Cine-debate: Túmin, Más allá de la moneda, Martes 16 de enero 6 pm

En el marco del Seminario Permanente de la Sustentabilidad,

Otros Mundos A.C.

Invita a su cine-debate:

TÚMIN, MÁS ALLÁ DE LA MONEDA

Una historia de Solidaridad y Transformación

Martes 16 de enero de 2024 a las 18.00h en FORO CULTURAL KINOKI Calle Belisario Domínguez #5 A, Zona Centro, San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México

ENTRADA LIBRE

Para iniciar el año y nuestros cinedebates del 2024 proyectaremos una serie de cortometrajes y videos sobre el Túmin, esta moneda comunitaria que tiene más de 10 años circulando y fomentando una economía solidaria y para conocer la experiencias de esta moneda en San Cristóbal nos acompañará un socio tumista. Te esperamos este martes 16 de enero a las 6 pm en Kinoki.

Sumérgete en el fascinante mundo del Túmin a través de una cautivadora proyección de cortometrajes y videos que exploran las múltiples dimensiones de este innovador proyecto de mercado alternativo. Desde sus humildes comienzos hasta convertirse en un símbolo de identidad cultural y resistencia, descubriremos cómo el Túmin ha tejido una red única de relaciones basadas en la confianza, solidaridad y autonomía.

[Video] Voces en resistencia V: Tumin, moneda comunitaria

Con mucha alegría les compartimos el quinto capítulo de Voces en resistencia, es una serie de testimonios de personas que luchan por defender la vida y el territorio de mega proyectos extractivistas.

En este capítulo, les compartimos el testimonio David, Magda, Manuel y Claudia, personas tumistas de diferentes partes de la república mexicana y participantes de la Asamblea Anual del Tumin donde nos cuenta la importancia de la economía solidaridad como una forma de resistir al modelo capitalista.

Más capítulos:

Podcast: Túmin, conoce la moneda comunitaria

Con mucha alegría les compartimos esta serie de cuñas con la información más relevante sobre el Túmin, la moneda comunitaria que cada día esta más presente en cada rincón de México

Comparte, difunde e informa sobre el Túmin

ABC del Túmin

Compartimos con ustedes esta publicación del Consejo General de Túmin donde nos platican todo sobre esta moneda comunitaria – A mayo de 2023

ABC DEL TÚMIN

La moneda comunitaria en 23 pinceladas

Introducción:

Tenemos en nuestras manos las bases de la moneda comunitaria Túmin y su Mercado Alternativo, el ABC de lo que quiere ser desde que nació en 2010 en un rincón de México llamado Espinal, Ver.

Algo que era para una pequeña comunidad, ya llega a 25 estados con cerca de 3 mil socios; y lo que era para nuestros tiempos libres, se va haciendo parte integral de nuestra vida.

Con el Túmin se busca un desarrollo comunitario de “Economía Solidaria”, diferente a la economía capitalista donde sólo se compite por el bien individual; y distinta a la economía socialista que controla el Estado.

La Economía Solidaria se centra en la comunidad autónoma y en la cooperación, más allá de intereses personales. Demuestra que, para progresar como sociedad, cooperar es mejor que competir.

La moneda comunitaria Túmin crea tejido social donde hay dispersión y desorganización, principalmente entre pequeños productores y comerciantes, frente a los monopolios corporativos. Más aún, pone en práctica un nuevo modelo de sociedad.

Veremos que el uso de la moneda comunitaria crea poder de compra y resta poder al sistema económico que hoy favorece a dichas corporaciones.

Así, el Túmin se diseñó como un motor que impulse la economía local y nos ayude a vender nuestros productos. Si es una carga más, no sirve.

No pretende sustituir al trueque, sino facilitarlo. Queremos que el dinero cumpla su función social de agilizar el comercio y distribuir la riqueza, no el acaparamiento. Pero depende de la voluntad de cada participante: funciona tanto como tú quieras.

Hablaremos en tres apartados: A) de la moneda; B) de los tumistas que le dan vida; y C) del mercado alternativo que se genera.

