Los biocombustibles en cuestión

Los biocombustibles en cuestión

Claudia Brunel. Mirada Sur
castriesmcb@gmail.com

La sociedad cristobalense ha tenido algunas oportunidades para reflexionar sobre el tema de los biocombustibles. En este mismo medio, se ha comentado en algunas ocasiones sobre las consecuencias nefastas de este programa considerado “modelo” por  el Gobernador actual y otros anteriores ya que, según ellos, resuelve parte de la problemática productiva y ambiental que sufre nuestra entidad, además de ubicar a Chiapas como líder en el cumplimiento de los objetivos del Milenio.
Quisiera insistir sobre este debate. En primero porque me parece ser una problemática representativa y explicativa de los problemas socioambientales de los países “mal desarrollados” (en el caso que se pudiera considerar que algún país ha logrado un “buen” desarrollo). En segundo, y como consecuencia directa del primer punto, porque nos lleva directamente a una reflexión más profunda acerca del tipo de sociedad en la cual queremos vivir, como chiapanecos, como mexicanos y/o como ciudadanos del mundo.
La producción de biocombustibles para mejorar la vida de los campesinos y disminuir la contaminación provocada por el uso de petróleo es una fantasía más del sistema neoliberal. Inclusive me entra curiosidad por entender si sus promotores actúan de buena fe;  si se hacen de la vista gorda para no perder la posibilidad de seguir viviendo con todos los lujos dignos de su condición; o si la atracción por ganancias millonarias borra cualquier pensamiento sobre el devenir de nuestro planeta.
El video “Desiertos de aceite. La palma africana en Chiapas”*, proyectado hace unas semanas en un conocido café del centro de San Cristóbal, relata las desgracias que acarreó la siembra de palma africana para los productores. El cultivo, iniciado en los años ochenta, tuvo un gran impulso en 1997, particularmente en la región del Soconusco. El Gobierno estatal invirtió más de 30 millones de pesos para su siembra, por lo que la producción de palma se extendió a casi 6,000 hectáreas. Creó también la infraestructura para su exportación (véase www.ecoportal.net). Sus promotores argumentaron la baja de precios de los cultivos básicos para convencer a los productores de la necesidad de una substitución productiva, así como la posibilidad de salir de la pobreza.
Resulta evidente que la palma aceitera constituye un negocio redondo para las empresas trasnacionales que compran el aceite y lo exportan. Mas no para los campesinos que aceptaron el reto. Según los testimonios, estos últimos se transformaron en peones de sus propias tierras ya que extraen el fruto pero no son dueños del proceso de producción. Las condiciones de trabajo son difíciles y los ingresos magros. “Si pudiera volver a decidir, ya no aceptaría sembrar palma” resume un campesino involucrado en el proceso.
Además de no haber combatido la pobreza, el cultivo de palma africana no resuelve la problemática ambiental. Lo subraya el documental citado: “La palma no se puede comparar con un bosque”. En los bosques, hay una gran diversidad de especies vegetales y animales; en los bosques se oyen los pájaros que cantan; en los bosques hay comida; en los bosques hay vida. “Las plantaciones no son bosque. Las plantaciones eliminan la vida”. Es también conocido que los monocultivos atraen las plagas y dependen de agroquímicos para crecer.
Los promotores de la palma argumentan también que, por componerse de árboles, las plantaciones capturan el carbono. El único problema es que una plantación de palma vive 30 años. Luego se cortan los árboles, lo que libera el carbono. O sea que el carbono vuelve a dispersarse en la atmósfera. ¡Vaya esfuerzos poco eficientes!
En estos últimos años el gobierno estatal ha diversificado la producción de biocombustibles. El Gobierno actual innovó en la materia con la introducción del cultivo de Jatropha curcas o piñón. Con el sueño de alzar a Chiapas en la vanguardia mundial ambiental, se distribuyeron semillas importadas de India, se establecieron plantas procesadoras y se fomentó la producción en varias partes del estado.
Al parecer los resultados no son los esperados. Las semillas venían secas, las tierras no fueron siempre las adecuadas, los apoyos tardan en hacerse realidad y dependen de los resultados obtenidos. Una vez más, los productores se arriesgaron sin recibir el beneficio prometido.
Ojalá se escuchen más a los campesinos que prestan sus tierras para experimentos de este tipo. Ojalá nos percatemos que el mantenimiento del nivel de vida de las clases medias y altas del planeta se realiza a expensas de la población menos favorecida materialmente. Que nuestras promesas de permitirles una mejor vida faltan de fundamento en la mayoría de los casos, porque son solamente promesas no prioritarias en los proyectos implementados.
Los biocombustibles son parte de una lógica que no duda en favorecer las ganancias y las necesidades de una minoría, obviando que el hambre está ganando terreno. Los cultivos destinados a producir biocombustibles invaden suelos necesarios para la alimentación humana; eliminan la diversidad cultural y ambiental; ignoran el papel fundamental de la milpa y de los saberes tradicionales para recuperar la soberanía alimentaria. Representan la falsedad de un sistema que retira a sus campesinos el derecho a alimentar a sus pares y cuidar nuestra madre tierra.
Es necesaria una reflexión real, como sociedad, sobre una mejor distribución de las riquezas creadas. Es imprescindible que cada uno de nosotros inicie la reflexión desde su oikos –su casa- y su persona.

*Video “Desiertos de aceite. La palma africana en Chiapas”, realizado por Eco-estrategias en comunicación y producido por Otros Mundos A.C., Amigos de la Tierra México y la RECOMA. Presentado al público el 21 de septiembre pasado, día mundial contra las plantaciones y monocultivos.

Otros Mundos Chiapas presenta el Documental “Voces Calladas”

Otros Mundos Chiapas, presenta el Documental “Voces Calladas”

Este Sábado 6nov a las 6:30pm en el espacio cultural El Paliacate
Avenida 5 de Mayo #20 Colonia Centro (Sala Bety Cariño). San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.

Film dirigido y producido por Gustavo Terán, Brendan O’Neill y Sam Mayfield
…El 22 de diciembre 2009, mientras trabajaba en un rancho lechero de Vermont, José Obeth Santiz Cruz se enredó en una maquina agrícola. Esta lo jaló, estrangulado hasta la muerte con su propia ropa. José Obeth era un Maya Tojolabal de 20 años de un pueblo agrícola lejano ubicado en la orilla de la selva lluviosa de Lacandona en el sureste de Chiapas.
Hay aproximadamente 80 residentes de su pequeña comunidad trabajando en las granjas de Vermont. Hay alrededor de 2,000 trabajadores agrícolas migrantes, muchos de Chiapas, cuyo trabajo sostiene las frágiles lecherías de Vermont.
El 9 de enero de 2010, El Proyecto de Solidaridad con Trabajadores Agrícolas Migrantes de Vermont patrocino el viaje de una delegación de 3 personas para devolver el difunto José Obeth a su pueblo de San Isidro, Chiapas. Esta película documenta como su familia Maya y comunidad llega a aceptar la muerte de un ser querido y comparte historias sobre las causas, impactos y experiencias de la migración.
El Proyecto en Solidaridad con los Trabajadores Agrícolas Migrantes de Vermont promueve la dignidad, la justicia, y los derechos humanos para los trabajadores migrantes agrícolas de Vermont, y construye puentes de solidaridad entre las comunidades en Vermont y México. El propósito es el de fomentar, en los dos lados de la frontera, comunidades agrícolas y sistemas de alimentación en pequeña escala que sean justas, saludables, sostenibles y habitables.
Gustavo Terán es investigador independiente y fundador, con Brendan O’Neill, del El Proyecto de Solidaridad con Trabajadores Agrícolas Migrantes de Vermont. Desde joven Terán laboro como trabajador agrícola migrante y fue activista en el Movimiento Chicano y el partido político, Raza Unida, de Texas en los años 70.

