes”, dice Matilde.
Matilde llegó de Tamaulipas, a este pueblo de chozas de adobe y calles sin asfaltar, en 1982.
Eusebio
dice que desde hace algunos años viene de Madero, dos veces por la
semana, un camión que surte a la gente de garrafones con 20 litros de
agua purificada, a cambio de 15 pesos. Foto: Marco Medina y Jesús Peña,
Vanguardia
“Nomas hágale…”, suelta.
37 años ya de aplacarse la sed, bañarse, lavar la ropa, con el agua
arsenicada que rezuma bajo la piel, por las venas abiertas de la Comarca
Lagunera.
“En aquellos años hubo una persona, un vecino, joven, él
murió de 42 años, todo su problema vino por el hidroarsenicismo. Tenía
cáncer en la vejiga… Usted sabe que en estas comunidades rurales a veces
no contamos con los recursos necesarios para ir a un doctor…”, dice
Matilde.
Fernando Ulises Adame de León, doctor en biología molecular, explica
cómo es que el arsénico, una vez alojado en el cuerpo, desencadena el
cáncer y otros males:
“Los metales pesados interactúan directamente con el DNA y
el DNA es el motor que controla todos los procesos celulares. A nivel
molecular hay una interacción de los metales eh. Hay activación de
algunos mecanismos que generan enfermedades serias. El problema está en
la interacción a nivel molecular y el metal pesado llega hasta el centro
de las moléculas que controlan la vida. El cáncer es uno de los
problemas más frecuentes porque el arsénico activa y multiplica los
oncogenes”.
Jorge Antonio Espinosa Fematt, médico cirujano con doctorado en
medicina molecular y catedrático de la Universidad Juárez del Estado de
Durango, explica así el daño que el arsénico puede causar en el ADN:
“Genera radicales de oxígeno, que esas son moléculas que
oxidan otras moléculas, en este caso el DNA. Cuando se oxida el DNA
puede degenerar en muerte celular o cáncer, que ésta es una de las
principales preocupaciones…”.
Matilde cuenta que en aquella época pasó vista, notificó, de todos
esos casos a las autoridades sanitarias de Madero, pero nada ocurrió.
Ahora está preocupada porque, dice, a últimas fechas en Finisterre se
han presentado casos nuevos de lesiones causadas por el consumo
prolongado de agua con altas concentraciones de arsénico.
Itzel Tapia Pérez, es la doctora en la clínica del IMSS Salvador. Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
“Sí, puede ser, pero se tendrían que valorar las lesiones
porque no son exclusivas del arsénico. De hecho, la exposición al sol
provoca algunas de esas lesiones o muy parecidas. Se pueden asociar al
arsénico, si la persona está expuesta al arsénico o vivido en una región
con arsénico…”, dice Gonzalo García Vargas, doctor en toxicología y
maestro investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad Juárez
del Estado de Durango.
Uno de esos casos es el de don Eusebio López Bernal, oriundo de
Sombrerete, Zacatecas, 72 años, 30 de vivir en este pueblo, 30 años de
tomar agua con arsénico
Jorge Antonio Espinosa Fematt, médico cirujano con doctorado en
medicina molecular, asegura que el problema del hodroarcenismo ya se ha
incrementado por la cada vez mayor sobreexplotación de los mantos
acuíferos en la Laguna.
“Estamos haciendo pozos más profundos, situación que
provoca que ese arsénico, que siempre ha estado ahí, ahora lo estemos
consumiendo en mayores concentraciones y eso genera más problemas en la
población”.
Ya
va para cinco años que en este pueblo no tienen clínica, farmacia ni
médico de planta. Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
“En aquellos años, – dice don Eusebio-, la gente tomaba agua de esa y
de ái se nos acumuló el arsénico. Yo tengo mucha mancha. Wache bien…”,
Eusebio deja ver debajo de su camiseta unos lunares cafés que motean
sobre su espalda, cuello, pecho y el nacimiento de sus axilas.
“El arsénico es malo, el arsénico es malo y ni modo, Mire wáchele estas manchas…Eso es del arsénico”, repite Eusebio.
“Y el Gobierno dice que el agua ya está limpia…”, lo secunda Matilde.
“No, no cuál limpia. Esto viene del cabrón arsénico que trae el agua.