Te contaremos qué es el Túmin y por qué es así. Todo tiene su historia…

A La moneda

1 – Para satisfacer necesidades

El Túmin es un dinero comunitario de papel que un grupo de productores y comerciantes decide imprimir, porque tienen productos y servicios, pero no dinero para comerciarlos.

La riqueza real ahí está, echándose a perder al no haber la herramienta para hacer los intercambios: el dinero.

Porque el trueque directo a veces es difícil: simplemente uno no quiere o no necesita en ese momento lo que el otro le ofrece, y ya no hubo intercambio. El comercio se detiene y la gente no adquiere lo que necesita para sobrevivir.

Sin embargo, una persona puede recibir dinero por sus productos, y con él podrá comprar lo que quiere con otros vendedores, cuando lo necesite. Así, el comercio no se detiene y todos obtienen lo que desean.

Por otro lado, las importaciones y los grandes supermercados han desplazado a los productos locales, de modo que se llevan todo el dinero y no queda nada para comerciar en la localidad.

Por eso es importante contar con un dinero propio que no se vaya a las grandes tiendas y que nos ayude a que los productos circulen. Así se facilitan las compras y los trueques.

Como vemos, el Túmin se hizo para satisfacer necesidades, para adquirir los productos y servicios que ofrece la comunidad. No se hizo para venderse como una mercancía más.

El dinero que otros hacen para venderlo, como muchas criptomonedas, no es para satisfacer necesidades sino para hacer negocio, para obtener ganancias a costa del otro. Se genera un comercio inequitativo e injusto, utilizando la escasez para subir los precios y adquirir más dinero.

En cambio, el dinero comunitario es para que tengamos acceso a la abundancia.

2- Es simple

Para que una moneda comunitaria fuese aceptada, debía ser sencilla, sin complicaciones, sin más requisitos que querer participar.

En su inicio era algo novedoso, sobre todo para Espinal, la pequeña población veracruzana donde nació. Incluso parecía un proyecto loco, increíble,
ilegal, fraudulento…

La moneda tenía que estar diseñada de manera práctica, lógica, tan fácil de usar como la moneda oficial, que nadie pusiera peros. Nada de firmar o hacer anotaciones. Sin complicadas cuentas, sin calculadora.

No harían falta documentos de identificación, la palabra recobraba su valor, la confianza se ponía en marcha.

Nadie se vería presionado o temeroso de participar, ni se sentiría usado; podría entrar y salir cuando lo desee, y volver a entrar y volver a salir cuantas veces quisiera. Todos serían aceptados como son.

Además, fácil de administrar, pues es una actividad extra en nuestras vidas, voluntaria, para nuestros tiempos libres y sin recibir pago alguno, ya que todos tienen otros trabajos para sobrevivir.

Su atractivo sería tan simple como pertenecer a un grupo de compañeros solidarios y de ayuda mutua, confiando unos en otros… un oasis en el desierto.

“Cero costos, cero riesgos y cero complejidades”, se decía. Sin reuniones aburridas. ¡Sin partidos políticos! Sin deudas. Pocas y fáciles reglas. Sin supervisores, ni policías ni multas. Libre, libre, libre.

Tenía que funcionar casi en automático. Sólo haría falta la propia voluntad: que los participantes decidan que funcione. ¡Y esto era tan simple como usarla!… Si la uso, funciona, y si no la uso, no funciona. Si la recibo, funciona, si no, no. Depende por igual de cada uno de nosotros.

Sin pretenderlo, resultó una moneda “standard” o común, adaptable en todos lados y a toda la gente. Con energía positiva y socialmente magnética.

3- Es gratuito

Precisamente, porque no hay dinero, es gratuito, nadie lo podría comprar.

La gratuidad resuelve la falta de dinero. Si se pagara, sería cambiar un dinero por otro, sin agregar nada a nuestros bolsillos, no tendría sentido.

Más aún, nadie quiere arriesgarse ante algo nuevo, pero al ser gratuito, no se corre ningún riesgo.