La cita es en el Paliacate, avenida 5 de Mayo numero 20 colonia centro a las 6.30 de la tarde, pasen la voz…
Recuerden Sábado 6 de Noviembre.

TRAILER:

 

Declaración de preocupación de la Sociedad Civil hacia la Conferencia de La Haya sobre la Agricultura, Seguridad Alimentaria y Cambio Climático

Declaración de preocupación de la Sociedad Civil hacia la Conferencia de La Haya sobre la Agricultura, Seguridad Alimentaria y Cambio Climático

(31 octubre—5 noviembre):
agricultura
Nosotros, las organizaciones abajo firmantes de la sociedad civil de todo el mundo, miramos con preocupación la próxima Conferencia de La Haya. Organizada por el Gobierno  de los Países Bajos en cooperación con los Gobiernos de Etiopía, México, Nueva Zelanda, Noruega, Vietnam, el Banco Mundial y la FAO, la conferencia tiene como objetivo producir una hoja de ruta con «acciones concretas que unen las inversiones políticas y medidas relacionadas con la agricultura a la transición para reducir emisiones de carbono para un crecimiento resiliente al clima. «

El cambio climático amenaza los medios de subsistencia y la seguridad alimentaria de miles de millones de personas pobres y vulnerables en el planeta, y es urgente que tanto el análisis como las soluciones sean adecuadas. Hacer las cosas bien significa también seguir un proceso correcto, incluyendo la participación de aquellos cuyos medios de vida estén en mayor riesgo. Las soluciones impulsadas de arriba hacia abajo no son soluciones legítimas.

Participación y transparencia
Estamos preocupados por la falta de transparencia, participación y consulta con los gobiernos, agricultores y otras personas de la sociedad civil para la preparación de la conferencia y su «hoja de ruta». El proceso se enfoca en los vínculos de la agricultura y el clima, sin embargo, no es evidente que se hayan incluido a los representantes de los países en desarrollo quienes están negociando con la ONU temas relacionados con estos vínculos y en general, con el cambio climático. Una pre-conferencia regional se organizó en África, pero no en otras regiones, aumentando las preocupaciones sobre participación desigual.

Agricultura ecológica en comparación con industrial
El modelo industrial de producción agrícola amenaza la viabilidad de los ecosistemas y contribuye enormemente al cambio climático. Lo que se necesita ante la amenaza del cambio climático no es nada menos que un cambio de sistema. El modelo de producción agrícola ecológica, basado en principios para crear suelos saludables y cultivar la diversidad biológica y que da prioridad a los agricultores y los conocimientos tradicionales, es resistente al clima. Eso es agricultura respetuosa con el clima.

También existe la necesidad crítica de revertir la concentración económica de los mercados mundiales – en particular para los granos, el ganado y procesamiento de alimentos – que ha dado lugar a formas insostenibles de agricultura industrial en todo el mundo y que son fuente de la mayor parte de las emisiones del sector agrícola. Desafortunadamente, la agenda de la conferencia no parece para hacer frente, de manera significativa, a estos necesarios cambios del sistema.

Evitar soluciones tecnológicas cuestionables
La conferencia debe evitar hablar sobre soluciones tecnológicas costosas y no probadas, como los organismos genéticamente modificados y otras tecnologías y practicas patentadas. Estas tecnologías no sólo son prohibitivamente costosas para los países en desarrollo, sino también crean nuevas formas de control corporativo sobre recursos genético en plantas agrícolas y animales. La seguridad de estas tecnologías está en duda, y ya se han producido daños ambientales, sociales y económicos  a partir de su uso. Estas tecnologías amenazan con entorpecer, en vez de mejorar, la adaptación agrícola al cambio climático.

Un enfoque sobre la adaptación
La adaptación al cambio climático en el sector de la agricultura debe ser la prioridad principal de esta conferencia. Se debe hacer hincapié en identificar las prioridades de adaptación de los países en desarrollo, así como la provisión de finanzas públicas constantes y confiables para los países en desarrollo que tendrán que hacer frente a las peores consecuencias del cambio climático. Además, el financiamiento de la adaptación debe ser en forma de subvenciones, no préstamos. Las prioridades de mitigación por parte de los países desarrollados y los mercados de certificados de reducción de carbono no deben ni pueden manipular el diseño de estrategias de adaptación al cambio climático.

Finanzas públicas, no mercados de carbono
Si bien se habla mucho de las posibilidades de uso de mercados, debemos declarar enfáticamente que la vinculación de los mercados de carbono con el carbono en los suelos no son la solución para la mitigación o adaptación en el sector agrícola. Dinero de mercado especulativos, inestables y no confiables podrían significar un desastre para la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia en los países en desarrollo. Por otra parte, enfoques «innovadores»  basados en mercados distraen la atención de la responsabilidad de los países desarrollados en base a sus emisiones históricas y sus obligaciones de financiamiento para la adaptación y mitigación por parte de los países en desarrollo. En realidad, los mecanismos de mercado de carbono financian los compromisos de mitigación de los países desarrollados a través de la «compensación» con los proyectos completados en países en desarrollo, lo que les permite a los países desarrollados seguir sus formas de producción y consumo no sostenibles sin ningún cambio— pasándole la carga de la mitigación, e incrementando la carga de la adaptación, a los países en desarrollo.

Implementar en lugar de ignorar  los  hallazgos del IAASTD
Los temas críticos de la agricultura, la seguridad alimentaria y el cambio climático, ya han sido abordados a profundidad en la Evaluación Internacional del Papel del Conocimiento, la Ciencia y la Tecnología en el Desarrollo Agrícola (IAASTD, por sus siglas en inglés). Iniciado por el Banco Mundial y la FAO, patrocinado por otros organismos de las Naciones Unidas y aprobada por 58 gobiernos, la IAASTD es considerada como el «Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la agricultura,» gracias al trabajo de más de 400 expertos en un proceso de seis años.

Como resultado de este proceso, la IAASTD contiene algunas de las opciones de política e inversión para fortalecer la productividad y la resistencia de los alimentos del mundo y los sistemas agrícolas más completos, y validos, mientras que al mismo tiempo dan prioridad a la equidad social y sostenibilidad. El proceso de consulta y participacion de las múltiples partes interesadas crearon una evaluación legítima e impregnada de conclusiones y opciones de política. Dichas conclusiones fueron recibidas por muchos países en desarrollo que sufren los efectos más graves del hambre y la inseguridad alimentaria .

La Conferencia hace caso omiso de la IAASTD, bajo su propio riesgo. El Banco Mundial y la FAO deberían defender a  la IAASTD, en lugar de tratar de ignorarla o subvertirla. Teniendo en cuenta la altamente criticada trayectoria del Banco Mundial en la agricultura,  el liderazgo del Banco en esta conferencia amerita un análisis exhaustivo.