Esa agua del arsénico, la de las norias, es como la que nos echan de la
tubería. Trae arsénico toda esa agua. Que nos alivianen mejor con un
medicamento pa eso de las manchas”, revira don Eusebio.
Eusebio dice que desde hace algunos años viene de Madero, dos veces
por la semana, un camión que surte a la gente de garrafones con 20
litros de agua purificada, a cambio de 15 pesos.
Pero son más los años que Eusebio, Matilde y los pobladores de esta comunidad, han tomado agua mezclada con veneno.
Matilde dice que extraña aquella época en la que cada 15 días venía a Finisterre una unidad móvil de salud.
Ya va para cinco años que en este pueblo no tienen clínica, farmacia ni médico de planta.
“Los habitantes de esta comunidad que es Finisterre, con
una pastillita que a lo mejor nos calmará un poco, pero… sabiendo que
tal vez podemos tener un problema ya de años atrás, relacionado con el
hidroarsenicismo… Tenemos grande necesidad de una clínica rural”.
Paradójicamente en la mayoría de las comunidades de la región del
arsénico en Madero, Coahuila, escasea el agua de la red municipal y los
naturales tienen que ir hasta las norias contaminadas y acarrear el
líquido hasta sus casas para bañarse y realiza sus labores domésticas.
Luz
es originaria de Salvador y bebió agua de arsénico desde que estaba en
el vientre de su madre, que también nació aquí. Foto: Marco Medina y
Jesús Peña, Vanguardia
“Lo que está sucediendo es que en los poblados no hay
suficiente presión de agua. Sus norias tienen 400, 500, 600 microgramos
de arsénico por litro. El agua que les llega de la red tiene alrededor
de 50. Pero a veces tienen agua, a veces no tiene agua, cuando no tienen
agua deben que ir a las norias cercanas, que esas tienen 400
microgramos de arsénico por litro, entonces siguen exponiéndose”, dice
Gonzalo García Vargas, doctor en toxicología y maestro investigador de
la Facultad de Medicina de la Universidad Juárez del Estado de Durango
“Ahorita, – dice Matilde-, la necesidad más grande es el vital
líquido, limpio y sano, que no nos acarree enfermedades, que no nos deje
secuelas ni al final… la muerte…”.
• • •
Lo primero es el tanque elevado amarrillo chillante, con unas letras
redondas y azules que dicen “Bienvenidos al Ejido El Salvador”.
Es la noria con arsénico de la que por mucho tiempo, unos dicen que
20, otros que 30 años, se abastecieron los nativos de esta ranchería
perdida en el horizonte de Madero, justo donde acaba la ruta del
arsénico.
Mediodía bajo del cobertizo de la casa de María de la Luz Herrera Rodríguez, en el pueblo de San Salvador de Arriba, Madero.
Luz está sentada en una silla de ruedas viendo girar el mundo por las
calles del pueblo con sus casas pastel, su gritería de chiquillos y sus
perros echados al sol.
Las calles que un día Luz caminó, hasta que tuvieron que amputarle su pierna derecha, a consecuencia de la diabetes que padece.
“Pos, ¿qué quiere que le platique?, nada más que me amputaron el pie por la diabetes”, dice Luz.
Que era hereditaria, le dijo el médico a Luz, el día que le anunció que tenía diabetes.
Lo que el doctor omitió decirle es que, según las investigaciones que
durante años ha realizado la Universidad Juárez del Estado de Durango,
en coordinación con la Universidad Autónoma de Coahuila, el arsénico es
precursor de la diabetes porque bloquea la producción de insulina y con
ello aumenta el riesgo de padecer azúcar en la sangre.
A la sazón Luz era una muchacha de 20 años.
Gonzalo
García Vargas, doctor en toxicología y maestro investigador de la
Facultad de Medicina de la Universidad Juárez del Estado de Durango.
Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
Hoy tiene 46 y es paciente de hemodiálisis.
“Tengo insuficiencia renal”, dice con pesar.
Luz es originaria de Salvador y bebió agua de arsénico desde que estaba en el vientre de su madre, que también nació aquí.
Luz dice que el recuerdo más vívido que guarda de su abuelita, son
esas manchas, como lunares rojos en la piel, que se le abrían…
“Decían que era por el arsénico. Ella ya tiene 29 años que murió de eso, de cáncer en la piel”.