Si hubiera que pagar algo, la mayoría no participaría. Nos han acostumbrado a pedir, no a producir ni a cooperar; nos hemos hecho dependientes.

Y muchos piensan que el Túmin es un negocio de unos pocos. Pero la gratuidad acaba con los rumores: si no se cobra nada, ¿dónde está el negocio?.

En una sociedad acostumbrada a sacar provecho de todo, al negocio, al lucro y desde luego a la corrupción, nadie cree que existan proyectos honestos para el bien común.

No obstante, todo tiene un costo, ¿de dónde sale el dinero para imprimir y organizar el Túmin?.

Sale del bolsillo de gente entusiasta y desinteresada, decidida a impulsar un proyecto de desarrollo comunitario sin recibir nada a cambio. Es decir, un grupo de compañeros cooperan para que tú lo recibas gratuitamente.

Y todos podemos cooperar después, voluntariamente en posteriores impresiones, para que otros nuevos socios también reciban su Túmin gratuito como tú lo recibiste.

A cambio sólo te pedimos un compromiso simple: ¡ingéniatelas en mantenerte informado!.

Si ya no puedes participar, devuelve el Túmin, para que podamos inscribir a otro socio. Si después quieres volver, se te vuelve a dar… puedes entrar y salir del Túmin las veces que quieras.

Túmin, la moneda alternativa de México que retoma prácticas ancestrales para apoyar economías locales

Compartimos con alegría este reportaje sobre el Túmin Publicado en México Desconocido a abril 2023

Conoce qué es, cómo funciona y dónde conseguir túmin, la moneda que puede darle la vuelta a la economía de México y sus pequeños comercios.

El túmin es una moneda nacida en Veracruz cuyo objetivo es apoyar la economía de los negocios/productores locales que no tienen la capacidad para competir con las grandes empresas. Hoy en día, a más de 10 años de su invención, la mitad del país utiliza el túmin: La moneda que convierte en socios a todos ¡Conoce cómo funciona!

tumin
mexicodesconocido.com.mx Túmin.

El túmin nació en el municipio de Espinal en Veracruz, el 21 de septiembre del año 2010, en el marco del bicentenario de la Independencia de México y el centenario de la Revolución Mexicana.

La idea nació como un proyecto de la Universidad Veracruzana Intercultural, que se dio a la tarea de estudiar a fondo la economía local y encontró que aunque eran una comunidad muy productiva (especialmente en fruta y verdura), los productores locales no podían competir contra las grandes empresas y sus productos se quedaban parados, sin la posibilidad de comercializarlos. Es ahí cuando nace la idea del comercio directo y la invención del túmin, que significa dinero en totonaco.

A continuación, te presentamos la historia de una moneda alternativa con presencia en más de la mitad del territorio mexicano y que propone una nueva forma de hacer comercio entre productores y pequeños emprendimientos: El túmin.

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mexicodesconocido.com.mx Moneda túmin.

La historia del túmin

Cuando el túmin empezó, en Espinal, Veracruz vivían cerca de 25 mil personas. El túmin comenzó a girar con 35 socios de Espinal que se comprometieron a recibir el 10% de las ventas de sus productos en túmin. Cuando la sociedad llegó a 100 comerciantes, comenzaron a imprimir la moneda.   

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mexicodesconocido.com.mx

Al inicio, a los asociados se les facilitaba 500 túmin al darse de alta para poder comenzar a hacer transacciones con esta moneda, para 2016 ya no se hacía así. Cada vez que la comunidad de tumistas consigue 100 miembros nuevos, se manda a imprimir un nuevo tiraje de 50 mil túmin.

El túmin se pensó como una moneda complementaria al peso que promoviera y facilitara el trueque, actividad milenaria que se conserva como una tradición entre las comunidades totonacas. Originalmente, el trueque consistía en el intercambio equivalente y justo de bienes o productos. Por ejemplo: Un comerciante de café que quería comerciar con un apicultor, podía ofrecerle un trueque de 1 kilo de café por 1 litro de miel. 

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mexicodesconocido.com.mx Mercado de Tlatelolco.