Conclusión
Exigimos que la Conferencia de La Haya apoye soluciones justas y eficaces a la crisis de la agricultura y el clima. Hacemos un llamado a un liderazgo mundial para la transición a la agricultura ecológica, evitando soluciones tecnológicas cuestionables, que se centre en permitir a los agricultores adaptarse al cambio climático, y garantizar un financiamiento público y adecuado para la agricultura. Muchas de estas recomendaciones se recogen en la IAASTD, lo que refleja una amplia consulta pública, y debe ser endosadas por este proceso, e implementadas por los gobiernos y las organizaciones internacionales, entre ellos el Banco Mundial y la FAO.

Creemos que la comunidad internacional de alimentación y  agricultura, en particular los pequeños agricultores, trabajadores, pueblos indígenas, las mujeres y las organizaciones de la sociedad civil dedicados a cuestiones de seguridad alimentaria, soberanía alimentaria, derecho a la alimentación y la conservación, y el uso de los conocimientos tradicionales, son  elementos esenciales para este debate ya que proporcionan soluciones prácticas, justas y asequibles a los problemas de seguridad alimentaria y cambio climático. Ellos necesitan ser escuchados. La “hoja de ruta” internacional de «acciones concretas» ante todo impactará a los pequeños agricultores del todo el mundo y cualquier proceso que hace caso omiso de sus voces debe ser cuestionado por su falta de legitimidad.

31 de octubre 2010

Jornada Nacional e Internacional por la CANCELACION de la Presa el Zapotillo

C O N V O C A T O R I A

Jornada Nacional e Internacional por la CANCELACIÓN de la Presa el Zapotillo

ojos temacaEL PRÓXIMO MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010

·El gobierno mexicano ha comenzado a construir de manera ilegal, una cortina de 105 metros de altura de la Represa El Zapotillo, en Los Altos de Jalisco, México. La presa de  almacenamiento de agua y trasvase del Río Verde, es impulsada por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), para favorecer los intereses particulares de empresas en las Ciudades de León y Guadalajara, sin contar con los permisos de impacto ambiental, patrimonio cultural y uso de suelo correspondientes y sin haber obtenido el consentimiento libre e informado de los afectados.

·Esta infraestructura hidráulica traerá como consecuencia la inundación desaparición de 3 comunidades: Temacapulín, Acasico y Palmarejo, afectando de manera directa 1,000 habitantes y de manera indirecta 15,000, inundando más de 4,816 hectáreas de tierra fértil de las que dependen la vida y cultura de los pueblos de la región, así como el patrimonio cultural y natural de toda la humanidad, siendo un pueblos históricos que habitan desde el siglo VI.

·La respuesta del Estado Mexicano a las acciones legales, políticas y de movilización de las comunidades opositoras a la Presa El Zapotillo, ha sido el desprecio y la imposición, burlándose de sus derechos y de los argumentos técnicos, científicos, legales, sociales, psicosociales, ambientales e históricos que el movimiento ha expresado en distintos foros e instancias y que deberían traer como consecuencia la cancelación definitiva del proyecto por su inviabilidad técnica, social y ambiental.

·Varios integrantes de los pueblos, periodistas y defensores de derechos humanos, han sido amenazados en su vida, integridad personal y trabajo, criminalizando con ello, la protesta social y pacífica de las comunidades.

Es por ello que como pueblos afectados por la construcción de la Represa El Zapotillo y ante la URGENCIA DE PARAR LAS OBRAS DE CONSTRUCCIÓN, convocamos a todas las organizaciones nacionales, internacionales, movimientos y ciudadanía a participar el próximo MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 en la Jornada Nacional e Internacional por la cancelación de la Presa El Zapotillo, en distintos niveles:

temaca·INTERNACIONAL
1.Hacer presencia en la embajada mexicana de sus países.
2.Solicitar una reunión con el o la embajadora.
3.Entregar una carta dirigida al gobierno mexicano, exigiendo la cancelación definitiva de la presa El Zapotillo.
4.Tomar una foto en un lugar emblemático de tu ciudad, con una pancarta que diga “Los ojos del mundo están puestos en Temaca”.
5.Convocar a los medios de comunicación.

·NACIONAL
1.Hacer una protesta frente a las instalaciones estatales de la Comisión Nacional del Agua.
2.Entregar una Carta al representante regional de la CONAGUA, exigiendo la Cancelación de la Presa El Zapotillo.
3.Hacer sus propias peticiones a la CONAGUA o a la CFE, exigiendo la cancelación de las presas, indemnizaciones y reparaciones.
4.Tomar una foto en un lugar emblemático de la ciudad, con una pancarta que diga “Los ojos del mundo están puestos en Temaca”.
5.Convocar a los medios de comunicación.

·JALISCO
temaca1.Movilización de los Arcos de la Minerva al Centro de Guadalajara.  9 am.
2.Realizar una jornada de información sobre las razones legales, sociales y ambientales para oponerse a la Presa El Zapotillo.
3.Pedir la renuncia del Gobernador del Estado de Jalisco.
4.Hermanarnos con otras luchas y movimientos en defensa de sus derechos.
5.Entregar Cartas a las autoridades responsables, exigiendo la cancelación de la Presa El Zapotillo.
 
Les pedimos que tomen fotos de las acciones que hayan sido emprendidas y que las envíen a la brevedad posible a los correos electrónicos: noalzapotillo@gmail.com y salvemostemaca@hotmail.com .

¡¡Los ojos del mundo están puestos en Temaca!!

¡¡Temacapulín, estamos contigo!!

Chiapas: Alto a la destrucción de las montañas de Salsipuedes

Chiapas: Alto a la destrucción de las montañas de Salsipuedes

FIRMA:
http://www.salvalaselva.org/mailalert/632/chiapas-alto-a-la-destruccion-de-las-montanas-de-salsipuedes?sms_ss=facebook&at_xt=4ccb10224be4c9ae%2C0
Salsipuedes
En plena ciudad colonial de San Cristóbal de las Casas, en el estado de Chiapas, unas depredadoras minas de material pétreo a cielo abierto (grava y arena), están causando un verdadero ecocidio desde hace más de 20 años. La destrucción del bosque de las montañas de Salsipuedes, al sureste de la ciudad, supone la desaparición de la flora y la fauna, la extinción de especies maderables y la alteración irreversible del ciclo hidrológico natural. Ya se han desecado o alterado la mayoría de los pozos que abastecen de agua a la ciudad. La contaminación propia de la minería y el cambio climático vienen a sumarse a la gravedad de la situación.

El pueblo sancristobalense defiende su derecho a la salud, al agua, al medio ambiente sano y a la integridad física. Se teme además las vidas y el patrimonio de las familias cuyas viviendas conlindan con estas minas. Como zona geológicamente inestable y dentro de la principal área sísmica de México, existe un riesgo real de que los inmensos taludes que la depredadora actividad minera deja desnudos, se desprendan arrastrando con ellos grandes porciones de suelo que caerían sobre colonias, centros educativos y zonas habitacionales. Ya se ha registrado un primer deslave en la colonia Almolonguilla, en el que «afortunadamente no hubo vidas que lamentar, pero es una advertencia», denuncian vecinos de San Cristóbal.