“El problema ya no es tanto como antes del 86, pero sigue
habiendo exposición al arsénico y entonces sigue habiendo problemas de
cáncer, problemas vasculares, pulmonares. Las lesiones cutáneas sí
aparecen en aquellos lugares, pero ya no son tan frecuentes ni tan
aparatosas como las que había antes que sí, algunas eran monstruosas”,
dice Gonzalo García Vargas, doctor en toxicología y maestro investigador
de la Facultad de Medicina de la Universidad Juárez del Estado de
Durango.
Fernando Ulises Adame de León, doctor en biología molecular, dice que
la Laguna es un referente mundial de la presencia de cáncer y otras
enfermedades, asociadas con el consumo de metales pesados.
“No solamente es el arsénico, son otros metales: cadmio,
flúor, boro; y no solamente es cáncer, es otro tipo de enfermedades:
problemas de deformaciones óseas, que son muy frecuentes en esas
regiones, problemas de dientes…”.
Hace ya siete meses que a don Samuel Maciel le cortaron uno de los dedos de su pie izquierdo y la herida no cierra.
Fernando Ulises Adame de León, doctor en biología molecular. Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
Samuel, 58 años, originario del Ejido El Venado, municipio de Madero,
en la región del arsénico, vive con diabetes y una malformación
congénita en su pierna derecha, que lo mantienen atado a una silla de
ruedas en el portal de su casa de Salvador.
“Yo le voy a hablar la verdad: donde quiera tomé agua.
Ayudaba a los vaqueros que ‘cuídame las vacas’, me daba sed por allá en
el monte y allá tomaba agua, donde fuera”.
-¿De las norias?
-Sí, de las norias, del tajo y de donde fuera. Ái donde estaban las vacas miándose, donde tomaban los burros y las chivas…
La
bomba del ejido Cantabro, una noria contaminada en el ejido Salvador y
el cerrado Centro de Salud de La Pinta, tienen un mismo denominador: el
abandono y la indiferencia ante pueblos pequeños donde la gente muere
por la contaminación. Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
Desde nene Samuel escuchaba a los viejos del pueblo averiguar de una cosa que tenía el agua.
Cuando se hizo mayor y supo de lo que hablaban sintió miedo.
Sí, se oía del arsénico, que por eso estábamos todos… y teníamos esto
y lo otro. Antes donde más se oía era en Finisterre, que estaban todos
cancerosos porque había mucho arsénico y que sabe qué”.
-¿Y qué piensa?
-Que antes, Dios lo ayudó a uno. Tanto mugrero que uno toma…
Durante los 20 años que lleva de enfermera en Salvador, Santa Rocha
ha visto desfilar rumbo a la muerte a muchos pacientes con manchas en la
piel y otros tipos de cáncer, como el pulmonar.
“Ellos ya fallecieron”, dice Santa.
Nunca se supo con certeza si esos males habían tenido que ver con la ingesta de agua envenenada de los pozos.
“Puede ser que sí, pero no se hizo un estudio muy claro que dijéramos, ‘sí, es por el arsénico…’, que se fueran más a fondo”.
Santa dice que en los últimos años los casos de hidroarsenicismo han
bajado debido a que la gente dejó de beber el líquido de la noria y
ahora compra botellones de agua purificada.
“¿Ahorita?, ¿gente machada?, no. Aquí ahorita… la diabetes, la hipertensión…”, dice Santa.
Don
Felipe Cárdenas Aguilar, es uno de los vecinos más antiguos de Salvador
y ha presenciado la muerte y el dolor de familiares y seres queridos.
Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
“Yo tengo manchas, sí. Ái me empezaron a salir, sabe de qué serán”,
dice María del Carmen Morales. Y, se remanga la sudadera hasta los codos
para descubrir sus brazos salpicados de lunares cafés.
-¿Ya le dieron medicamento?
-Pos no me dan nada, sí les he dicho, pero no me dan nada.