Con el paso del tiempo, la invención de la moneda y la llegada del capitalismo, costumbres milenarias como el trueque desaparecieron o perdieron valor para los grandes productores. Sin embargo, para las pequeñas/medianas empresas y sobre todo para los productores locales, la invención del túmin y los valores que respaldan su uso facilitan el mercadeo de sus productos; construyendo comunidades y economías cada vez más fuertes y justas en donde los bienes que salen de la comunidad benefician a la misma.

Pero ¿Cómo funciona el túmin? y más importante aún ¿De qué manera el túmin apoya la economía y a las comunidades?

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mexicodesconocido.com.mx Heladero solidario con el túmin.

¿Qué es y cómo funciona el túmin?

El túmin tiene un valor equivalente a 1 peso, sin embargo, nunca se ha pretendido que sustituya a la moneda oficial de México en ningún sentido.

Existen billetes moneda con valores de 1, 2, 5. 10. 20 y 50 túmin. Fue creado para apoyar a los campesinos, los principales productores de Espinal y las comunidades en Veracruz. La propuesta principal fue el comerciar directamente entre productores con ayuda de una moneda que facilite el “trueque” y al mismo tiempo ayude a ganar dinero con valor ante el estado (pesos).

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mexicodesconocido.com.mx Diferentes billetes de túmin.

La regla principal es que se debe aceptar un mínimo del 10% del precio de tu producto en túmin. Por ejemplo, si vendes aceite en 50 pesos, debes aceptar al menos 5 pesos de túmin. Esto significa que el uso del túmin significa bajar los precios, sin embargo, sigue existiendo un beneficio y más importante aún, los productos y servicios son aprovechados.

Pero ¿De dónde sale el túmin? ¿Quién lo regula? ¿En dónde se consigue túmin?

Con el túmin no se puede especular, no genera interés y vale más si pasa de mano en mano durante el intercambio de productos o servicios que acumulado. Como en todo intercambio económico, cada trato es distinto y la cantidad de túmin aceptado depende de cada tumista.

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mexicodesconocido.com.mx Casa del túmin en Papantla.

En los lugares donde se maneja esta moneda, debe existir una Casa del Túmin, en donde los tumistas llevan su producto para mercadear con otros tumistas. Miel, café, prendas de vestir, fertilizante orgánico son algunos de los productos que se comercializan entre los empresarios que manejan el túmin. En los lugares en donde no existe una Casa del Túmin, se hacen tianguis, ferias y mercados para hacer negocios con túmin.

Conoce a la maquinopal ¡Una invención mexicana!

¿Qué opina la gente del túmin?

En 2016, 16 de los 32 estados de la república ya contaban con la presencia del túmin en sus economías locales. Las comunidades de Xalapa, Coatepec, Papantla y el Puerto ya manejaban el túmin, que también había alcanzado los estados de Jalisco, Oaxaca, Guerrero, Puebla y Chiapas

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mexicodesconocido.com.mx Puesto de verduras que acepta túmin.

Durante el mismo año los tumistas de Puebla acostumbraban hacer un mercado cada viernes. Silvia Morales, tumista de Puebla, dijo para el Chicago Tribune que el túmin es, además de un agente de equilibrio económico para su comunidad, una filosofía de vida. 

Si alguien me quiere comprar una mermelada que vale 50 y no trae túmin, quizá acepte que le de cambio en túmin para que empiece a tener.

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mexicodesconocido.com.mx Un antiguo mercado tolteca.

El túmin, más que una moneda complementaria, porque no sustituye al peso, es como un trueque. Es regresar a nuestros orígenes.Mar Jímenez, productora de Puebla.

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mexicodesconocido.com.mx Túmin.

Esta moneda es un salvavidas en el capitalismo voraz, donde si no tienes dinero, no compras. Con el túmin es posible adquirir productos de necesidad básica.Berta García, socia tumista

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mexicodesconocido.com.mx Mercado de Tlatelolco, donde se daba el trueque.