El efecto actual de las minas de Salsipuedes es devastador y pone en riesgo, a mediano plazo la supervivencia de la ciudad. En 2008 se estimaban 45 hectáreas devastadas que hoy día ya ascienden a 100. La superficie afectada sigue incrementándose, debido a la continua demanda del material pétreo. Las minas limitan ya con el propio centro histórico (Barrios San Diego y La Florecilla) y el impacto sobre el paisaje puede observarse claramente desde cualquier acceso a San Cristóbal.

El material que se extrae de Salsipuedes está destinado a la construcción de nuevas carreteras y autopistas, como la criticada San Cristóbal-Palenque (http://www.salvalaselva.org/protestaktion.php?id=482) o la ampliación de la vía San Cristóbal-Comitán. También la llamada ciudad rural «sustentable» de Santiago del Pinar (los Altos) se está construyendo a expensas de la destrucción de las montañas de la ciudad de San Cristóbal.

Por si fuera poco, en la cada vez más común línea de la criminalización de la protesta social, se ha desatado una campaña de difamación pública y de hostigamiento, en contra de algunas personas que desde diferentes frentes, denuncian todos estos hechos.

La actividad minera impacta negativamente la calidad de vida de toda la población de San Cristóbal de las Casas y de sus miles de turistas y visitantes. Al gobernador de Chiapas le pesa mucho la presión de la opinión pública internacional, pues una de sus principales banderas políticas es el turismo extranjero, y lo que él llama «ecoturismo». Este es un muy buen momento para enviarle una carta.

FIRMA:
http://www.salvalaselva.org/mailalert/632/chiapas-alto-a-la-destruccion-de-las-montanas-de-salsipuedes?sms_ss=facebook&at_xt=4ccb10224be4c9ae%2C0

Silvia Ribeiro: Dos modelos de agricultura frente a frente

Entrevista con Silvia Ribeiro

Dos modelos de agricultura frente a frente

Eduardo Tamayo G.
http://alainet.org

Silvia Ribeiro,  investigadora y coordinadora de programas del Grupo ETC en la oficina de México, sostiene que la agricultura industrial es responsable del 44 al 50 % de los gases de efecto invernadero, a la vez señala que la producción agrícola de pequeña escala, además de contribuir significativamente a la alimentación de nuestras sociedades, aporta al enfriamiento del planeta. Un dato a tener en cuenta para la próxima cumbre climática de Cancún, que se llevará entre  el 29 de noviembre y el 10 de diciembre próximos.

-Estamos próximos a una nueva cumbre sobre el clima en Cancún, la pregunta que surge es ¿cómo está afectando el modelo de agricultura industrial al cambio climático?
 
Es una pregunta muy importante porque los propios gobiernos,  a través de las cifras oficiales que maneja Naciones Unidas,  reconocen que la agricultura industrial es causante del catorce por ciento de la emisión de gases de efecto invernadero, y esto es la misma cantidad que causan los transportes, o sea es muy grande. Y en realidad si sumamos todo el sistema alimentario agro-industrial, desde la semilla al supermercado, lo que significa producir comida y cualquier fibra en cantidades industriales, y lo que eso conlleva en términos de transportes, refrigeración, derivados de petróleo que son todos los insumos químicos, y luego la cantidad de embalajes que se usan en los supermercados en las cadenas industriales (que es el factor fundamental de tala de árboles, que es otro dato poco conocido), si sumamos todo eso, la agricultura industrial, según los autores que se tomen,  es responsable del 44 al 50 % de los gases de efecto invernadero, y además usa el 70 por ciento del agua del planeta. Por otra parte, la agricultura campesina de pequeña escala no gasta en transporte porque se dedica sobre todo al mercado local, usa muy pocos insumos derivados del petróleo o no los usa por razones de elección o por razones económicas, pero además, por el manejo del suelo que hace, la agricultura descentralizada y diversa absorbe una gran cantidad de carbono.  Entonces, una cosa que la Vía Campesina comenzó a decir en el 2007 de que los agricultores chicos estaban enfriando el planeta, ahora hay cifras que lo muestran claramente.
 
-¿Cuáles son las tendencias que marcan el desarrollo del agro latinoamericano?
 
Uno de los problemas más graves que hay es la consolidación de las empresas de agronegocios. En los últimos treinta años ha habido una consolidación corporativa de los agronegocios que no tiene precedentes, ni en la historia de la agricultura ni en la historia del industrialismo. Por ejemplo tenemos situaciones como la de Monsanto que tiene más del noventa por ciento del mercado de semillas transgénicas, al mismo tiempo que tiene la mayoría de todas las semillas comerciales. Pero vemos lo mismo en toda la cadena, desde las semillas,  que son cinco o seis empresas que tienen casi todo el mercado comercial, pasando por  todas las que procesan cereales que son cuatro (Cargill, Dreyfrus, Bunge y ADM), las procesadoras que son cuatro o cinco, finalizando en los supermercados. Entonces tenemos unas  veinte transnacionales con un enorme peso sobre los gobiernos y sobre las políticas agrícolas. Aparte,  tenemos una realidad que todavía está presente en América Latina y es que aproximadamente la mitad es población rural y quienes producen la comida son sobre todo campesinos. Es como si estuviéramos todo el tiempo en una confrontación brutal: por un lado las empresas más poderosas del mundo y por otro lado una cantidad de gente, de pequeños y pequeñas campesinas que todavía siguen produciendo la mayor parte de la alimentación.
 
-¿Cuáles son las características fundamentales del agro negocio como modelo de agricultura?
 
Bueno, introdujeron desde hace más de 50 años un tipo de agricultura mecanizada y que usa una gran cantidad de agroquímicos, pero que además hace que la gente no pueda usar su propia semilla y la tenga que comprar. Y la semilla es la base, es la puerta de toda la red  alimentaria, entonces,  quien controla la semilla controla lo que sigue después. Y esa es la tendencia que hay en este momento en América Latina y que cada vez crece más. Entonces, se está produciendo comida industrial con menor calidad que favorece sobre todo a los intereses corporativos y que además tiene una cantidad de problemas para la salud y genera dependencia y es un factor fundamental de que no se pueda establecer soberanía alimentaria en los países.
 
-¿Qué nos puede decir de los monocultivos?
 
Los monocultivos son una parte integral de esta agricultura tanto a nivel de cultivos agrícolas como de plantaciones. Y nosotros encontramos que el modelo de monocultivos es fundamental en toda la agricultura industrial en América Latina. El caso de Brasil es uno de los más avanzados, los monocultivos de caña de azúcar, maíz, soya y eucaliptos están ocupando cada vez más terrenos, incluso disputándoles terrenos a aquellos que quieren ocupar la tierra para producir comida. En general estos son cultivos que no están dedicados a la alimentación de la gente, están dedicados o a la exportación para procesamiento en otros lugares o para los agrocombustibles en varios lugares. Entonces también es una disputa a nivel de quién consume lo que se produce.
 
-Algunos tratados de libre comercio ya están vigentes por algunos años, ¿como está afectando esto a los pequeños campesinos?
 