Habla Gonzalo García Vargas, doctor en toxicología y maestro
investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad Juárez del
Estado de Durango:
“No hay guías clínicas ni protocolos clínicos para
atender a la gente que tiene problemas por arsénico. Hay guías para
manejar la diabetes, para manejar la obesidad, el HIV. Hay guías para
eso, pero en lo del arsénico no ¿Qué se tiene que hacer? La prevención
primaria es disminuir el arsénico en el agua, pero hay gente que ya se
expuso por muchos años. Hay que detectar a la gente que tiene lesiones
tempranas por arsénico, tanto en pie, como en pulmón, como a nivel de
sus vasos; y una detección temprana de condiciones que pueden generar
cáncer. Ya tuvieron las lesiones, ya están avanzando… Hay que hacer una
prevención. Se hace la prevención secundaria. La prevención terciaria es
evitar las complicaciones, trabajar para que a la gente no le vayan a
amputar una pierna, no vaya a llegar a un cáncer que sea incurable, que
llegué a tener una mayor complicación por diabetes…”.
A lo largo de sus 64 años Carmen, natural de Salvador, ha vivido ya un rosario de enfermedades.
Es diabética, tuvo cáncer de mama, herpes, recién fue diagnosticada con presión alta y ahora… esto de las manchas…
“Tengo como un año que me empezaron a salir”, dice.
-¿Que oía decir de niña en Salvador sobre el arsénico?
-Nada más decían que el agua tenía algo, pero no sabían qué. Hasta que ya investigaron y todo.
Itzel Tapia Pérez, es la pasante de medicina asignada a la clínica del IMSS en Salvador, desde hace cuatro meses.
“Tengo pacientes de control, adultos de más de 40, 50
años, que padecen de manchas en los dientes y manchas en la piel…
Obviamente es el arsénico, más el trabajo que… ”.
Se
ha visto que los niños expuestos al arsénico, durante el periodo
intrauterino o en la infancia, en la edad adulta son más propensos a
desarrollar cáncer. Foto: Marco Medina y Jesús Peña, Vanguardia
Itzel dice que la mayoría de los hombres de esta ranchería labora en
la pizca de algodón, de sorgo, de pepino, de cebolla, de melón, bajo el
sol quemador de la Laguna.
“Presentan heridas en la piel, pero es complicado poder
hablar… Hacer bien el diagnóstico… Falta… para saber bien cómo
diferenciarlo… Pero que yo tenga una estadística de alguna enfermedad
por metal pesado; arsénico, plomo y esas cosas, no”.
“Hay muchas muertes, – advierte Fernando Ulises Adame de León, doctor
en biología molecular, – que se dan en las comunidades, en los ejidos
donde solamente se murió y lo enterraron. Hay poca, muy poca información
al respecto”.
“Las instituciones de salud, – afirme el médico Jesús
Burciaga -, no te dicen, ‘este cáncer es por arsénico’, están fallando y
los médicos contaminan el diagnóstico. En los setentas, ochentas, se
dio la incidencia de cáncer de piel y de pie negro, amputaciones, y se
concluyó que era el arsénico”.
Además, dice Itzel, el IMSS no cuenta con los reactivos, la prueba, para medir el arsénico en sangre.
Y mandar la muestra a un laboratorio particular sería costoso, platica Itzel en su consultorio – farmacia de Salvador.
Las dos pacientes que esperan turno detrás de la puerta, auguran una tarde tranquila.
Itzel dice que en Salvador hay gente de la tercera edad que todavía,
por razones de economía o de cultura, consume agua de la llave, el agua
de la red que manda el ayuntamiento de Madero y que, se sabe, contiene
arsénico.
“El del agua nada más viene una vez a la semana. Si
tienen para comprarla se compra, si no, así, de la llave. Yo tengo una
cisterna, con esa agua me baño y me traigo mi bote de agua purificada de
mi casa para los días que aquí me quedo…”.
Fernando Ulises Adame de León, doctor en biología molecular, sostiene
que casi todos los pozos de la Laguna, casi todos, están en problemas.
“El nivel de toxicidad permitido, el nivel de concentración permitida por la Norma Mexicana es de .025 partes por millón.
Los expertos en la salud señalan que arriba de .017 hay problemas en la salud y nosotros tenemos arriba de .025”.
“Hay pozos, – dice Jorge Antonio Espinosa Fematt, médico
cirujano con doctorado en medicina molecular -, que rebasan la norma
como al triple, al cuádruple del nivel aceptado”.
“Lo que estamos demostrando, – dice Gonzalo García Vargas, doctor en
toxicología y maestro investigador de la Facultad de Medicina de la
Universidad Juárez del Estado de Durango -, es que aun en
concentraciones bajas, como las que hay en la ciudad, el arsénico está
provocando alteraciones que pueden desencadenar, aumentar el riesgo de
cáncer”.