También para el Chicago Tribune, el señor Eugenio Pérez, productor de fertilizante orgánico y fruta de temporada de Oaxaca, dijo que se hizo socio después de escuchar a los tumistas hablar sobre la economía y comercializar de manera directa.

Más que el valor monetario, el túmin tiene el valor de la ilusión de personas que luchan, creen y piensan en ayudar. Ese es el valor que yo le doy. Un poquito más sentimental que económico.

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mexicodesconocido.com.mx Tianguis túmin.

Al usar túmin, un cliente se convierte en un compañero. Por lo general, la competencia hace que uno gane y otro pierda, pero el uso de esta moneda promueve el intercambio, compartir y ayudarse entre comerciantes. Juan Soto, uno de los creadores del túminJuan Soto, uno de los creadores del túmin.

El uso del túmin se ha malinterpretado al compararse con el uso de vales. Si bien es verdad que al usar túmin los productores tienen que  bajar sus precios, al participar en su intercambio, uno acepta y se compromete a dar la máxima calidad en sus productos/servicios, así como a recibirlos. 

El túmin en la actualidad

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mexicodesconocido.com.mx La portada de la sociedad de comerciantes que utilizan túmin en San Cristóbal de las Casas.

El túmin tiene valor únicamente entre quienes aceptan hacer transacciones con esta moneda; pues aunque 1 túmin es equivalente a 1 peso mexicano, el primero no tiene valor ante el Banco de México y tampoco pretende suplantar a la moneda oficial del país, sino apoyar la economía de los productores que busquen una opción más para hacer mover su producto.

En 2019, el sitio oficial www.tumin.org.mx (No disponible) informaba que habían alrededor de 1,200 tumistas en todo México y 9 tirajes de túmin. Para 2022, se estima que había 2,500 tumistas y para 2023, el túmin ya estaba presente en 24 de los 32 estados mexicanos con son 2,800 negocios que participan en el intercambio de túmin.

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mexicodesconocido.com.mx

En la actualidad, diferentes estados de la república como Morelos, Chiapas, Oaxaca y Veracruz ya imprimen túmin propios de cada región y cada billete está registrado con sello, folio y tiraje. Cualquier tipo de producto o servicio es bienvenido a usar el túmin.

El túmin llegó a estar bajo la lupa de la ley y el Banco de México, pero al estudiar el caso, las autoridades se dieron cuenta de que la moneda no presentaba un problema al no ser de curso legal en México; pues el artículo 234 del código penal mexicano prohíbe la reproducción de los billetes o piezas metálicas, nacionales o extranjeros, que tengan curso legal en el país emisor. Además, la comunidad creadora del túmin se avala también por los Derechos de los Pueblos y Comunidades Indígenas de modificar sus economías.

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mexicodesconocido.com.mx Mercado túmin en Espinal, Veracruz.

Al usar túmin, un cliente se convierte en un compañero. Por lo general, la competencia hace que uno gane y otro pierda, pero el uso de esta moneda promueve el intercambio, compartir y ayudarse entre comerciantes. Descubre más detalles sobre el túmin aquí.

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mexicodesconocido.com.mx

Conoce quién, cómo, cuándo y dónde se inventó el queso Oaxaca, aquí.

Festival del Maíz: Mujeres rurales y alimentación

Compartimos el pronunciamiento del Festival del Maíz en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas – A 1 de octubre del 2022

Hoy, hoy estamos de fiesta, porque hablar del Maíz es hablar de vida.

Hoy es un día para celebrar a nuestra gente, es venerar también las  manos de miles de campesinos y campesinas  por todo el mundo, que siembran el alimento más bondadoso que podemos tener.

Hoy es un día para agradecer a nuestra  tierra bendita, que nos permite poderlo cultivar y agradecer también a nuestro Grano excelso, «El Maíz», que es el que nos alimenta  y también es el grano que nos ayuda con la economía de los mexicanos.

Es toda una expresión cultural y lo encontramos  asistiendo siempre en nuestras tradiciones ancestrales.

Nuestros  pueblos originarios  han luchado por proteger y conservar a nuestro Maíz nativo, hacen gran fiesta con el inicio de la cosecha, porque saben que el Maíz, que el Maiz es vida.