El dato fehaciente es que los tratados de libre comercio han empujado a un mayor desplazamiento de los agricultores chicos hacia la ciudad, lo cual aumenta la pobreza ciudadana, disminuye las posibilidades de soberanía alimentaria dentro de los propios países, y ha creado situaciones de mayor pobreza y desplazamiento de quienes pueden ser las soluciones a las crisis alimentaria y  a la crisis climática.

http://alainet.org/active/41852

La escalada de patentes sobre «cultivos climáticos» amenaza la biodiversidad y apunta al acaparamiento de tierra y biomasa

La escalada de patentes sobre «cultivos climáticos» amenaza la biodiversidad y apunta al acaparamiento de tierra y biomasa

biodiversidadRebelión. 27-10-2010

Las corporaciones más grandes del mundo de semillas y agroquímicos están llenando cientos de solicitudes de patentes de amplísimo espectro sobre genes múltiples, en una apuesta por controlar la biomasa vegetal del planeta, según el informe del Grupo ETC publicado este lunes 25 de octubre.

Un puñado de corporaciones multinacionales están presionando a los gobiernos para que acepten, mediante el sistema de patentes, el apropiamiento de la biodiversidad más amplio y peligroso de la historia, advierte el Grupo ETC en Nagoya, durante la reunión del Convenio sobre Diversidad Biológica. (18 al 29 de octubre de 2010).

«Los gigantes genéticos están acumulando patentes que amenazan con restringir totalmente el acceso a la biomasa y al suministro de alimentos en el futuro», advierte Silvia Ribeiro del Grupo ETC. «El alcance de muchas de estas patentes sobre genes diseñados para el clima es asombroso: en mucho casos, una sola patente reclama la propiedad de secuencias genéticas que podrían desarrollarse en virtualmente todos los cultivos importantes del planeta, así como en el procesamiento de alimentos para humanos y animales», explica Ribeiro.

El Grupo ETC identifica más de 262 familias de patentes de las que derivan 1663 documentos publicados en todo el mundo (tanto de patentes solicitadas como otorgadas) que hacen reclamos específicos de propiedad sobre tolerancia en vegetales al estrés ambiental (sequía, calor, inundaciones, heladas, salinidad). DuPont, Monsanto, BASF, Bayer, Syngenta y sus aliados acaparan tres cuartas partes de las patentes identificadas. Solamente tres de estas corporaciones —-DuPont, BASF y Monsanto— tienen en su poder dos terceras partes del total. Los investigadores del sector público tienen únicamente el 10%.

«En una apuesta desesperada por obtener legitimidad moral y lograr aceptación del público a los cultivos genéticamente modificados, los gigantes genéticos han «donado» algunos genes de cultivos ya patentados a agricultores pobres en África», explica Ribeiro.

«Quieren que los gobiernos del Sur abran sus mercados a sus cultivos modificados genéticamente y se acostumbren a que las leyes de patentes sobre biotecnología son amigables. Es una lógica inaceptable: quieren que a cambio de esas tecnologías no probadas, los gobiernos del Sur renuncien a su soberanía nacional sobre la propiedad intelectual, la biomasa y los alimentos,» advirtió.

«Esas patentes son la última forma de la biopiratería», enfatiza Vandana Shiva, Directora de la Research Foundation for Science, Technology, and Ecology en India. «Los agricultores han criado semillas para la sequía, las inundaciones y la tolerancia a la salinidad por milenios. La adaptabilidad climática depende en última instancia de la innovación de los agricultores, de que la biodiversidad y los procesos agroecológicos permanezcan en las manos de las comunidades agrícolas», dijo Shiva.

«Los gobiernos reunidos en el Convenio sobre Diversidad Biológica en Nagoya, Japón, deben poner un alto a este acaparamiento de patentes sobre genes ‘para el clima’, una más de las falsas soluciones al cambio climático. Deben instruir a sus oficinas de propiedad intelectual para que rechacen todas estas patentes» dijo Neth Daño del Grupo ETC, presente en la reunión. «El CDB y la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO) deben hacer en conjunto una revisión fundamental de todos los reclamos de propiedad intelectual, pues estas patentes también violan claramente el Tratado sobre Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura de la FAO y su organismo de gobierno debe investigar y tomar acción.»

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=115593&titular=la-escalada-de-patentes-sobre-%22cultivos-clim%E1ticos%22-amenaza-la-biodiversidad-y-apunta-al-acaparamiento-de-

Revista Biodiversidad, sustento y culturas N° 66

Revista Biodiversidad, sustento y culturas N° 66

En este número, además de develar las nuevas maniobras de la enorme industria de la carne en el Sur global, con sus contaminantes criaderos industriales, Biodiversidad narra el proceso de articulación que comenzó tras el fracaso de la cumbre climática de Copenhague, tomó forma en Cochabamba y busca expresarse plenamente en Cancún.

Nuestra sección Un vistazo y muchas aristas aborda la relación de la soberanía alimentaria y la lucha de las mujeres, se presentan documentos de la Campaña de la Semilla de Vía Campesina que sirvieron de preparación para el Congreso de la CLOC-Vía Campesina que tuvo lugar en Quito, Ecuador, a principios de octubre, y el Cuaderno 33 es un recuento de los 20 años en que las corporaciones han intentado controlar el sistema alimentario mundial.

Revista Biodiversidad, sustento y culturas N° 66Editorial

La fotografía de la portada muestra las instalaciones de Granjas Carroll, uno de los criaderos industriales más famosos del mundo porque todo parece indicar que la gripe porcina AH1NI tuvo su momento de mutación epidémica en esos campos de exterminio de puercos para consumo humano.

El agua que refleja los edificios es una laguna de mierda, pomposamente llamada “de oxidación”, y eleva su fétida cauda invisible de gases con efecto de invernadero al aire del Valle de Perote, otrora un enclave campesino indígena, golpeado primero por híbridos y agroquímicos y luego por la proliferación de granjas industriales que penetraron la economía mexicana como subsidiarias de grandes corporaciones, gracias al Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Es escandaloso que una de las principales ventajas comparativas que ofreció México fueran las regulaciones ambientales nulas, la posibilidad de una inversión extranjera sin freno, vastos paquetes de subsidios y una batería de leyes para rematar el país.

Por todo el mundo, estos acuerdos “comerciales” y de “cooperación” van sustituyendo las normatividades nacionales y la legislación internacional, y han logrado privilegiar las cláusulas comerciales por encima de la ética y el derecho. Sin duda, el acelerado ritmo de la devastación general que provocan las corporaciones en su ciego camino por reproducir la ganancia, se recrudece en todo el mundo en tanto las corporaciones imponen su ley por encima de la ley con estos “acuerdos de libre comercio”.

Qué condiciones imperan en el mundo para que un puñado de corporaciones y gobiernos, en complicidad, se hayan apoderado de todo el sistema alimentario mundial, del agua, del petróleo, de la tierra, del dinero, de la infraestructura material y técnica del planeta, de los acervos de información, de los aparatos represivos para ejercer la violencia, y sin embargo en su avidez de ganancia atropellen más y más ámbitos comunes, más espacios de humanidad, y la más vasta riqueza del mundo que es la diversidad de la vida y la visión de los pueblos.

Por eso no podemos dejar de decir que la complejidad de las crisis combinadas pusieron al mundo ante una devastación generalizada que esos gobiernos y empresas no quieren reconocer, porque podría frenar el desarrollo de sus intereses de corto plazo (el largo plazo ya no lo entienden).