Itzel comenta que la mayoría de sus pacientes, arriba de los 40 años,
en Salvador, son diabéticos o hipertensos, sufren dislipidemias,
colesterol, triglicéridos altos… y lógicamente sus consecuencias.
“Hay personas que ya han tenido infartos recurrentes…”.
Los estudios más recientes realizados por la la Universidad Juárez
del Estado de Durango, en coordinación con la Universidad Autónoma de
Coahuila, revelan que la ingesta de agua con elevadas concentraciones de
arsénico, puede ocasionar infertilidad e incluso trastornos como la
obesidad.
“Altera, aparentemente, el metabolismo de los lípidos y
favorece la aparición de obesidad o aumenta el riesgo de ser obeso y de
ser diabético porque se modifica el metabolismo de los lípidos y los
carbohidratos”, expone Jorge Antonio Espinosa Fematt, médico cirujano
con doctorado en medicina molecular y catedrático de la Universidad
Juárez del Estado de Durango.
Así mismo, las últimas investigaciones han arrojado que el consumo de
agua con arsénico en mujeres embarazadas puede derivar en deficiencias
del desarrollo o afecciones neurológicas en el bebé.
Se ha visto que los niños expuestos al arsénico, durante el periodo
intrauterino o en la infancia, en la edad adulta son más propensos a
desarrollar cáncer.
“Es un efecto que puede ser a largo plazo. El niño puede
nacer completamente bien, pero a la larga aumenta el riesgo de padecer
ciertas enfermedades”, dice Espinosa Fematt.
Los trabajos han mostrado también que la presencia de arsénico en el
organismo incrementa el riesgo de asma y de padecer problemas crónicos
en pulmón.
Don Felipe Cárdenas Aguilar, es uno de los vecinos más antiguos de Salvador.
Ha visto pasar por aquí a cantidad de médicos de todas partes que
vinieron para tomar muestras pelo y de sangre, pero que jamás volvieron
con los resultados.
“Se llevaron todos esos datos, se fueron y ya no supimos”, cuenta Felipe.
-¿Usted tiene manchas?
-Sí, sí tengo una, en la espalda. Se me cae, pero no me supura…
Dice Felipe, se para de la mecedora donde suele contemplar los
atardeceres en Salvador y se levanta el suéter para develar una úlcera
parduzca como cráter de volcán en el espinazo que parece a punto de
hacer erupción.
“¿Se fija?, es ésta. Se me cae y me vuelve a salir…”
A Felipe le tocó sufrir los peores años de pobreza en Salvador, los
años en que los algunos críos todavía andaban con huaraches y los más
descalzos.
Entonces en Salvador no había luz eléctrica, no había carretera, no había plaza, no había nada.
“Ora se las están comiendo todas maduras”, dice Felipe.
-¿Usted es de aquí?
-Soy nacido aquí, criado aquí y aquí me voy a quedar.
• • •
Amanece en el Ejido Covadonga, municipio de Madero.
Elvira Gallegos Hernández, la asistente de salud, recorre los senderos polvorientos por donde pasaron sus ancestros.
“Poco a poco se nos van acabando”, dice.
-¿Por qué?
-Pos yo digo que más que nada es por… el arsénico.
Elvira, 59 años, platica que uno de los lastres que en el presente
fustiga a los pobladores de esta aldea lagunera, es el llamado pie
negro, causado por la mala circulación, causada por la diabetes, causada
por el consumo prolongado de agua con altas concentraciones de
arsénico.
“Yo también tengo esa mala circulación, mire…”, dice
Ramona Chavarría López. 88 años, y se baja la calceta de un tirón para
mostrar su tobillo izquierdo roído por el arsénico.
“Dicen que el arsénico y que el arsénico, pero pos no, solamente Dios uno no sabe esas cosas”, dice Ramona.
Y dice que en Covadonga conoció a personas que tenían manchas en la piel o el pie negro, pero ya murieron…
El arsénico se las llevó…
¿QUÉ RELACIÓN HAY ENTRE EL CÁNCER Y EL ARSÉNICO?
A nivel molecular hay una interacción de los metales. Hay activación
de algunos mecanismos que generan enfermedades serias. El problema está
en la interacción a nivel molecular y el metal pesado llega hasta el
centro de las moléculas que controlan la vida. El cáncer es uno de los
problemas más frecuentes. porque el arsénico activa y multiplica los
oncogenes.