Reivindicar del derecho de los consumidores mexicanos, a seguir alimentándose con variedades de Maíces nativos, en vez de granos transgénicos procedentes de los Estados Unidos, es algo que no tiene precio.

Para nosotros los  Mexicanos, sentarse a recibir los alimentos sin Tortillas en la mesa, es imperdonable y como no haber comido.

Alimentarnos con tortilla es un ritual de todos los días.

El Maíz,  es parte de nuestra cultura;

El Maíz es nuestra raíz;

El Maíz es nuestro alimento;

El Maíz es nuestra vida;

Hoy celebramos la biodiversidad y el patrimonio natural y cultural de México.

Hoy exhortamos, a que nuestra única revolución sea por seguir produciendo semillas limpias, para seguirnos alimentando.

Hoy seguiremos con sistemas de producción limpios, que resulten seguros para nuestra salud.

Hoy seguiremos preservando las 64 diferentes variedades de nuestros Maíces nativos.

Hoy seguiremos apostando por alternativas sostenibles.

Hoy sabemos, que sin el Maíz, la inseguridad alimentaria sería un caso seriamente severo.

Hoy seguimos levantando la voz para lograr una soberanía Alimentaria.

Hoy seguimos….

Los que suscribimos este pronunciamiento:

Hombres y mujeres de diversos colectivos, con ideales en común,que nos hemos  unido en este Festival del Maíz, “Mujeres Rurales y Alimentacion” con la firme intencion de enaltecer  a nuestro Grano portador de vida.

Hoy nos pronunciamos y  decimos no a los transgénicos, los rechazamos? (Si lo rechazamos)

Hoy decimos no al glifosato, lo rechazamos? (Si lo rechazamos)

Hoy decimos no a las semillas genéticamente modificadas, las rechazamos? ( Si las rechazamos)

Hoy decimos no más al gobierno neoliberal, lo rechazamos? (Si lo rechazamos)

Hoy decimos no a las tecnologías, las biológicas, sintéticas e impulsores geneticos, las rechazamos? (Si las rechazamos)

Hoy

 Que viva el Maíz por siempre;

Que viva el Maíz que nos alimenta;

Que viva el Maíz que nos nutre y da fuerza;

Que viva el Maíz que nos da vida;

Que viva el Maíz para todos los mexicanos;

Que viva el Maíz (Que viva);

Que viva el Maíz (Que viva);

 que viva el Maíz (Que viva).

Galería de fotos del Festival

Libro: TÚMIN; Moneda Autónoma

Compartimos con mucha alegría este bello libro sobre en Túmin a 10 años de su creación – A Abril del 2022 >>Descargar libro en pdf<<

Prólogo

El 6 de noviembre de 2020, el Túmin cumplió su primera década de vida. Así, como en su primer trienio se realizó un balance de esta notable experiencia, este libro es resultado del recuento y reflexión de su primer decenio de existencia.

Como se comenta en las conclusiones, el Túmin ha sido polémico desde el inicio. Primero, sorteando la acusación del Banco de México que sostenía esta moneda comunitaria y complementaria implicaba falsificación de dinero. También por su decisión de no restringir la participación por la calidad de los productos que las socias y los socios deciden ofertar, o si los mismos son productores o solo intermediarios ─suena la recurrente referencia de la posibilidad de comprar una coca cola con el Túmin─. A esto podemos agregar dos elementos adicionales: las iniciativas regionales que no lograron prosperar, así como la crisis interna que se visibilizó en la ríspida asamblea de 2016, en donde, en un contexto de expansión, las distintas voces no se lograron escuchar y, algunos valiosos y muy queridos compañeros y compañeras decidieron retirarse del colectivo.