Así, estamos en un momento muy oscuro: la amenaza de una crisis climática que puede estallar en cataclismos de inundación, sequías, tormentas, desa-parición de poblaciones, desata en los poderosos la mezquindad de negociar lo mínimo posible (que nada nos haga perder el equilibrio, parecen decir) y la ambición de sacarle jugosas ganancias a la especulación financiera con el volumen de aire que alguien dice cuidar en algún lado. Desata un empeño por promover y subsidiar chifladuras seudocientíficas que son meros remiendos de un sistema tecnológico-industrial-económico que insiste que su idea del progreso funciona —cuando ya todos sabemos que el ángel del progreso va de espaldas al futuro y barre y destroza toda la sabiduría del pasado como si no tuviera ninguna importancia.

Crece la sombra de revueltas por alimentos básicos, agua, energía y servicios. Los especuladores manipulan las políticas públicas y los precios se disparan, cunde la escasez aparente, las catástrofes naturales (terremotos, huracanes, tsunamis, sequías, incendios) son magnificadas por la negligencia tras de la cual se esconde un desprecio criminal por parte de muchos gobiernos hacia la gente común. Los ejércitos salen y se mantienen en las calles, asumen funciones policiacas, la vida cotidiana se va ahogando con más y más controles sobre más ámbitos que antes eran libres, y comunes, y abiertos —y la paradoja es que los sistemas políticos se tornan más delincuenciales.

El número de migrantes se eleva a más de 200 millones de personas, forzadas a viajar llevando su casa (y su visión, sus saberes, su sentido del amor y la fraternidad) a cuestas. Son mil millones los hambrientos. ¿Y los desaparecidos, los asesinados, los enfermos, los intoxicados, los afectados por esa devastación por envenenamiento, mutación, explotación y represión?

Grandes consorcios anónimos emprenden un nuevo acaparamiento de tierras en todo el planeta. Las empresas se empeñan en erradicar la producción independiente de alimentos; buscan certificar, homologar y, si se pudiera, erradicar la vastísima diversidad de las semillas ancestrales. Depender para alimentarnos de tales empresas que nos imponen sus criterios, sus modos, su dudosa calidad y sus nocivas normas sanitarias y ambientales, es enorme esclavitud.

No hay símbolo más contundente de esta condición que los criaderos industriales (que provocan extensa contaminación, epidemias generalizables en regiones enteras) pero que producen lo que quieren que coman los pobres para siempre: una especie de conglomerado de carne “barata”, de muy muy dudosa calidad, cuyos costos en realidad ni se contabilizan: se le impusieron a la humanidad entera y nos tienen en esta crisis de crisis de los últimos tiempos.

Pero (porque hay que usar los peros al revés) la claridad y la acción, la lucha que conllevan, abren reflexión en muchos ámbitos, y más y más espacios donde la gente se junta (a todos los niveles), y comienza a entender la longevidad de la memoria. Ésta nos dice que los pueblos con sus modos y sus saberes han estado ahí viendo pasar sistema tras sistema. Aunque hoy esa conciencia sea más clara que nunca y se sienta muy fuerte la fractura entre los pueblos con sus comunidades, y los sistemas que insisten en imponerse, los pueblos hace rato que saben que tienen la razón. Y hace rato dijeron: ya basta. Sean pueblos rurales o pueblos urbanos, porque son los mismos, en diferente momento y condición. Van entendiendo cómo seguir levantando su visión en medio de los escombros de la modernidad.

Hay colectivos que ya tienen muy claro que hay que lograr producir los alimentos propios. Que la agricultura campesina no es un mito ni una joya exquisita de la antropología, sino urgente propuesta para enfriar la tierra y producir los alimentos propios, algo que siempre traerá libertad.

Soberanía alimentaria, que le dicen. Autonomía. Algo que no es posible de un día para otro. Algo que será el fruto de una lucha por hacerse escuchar, por juntar fuerzas con las luchas afines, por hacerle justicia a la dignidad y al respeto entre las mujeres y los hombres. Algo que será fruto de una lucha por recobrar la tierra y el manejo de los territorios ancestrales; por reivindicar la convivialidad como raíz del derecho, por reivindicar un autogobierno que propicie la experimentación verdadera y la revaloración de lo tradicional. Algo que tiene su corazón en el cuidado del mundo mediante el cultivo de alimentos y de la vida diversa. Algo que marque un rechazo frontal al futuro al que nos orillan. Y todos los relojes están caminando.

Por eso Cancún puede ser el momento de un grito muy vasto en pos de justicia social y ambiental.

La revista completa aquí (aquí en PDF)

Países ricos, los que más contaminan: RMALC

Países ricos, los que más contaminan: RMALC

villamarOficialmente, los llamados países desarrollados emprenden esfuerzos por reducir sus emisiones contaminantes. Por ello, Cancún será sede de la Conferencia sobre Cambio Climático (COP 16) a realizarse en diciembre próximo. Hay una contradicción original entre la preservación del medio ambiente y la riqueza , pues los principales productores de contaminantes, son precisamente los países más ricos y los recursos naturales están sobre explotados para mantener un modelo económico que además explota a la población más pobre.

Alejandro Villamar, integrante de la Red Mexicana de Acción Frente al Libre Comercio (RMALC) nos habla sobre este evento y las acciones que se emprenden desde la sociedad civil.
AUDIO: Escuchar a Alejandro Villamar (mp3)

http://www.bocadepolen.org

CIEL: mineras no dudan en asesinar a activistas para imponer sus intereses

CIEL: mineras no dudan en asesinar a activistas para imponer sus intereses

 

Presentarán ante la CIDH abusos graves ocurridos en el país

CIDHFernando Camacho Servín. Periódico La Jornada
Sábado 23 de octubre de 2010
http://www.jornada.unam.mx/2010/10/23/index.php?section=politica&article=014n2pol

Las empresas mineras no dudan en recurrir a actos graves de violencia contra ambientalistas y defensores de derechos humanos, incluidos el asesinato, el secuestro y la desaparición, con tal de imponer sus intereses económicos en México y Centroamérica, y para lograrlo suelen contar con la complicidad de los gobiernos locales.

Esta es la denuncia que el Centro para el Derecho Ambiental Internacional (CIEL, por sus siglas en inglés) presentará el lunes 25 de octubre durante la audiencia que sostendrá ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que se realizará en la ciudad de Washington, sede principal del organismo.

Marcos Orellana, director del Programa de Derechos Humanos y Medio Ambiente del CIEL, explicó que activistas de México, Guatemala, El Salvador, Panamá y Honduras acudirán a denunciar los abusos que han sufrido a causa de su labor contra las actividades de la industria minera en la región.

«Se han registrado asesinatos, secuestros, desapariciones y otras formas de violencia contra ellos. No hay un marco regulatorio efectivo para el trabajo de las minas, y eso genera impactos ambientales y sociales. Pero cuando las comunidades se organizan, empiezan a ser blanco de grupos paramilitares, con el apoyo o la anuencia del Estado», denunció.

La finalidad de la audiencia es «crear conciencia de este problema, porque los asesinatos y la violencia suelen presentarse como un acto aislado, pero vemos que en realidad son un patrón, una tendencia recurrente».

Por tal motivo, la organización solicitará que la CIDH le ordene a los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) que se fortalezcan los mecanismos institucionales de defensa a los promotores de derechos humanos y ambientales.