Depredación del Parque Nacional del Cañón Del Sumidero
Luego de más de 50 años de operación, de contaminar el aire de
cientos de familias a su alrededor y de socavar y deforestar el Parque
Nacional del Cañón del Sumidero, este lunes fue clausurado de forma
definitiva la empresa Cales y Morteros del Grijalva, SA de CV.
Funcionarios de la Dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios
de la Secretaría , encabezados por su titular Margarita Aguilar Ruiz,
acataron una Recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos
(CNDH), emitida ante el incumplimiento de una conciliación por la
violación al derecho humano a un medio ambiente sano, y la falta de
acciones para garantizar la protección y preservación del Parque
Nacional “Cañón del Sumidero” y sus alrededores, en agravio de
habitantes del municipio de Chiapa de Corzo
El 28 de abril pasado, la CNDH emitió la Recomendación Número
12/2019, dirigida al gobernador Rutilio Escandón Cadenas y a la
Secretaría de Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales
(Semarnat), luego de detectar que ambas autoridades involucradas no
habían desarrollado las acciones necesarias para la efectiva protección
del patrimonio cultural y natural que conforma el Parque Nacional “Cañón
del Sumidero”, por los impactos ambientales negativos ocasionados sobre
los ecosistemas terrestres y la atmósfera, por la actividad de una
empresa dedicada a la extracción y procesamiento de cal, además de que
se pone en riesgo la salud de quienes habitan en las inmediaciones.
Por muchos años, pobladores de los alrededores de la empresa exigieron la clausura de la calera
Tras varios meses de elegatos por parte de la empresa, primero se le
impuso en agosto pasado la Suspensión Total Temporal de Trabajos y
Servicios del establecimiento, para efectos de reubicación de la empresa
a otro lugar. En esa ocasión se le dejó libre acceso en el portón
principal de la entrada a la planta para facilitar los trabajos de
reubicación.
Al no cumplir con el plazo otorgado para efectos de la reubicación de
90 días naturales, cumplidos el 31 de octubre de 2019, el caso fue
turnado al Departamento de Resoluciones y Sanciones por lo que se
resolvió la clausura definitiva total del establecimiento. Notificación
que se le hizo el pasado 17 de diciembre de 2019.
Pero fue hasta hoy que se ejecutó la sanción administrativa
consistente en la “clausura definitiva total del establecimiento”, por
lo que se colocaron las fajillas oficiales de “clausura” en el portón
principal de acceso y en el área de la Gerencia; “dejando únicamente el
acceso de la puerta del área de recepción para el personal de seguridad,
a petición de la parte interesada, para la guarda y custodia de los
bienes materiales de la empresa”.
Esta empresa fundada en 1965, y fue motivo de diversas denuncias
interpuestas por la población aledaña ante las autoridades municipales,
estatales y federales desde el año 2002, motivadas por los daños
causados a su salud y al medio ambiente, además de afectaciones a las
áreas naturales protegidas y patrimonio de la Nación, sin que hasta la
fecha se hubiera obtenido resultados favorables a sus demandas.
Por fin fue clausurada…
“Afortunadamente, en la presente administración del Instituto de
Salud se ha logrado integrar un expediente administrativo eficaz y
eficiente del caso, que a pesar de diversos recursos de amparo por parte
de la empresa, se ha logrado ejecutar las medidas de seguridad para la
protección de la población e imponer las sanciones administrativas
correspondientes”, dijo Margarita Aguilar Ruiz, titular de la Dirección
de Protección Contra Riesgos Sanitarios.
Esta empresa fue fundada por el empresario de Córdoba, Veracruz, Domingo Muguira, del Grupo San Roke, quien despues de varias décadas de extraer el material pétreo del Parque Nacional del Cañón del Sumidero, vendió esta empresa hace algunos años a otra empresa privada.