“Muchas veces –señaló Orellana– se hace hincapié en la participación ciudadana pero, ¿cómo va a haber participación si los que lo hacen son asesinados? No puede haber democracia en ese contexto”.

Entre las cuestiones más importantes que se plantearán el lunes, dijo, se encuentra el tema de la responsabilidad que podrían tener los países de origen de las compañías mineras, como Estados Unidos y Canadá, quienes estarían obligados a intervenir mediante una regulación laboral efectiva.

En el informe que el CIEL presentará ante la CIDH, se incluyen varios casos de abusos ocurridos en México, entre ellos el de Mariano Abarca Roblero, activista chiapaneco que fue asesinado en noviembre de 2009 luego de haber recibido amenazas de muerte por su oposición a la empresa minera canadiense Blackfire.

Sin embargo, afirmó Orellana, hay otras denuncias graves, como las relativas a Minera San Xavier (San Luis Potosí); las minas La Guitarra (estado de México), y Cuzcatlán (Oaxaca), en donde «se han verificado actos de violencia con la participación de autoridades municipales, grupos armados de delincuentes o fuerzas de seguridad irregulares».

Sobre la falta de cumplimiento por parte del gobierno mexicano de varias recomendaciones internacionales de derechos humanos, Orellana consideró que si esta actitud se repite «se menoscaba la legitimidad del Estado y eso genera más violencia, impunidad y desprotección contra las comunidades».

La delegación del CIEL estará acompañada por Javier Balderas Castillo, abogado de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (Rema), quien dará su testimonio por el caso de Mariano Abarca, y por miembros del Centro Mexicano de Derecho Ambiental.

DECLARACIÓN DE LA VÍA CAMPESINA FRENTE A REDD

DECLARACIÓN DE LA VÍA CAMPESINA FRENTE A REDD

REDD
La Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo – Vía Campesina (CLOC-VC) expresa su rechazo absoluto ante las falsas soluciones al cambio climático y particularmente al mecanismo llamado REDD, REDD+, REDD++ que se pretende imponer en la Conferencia de Cancún pues el mismo representa un paso más en la privatización de la naturaleza y el despojo de nuestros pueblos.

Tal como lo ha expresado la Cumbre de los Pueblos Frente al Cambio Climático realizada en Cochabamba, donde la CLOC-VC tuvo una activa participación “Condenamos los mecanismos de mercado, como el mecanismo de REDD (Reducción de emisiones por la deforestación y degradación de bosques) y sus versiones + y ++, que está violando la soberanía de los Pueblos y su derecho al consentimiento libre, previo e informado, así como a la soberanía de Estados nacionales, y viola los derechos, usos y costumbres de los Pueblos y los Derechos de la Naturaleza”.

Los proyectos REDD (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación Forestal), son una iniciativa surgida de las negociaciones de cambio climático que pretende incorporar los bosques -y otros ecosistemas- a los mercados internacionales, para lo que necesitan atacar los derechos de los pueblos y las comunidades sobre sus tierras y territorios. Este mecanismo es una profundización y expansión global de la privatización y apropiación de los bosques, paramos y tierras agrícolas por parte de los estados y las empresas privadas. REDD implica la creación y el comercio global de servicios ambientales en desmedro de la soberanía alimentaria y demás derechos de los pueblos promoviendo su control por grandes corporaciones, el control de los territorios y la militarización de los mismos.

Los daños sufridos por las comunidades ya son visibles allí donde se impulsan proyectos de este tipo, siendo una pequeña muestra de la amenaza de REDD los impactos sobre los campesinos de Ecuador, Brasil, Indonesia y Kenia donde ya existen proyectos implementados.

Rechazamos estas formas de interferencia en nuestras tierras y territorios que, aprovechando las necesidades de las comunidades, utilizando estrategias de división y falsas consultas, pretenden involucrarlas en estos mecanismos REDD.

REDD una forma mas de traspasar la responsabilidades de los países que han contaminado la atmósfera hacia los pueblos del Sur que históricamente hemos cuidado el planeta y de ninguna manera podrá ser reformulado para que este al servicio de la verdadera protección de los bosques y a favor de los pueblos.

Exigimos que se enfrente el Cambio Climático con la única salida posible que es la reducción en el consumo y extracción de combustibles fósiles y el apoyo a la agricultura campesina, lo que significa consiguientemente un cambio de relación entre los seres humanos y la naturaleza, inspiradas en aquellas que los pueblos indígenas y campesinos mantienen hasta el día de hoy.

Alertamos a los campesinos del continente que toda intención de incorporar los llamados estandares social y ambientales los proyectos REDD no resuelven los problemas, pues REDD no detiene el cambio climático, ni frena los intereses de apropiación definitiva de nuestras tierras.

Los bosques, los manglares, páramos, humedales y la agricultura campesina están protegiendo al planeta pues, a mas de ser espacios ricos en biodiversidad, son reservorios naturales de agua y carbono y así mantienen el equilibrio climático. Estos ecosistemas junto a prácticas tradicionales constituyen fuente de vida y hogar de comunidades campesinas, pueblos indígenas, pescadores o afrodescendientes, que hemos permanecido en estos territorios y los hemos cuidado desde siempre.

Sin embargo estas tierras están siendo destruidas por actividades petroleras, la minería, la explotación industrial de madera, la conversión de bosques y tierras agrícolas en plantaciones forestales y monocultivos para agrocombustibles y agroexplotación. Todo esto contribuye a acelerar la contaminación y el deterioro de las condiciones de vida en el campo así como a empeorar el cambio climático, puesto se emiten grandes cantidades de C02 y otros gases de efecto invernadero.

Por lo tanto combatir el cambio climático implica, en primer lugar, cambiar el modelo de desarrollo basado en el sobre consumo y extracción de combustibles fósiles, enfrentar seriamente la deforestación lo que significa terminar sus causas subyacentes, apoyar la agricultura campesina y familiar y respetar y favorecer los derechos colectivos de los pueblos y nacionalidades sobre sus tierras y territorios.

Hacemos un llamado a construir amplias alianzas en el campo y la ciudad para que desde la unidad logremos derrotar esta nueva amenaza para nuestros pueblos.

¡Nuestro Clima no está en venta!

La nueva ofensiva del “capitalismo verde”

La nueva ofensiva del “capitalismo verde”

capitalismo verdehttp://fobomade.org.bo
El capitalismo en crisis múltiple crea nuevas mercancías y desarrolla nuevos instrumentos para reproducirse, como por ejemplo el denominado “mercado de carbono”, donde compra y vende territorios, recursos naturales y “derechos” o “licencias” para contaminar y sobreexplotar la naturaleza.

El clima planetario está a merced del capital, rehén del mercado de carbono. Aunque parezca “una dinámica extraña”, el comercio de emisiones puede financiar varios proyectos, “hacer que el desarrollo sustentable sea eficiente en costo, y lograr verdaderos progresos en la reducción de los gases de invernadero”, justifica el vicepresidente ejecutivo de Desarrollo y Mercadeo de la empresa 3Degrees Steve McDougal.

Sin embargo, todas las propuestas ambientales del capitalismo verde, entre ellos los Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL), han sido ineficaces en la práctica. Estas falsas soluciones permitieron a las naciones ricas seguir incumpliendo sus compromisos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI); al tiempo que degradaron enormes extensiones de tierras y fuentes de agua, y alentaron la privatización de territorios indígenas y campesinos en todo el mundo.

¿Cómo funciona el mercado de carbono?

La Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) asigna “responsabilidades comunes pero diferenciadas” en la lucha contra el cambio climático a los países ricos y pobres. El Protocolo de Kyoto –refrendado en 1997 y vigente desde el 16 de febrero de 2005– compromete sobre todo a los países desarrollados a poner un tope a sus emisiones de GEI.

El Protocolo habilita tres mecanismos de mercado para ayudar a las naciones industrializadas a alcanzar metas de reducción de emisiones de GEI de 5,2% entre 2008 y 2012: el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL), el Comercio de Emisiones y la Implementación Conjunta.

Los mayores emisores de GEI pueden alcanzar sus metas de reducción de emisiones ya sea optimizando sus procesos productivos, utilizando combustibles más limpios, o bien comprando asignaciones de derechos de emisión.

Los principales países contaminadores del Planeta venden, compran, subastan o canjean “derechos de emisión o “licencias” para seguir ensuciando la atmósfera.

En el mecanismo de aplicación conjunta, los países desarrollados intercambian entre sí “unidades de reducción de emisiones”; mientras que en el mercado de emisiones comercian con “unidades de la cantidad atribuida”. El “canje” de emisiones es el mecanismo dominante.

Si las asignaciones canjeadas son demasiado costosas o limitadas, los emisores de GEI pueden también adquirir derechos de emisión más baratos financiando proyectos del MDL en otras partes del mundo que ayuden a reducir o a “capturar” CO2 no emitido a la atmósfera.

Al financiar proyectos de MDL, los países y empresas del primer mundo adquieren “certificados de reducción de emisiones” (CER), que también pueden ser canjeados o vendidos, y con los cuales acreditan el cumplimiento forzoso de las metas de reducción de emisiones.

Los proyectos de compensación de MDL pueden ser vertederos que captan metano; monocultivos forestales; instalaciones de energía renovable como granjas eólicas e hidroeléctricas, y factorías de agrocombustibles, entre otros.

Los bosques no ingresaron en la agenda de negociaciones de las COP como mecanismos de mercado hasta 2003; desde 2005 se observa una activación y a partir de la COP de Bali en 2007 vemos una escalada meteórica de la idea de que los bosques tropicales son fundamentales para avanzar en cualquier acuerdo de clima, describe la especialista de Amigos de la Tierra Brasil Camila Moreno.

El Acuerdo de Copenhague reconoce formalmente a los REDD como mecanismos para “el manejo forestal sustentable, la conservación forestal, la reforestación y el incremento de las reservas de carbono forestales”, incluyendo monocultivos de arboles transgénicos. [1]

Los REDD otorgan al menos tres tipos de compensaciones: por la reforestación de áreas previamente taladas; por la forestación o la siembra de árboles en áreas donde no existían bosques por lo menos en los últimos 50 años; y por la deforestación evitada, es decir por los esfuerzos para detener la tala de árboles, explica el director en jefe de Mercados de Carbono Forestal de Conservation International Toby Janson-Smith.

Todos estos proyectos de mercado deben cumplir tres requisitos para ser considerados viables: 1. Deben ser “adicionales”, es decir que no ocurrirían en ausencia de un incentivo de compensación; 2. Capaces de reducir emisiones de una manera medible y permanente, y 3. Ser reales y verificados por inspectores independientes.

Evolución del mercado de carbono

El número de nuevas ofertas de proyectos del mercado de carbono subió drásticamente de menos de 10 por mes a principios de 2005 a cerca de 100 mensuales en 2007, estima el Fondo de la Fauna del Mundo. [2]

Hasta 2008, la CMNUCC registró más de 1.600 proyectos de MDL en diferentes países. Según la Comunidad Andina (CAN), se ejecutan al menos 262 proyectos MDL en la región, de los cuales 46 son proyectos forestales.

En Bolivia se registran por lo menos siete proyectos forestales, la mitad en valles en Cochabamba y Chuquisaca. Colombia tiene 12 proyectos forestales. En Ecuador hay 16 proyectos, de los cuales al menos seis se encuentran en provincias como Loja, Azuay, El Oro, Zamora, entre otras. En Perú existen 11 proyectos, cuatro de ellos en el área andina, principalmente en la región Junín.

La Internacional Tropical Timber Organization (ITTO), órgano intergubernamental de los países productores y consumidores de madera de bosques tropicales, lanzó el Programa temático sobre REDD y Servicios ambientales en Bosques Tropicales (REDDES), con un financiamiento de Noruega.

En 1990, el Directorio de Empresas Holandesas Generadoras de Electricidad constituyó la Fundación FACE (Forest Absorbing Carbon Dioxide Emissions) con el objetivo de plantar 150 mil hectáreas forestales en el mundo, la mitad en los Andes de Ecuador. El objetivo es compensar las emisiones de una nueva planta térmica de carbón en Holanda. [3]

Por otro lado, la anglo holandesa Shell, la rusa Gazprom y la Fundación Clinton están financiando el proyecto tipo REDD en la provincia Kalimantan en Indonesia.

Cargill donó millones de dólares para apoyar a la Amazon Forest Carbon Parnership (AFCP). Sus contrapartes locales son el Fondo Brasilero para la Biodiversidad (FUNBIO), la Fundación de Protección y Uso Sustentable del Medio Ambiente de Bolivia, el Fondo para la Acción Ambiental y la Niñez de Colombia, el Fondo de Promoción para las Áreas Naturales Protegidas de Perú y el Fondo Nacional Ambiental del Ecuador.

En Brasil, The Nature Conservancy (TNC) y la Sociedade de Pesquisa em Vida Selvagem e Educação Ambiental (SPVS) impulsan el proyecto Guaraqueçaba en las reservas Morro da Mina, Rio Cachoeira e Serra do Itaqui, con financiamiento de la General Motors, ChevronTexaco y American Electric Power.

El comercio de los créditos de carbono ascendió a 126 mil millones de dólares en 2008, y se espera que llegue a los 3,1 billones en 2020. El mercado global no regulado de compensaciones voluntarias se triplicó entre 2006 y 2007, llegando a 331 millones de dólares, estima la organización Ecosystems Marketplace. [4]

El mercado de carbono se ha convertido en un negocio para los inversores privados y ha favorecido la especulación financiera. Las empresas adquirieron el 80 por ciento de las compensaciones en el mercado “informal”, mientras que en el mercado regulado los bancos y los especuladores concentran la mayoría de las transacciones. [5]

Grandes fraudes

Cada vez hay más evidencias de que muchos proyectos del mercado de carbono no cumplen requisitos mínimos y no contribuyen en absoluto a una mayor reducción de las emisiones de GEI.

Las compensaciones contempladas por el Protocolo de Kyoto tuvieron efectos “inciertos” sobre las emisiones de gases invernadero, con aportaciones “limitadas” al desarrollo de la tecnología sustentable, concluyó un informe de la Oficina de Responsabilidad del Gobierno norteamericano (GAO en inglés). [6]

SEGUIR LEYENDO:

http://www.biodiversidadla.org/Principal/Contenido/Documentos/La_nueva_ofensiva_del_capitalismo_verde