Compartimos la siguiente nota publicada en La Jornada sobre las luchas anti mineras y resistencias en Wirikuta – A 6 de enero de 2020
Juan Carlos García Partida Corresponsal Periódico La Jornada Lunes 6 de enero de 2020, p. 22
Guadalajara, Jal., Enfrascados desde 2010 en una disputa
legal para impedir actividades mineras en el territorio sagrado de
Wirikuta, los wixaritari (huicholes) exigieron audiencia con el
presidente Andrés Manuel López Obrador para que sean canceladas todas
las concesiones mineras, que abarcan 70 por ciento del área natural
protegida donde la cosmogonía wixárika dice que se origina la vida y
nace el Sol.
Exigimos la protección y el reconocimiento efectivo de Wirikuta
como patrimonio cultural y natural de la humanidad ante la Unesco
(Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la
Cultura); además, que se implementen de manera urgente programas y
proyectos armónicos con el medio ambiente y no destructivos para los
habitantes (ejidatarios mestizos) que son los guardianes de Wirikuta, pidió el Consejo Regional Wixárika.
Wirikuta abarca 140 mil hectáreas de los municipios de Catorce,
Charcas, Matehuala, Villa de Ramos, Villa de Guadalupe y Villa de la
Paz, en San Luis Potosí, donde luego de la defensa en tribunales
realizada por el consejo que integran autoridades tradicionales de las
diversas comunidades wixaritari se logró la suspensión temporal de al
menos 78 concesiones mineras a grupos canadienses como First Majestic y
Revolution Resources, así como a la minera Frisco del empresario Carlos
Slim, aunque todavía faltan las sentencias de fondo.
Exigimos una audiencia o una reunión de trabajo de alto nivel con el presidente Andrés Manuel López Obrador, con la finalidad de desahogar los puntos anteriores y buscar alternativa de solución, principalmente en lo relativo a las concesiones mineras otorgadas en el lugar sagrado de Wirikuta, expusieron los wixaritari en un comunicado.
En semanas recientes la disputa legal se recrudeció luego de que
ejidatarios de la región de Wirikuta acusaron a Santos de la Cruz
Carrillo, coordinador jurídico del Consejo Regional Wixárika y uno de
los principales activistas y opositores a la minería en el territorio
sagrado, de comercializar peyote hacia Europa, lo que motivó a las
autoridades tradicionales del pueblo wixárika a emitir un desmentido.
El 23 de diciembre el diario Pulso, de San Luis Potosí, publicó una
entrevista con quien identificó como asesor de la Unión de Ejidos de la
Región Chichimeca, Juan Reyes Hernández, quien declaró que un grupo de huicholes provenientes de Jalisco está comercializando el peyote y lo exportan a Europa.
Santos de la Cruz declaró a La Jornada: La difamación sigue en
contra de los que luchamos en favor de nuestro lugar sagrado de
Wirikuta. Detrás de todo esto están las empresas mineras.
El líder wixárika recordó que en el territorio de Wirikuta se encuentran las esencias de la vida;
es un sitio indispensable y trascendente en su cosmogonía e identidad
cultural para dar subsistencia y continuidad a los wixaritari como
pueblo originario.
El Consejo Regional Wixárika por la Defensa de Wirikuta, conformado por las autoridades tradicionales, civiles y agrarias de las comunidades de Bancos de San Hipólito, municipio de Mezquital, Durango; Santa Catarina Cuexcomatitlán, municipio de Mezquitic, Jalisco y San Sebastián Teponahuaxtlán y Tuxpan, de los municipios de Mezquitic y Bolaños, Jalisco, rechazamos esa difamación contra nuestro compañero Santos de la Cruz, coordinador de la mesa jurídica y defensor de nuestra madre tierra, puntualizaron.
Compartimos audios realizados especialmente para las luchas antimineras. Son 30 cuñas con datos e informaciones sobre esta devastadora actividad y 10 más que refieren a las acciones de la trasnacional minera canadiense GoldCorp.
¡Para que el mundo sepa, los radialistas tiene que saber! Este manual del Movimiento Mesoamericano contra el Modelo extractivo Minero -M4- está dedicado a todas y todos los programadores de radios comunitarias conscientes de la importancia de informar al pueblo sobre los impactos de una de las industrias más nefastas del mundo: la minería.
Usa millones de litros de agua, privando a a las poblaciones de sus reservas hídricas naturales, libera productos químicos y metales pesados en el suelo, aire y agua contaminando el medio ambiente y dañando la salud de las comunidades aledañas a las minas.
Les invitamos a compartir estos audios, indispensables para conocer el peligro que representa el modelo extractivista, hoy más activo en nunca.