En este ejercicio de sistematización no se eluden estas cuestiones, se recuperan y se hacen importantes reflexiones que contribuyen a fortalecer esta importante experiencia. Respecto a su política de “cero complicaciones” ─que el Túmin tenga libre circulación en vez de un uso restrictivo─ se sostiene que el Túmin es primero un proyecto monetario, una moneda que busca facilitar los intercambios, lo que no significa que no contribuya en otras dimensiones: “si bien las dimensiones económicas, políticas e ideológicas del Túmin lo hacen un proyecto integral, nació simple, como instrumento de intercambio, y el compromiso de los adherentes es también simple: pagar y cobrar con él. Ir más allá, es un logro extra muy deseable”. Asimismo, se plantea que es parte de un proceso de transición en el que las socias y los socios ─impulsados por la demanda y los procesos de concientización─ podrán ir caminando hacia la producción directa y agroecológica: “ya comenzamos cambiando el instrumento de intercambio, «dinero sucio» por «dinero sano», ahora habrá que cambiar la producción”. También se defiende un principio de “libertad responsable” el que supone pasar del “cada quien es responsable de lo que produce y de lo que consume, de lo que compra y de lo que vende” a un compromiso “con el medio ambiente y la comunidad”. En lo que se propone como un “examen de conciencia”, se plantea que “la economía solidaria no se entiende como un grado al que se llega sino una escuela donde se aprende a ser mejores personas”.

Sobre las iniciativas colectivas que naufragaron ─o no pudieron navegar─, se despliegan reflexiones en torno a la necesidad de contar con una base social, pues aquellas no pueden surgir de decisiones individuales. También se ha resaltado la necesidad de contar con un equipo coordinador, y de establecer relaciones con la experiencia, diríamos, “madre”. En ese sentido, en su segundo quinquenio ─específicamente en 2017─ se establecieron algunos criterios para conformar las llamadas “regiones autónomas”, ante el deseo y la intención de usar el Túmin más allá de Espinal, el territorio que lo vio nacer; entre esos criterios, está el de la participación mínima de 50 socias y socios. Asi mismo, se planteó la necesidad de contar con un Consejo General para articular la red nacional: las regiones autónomas ─cinco hasta febrero del 2020, más el Túmin-Totonacapan─, así como las socias y socias diseminadas en otras partes del país. Aquí se puede destacar además las alianzas que se han establecido con algunos ayuntamientos y con la iglesia para “aceptar el Túmin”.

En cuanto a los conflictos internos, ineludibles en toda experiencia social, se señala que los mismos pudieron manejarse de otra manera, no obstante, específicamente en relación a la crisis
de 2016, sería deseable un análisis más profundo, partiendo de las distintas voces, sobre las causas y razones del conflicto que impidieron una salida consensuada. Se hace una importante reflexión sobre la necesidad de priorizar el diálogo sobre el debate, como principio de actuación, abriendo espacio a la tolerancia: “este proyecto ha requerido de «ciencia, consciencia y paciencia» –como dice Luis Lopezllera, pionero de estas experiencias en México–, los tumistas tienen otro reto, la tolerancia”. Y agregan:

“La gran diversidad de pensamientos hace del Túmin un espacio polémico y en ocasiones conflictivo. El reto ha sido mantenerse unidos, compartir y aceptar los distintos puntos de vista, evitando sectarismo… para caminar juntos, el primer paso ha sido aceptarnos como somos, en lugar de querer forzar o imponer nuestros propios modos a los demás. Este principio de tolerancia, respeto y aceptación, abre las mentes y corazones de la gente, permite reconocer los propios errores, cambiar de opinión y corresponder en la ayuda mutua”.

A sus 10 años, consideramos que el Túmin es una iniciativa social que cuenta con importantes logros, y que desde los mismos ─así como desde sus dificultades─ contribuye a prefigurar elementos de una sociedad que busca liberarse de las relaciones de dominación y explotación vigentes, no sin tensiones y contradicciones. Desde la convicción de que otro mundo es posible, con el Túmin se cuestiona la mirada hegemónica que se tiene de la economía ─asociada exclusivamente al dinero oficial, el lucro y al interés individual─ y en términos prácticos contribuye a “desempoderar al dinero oficial”, al favorecer otros modos de intercambio. Diríamos además que contribuye a la desmercantilización y a valorar el trabajo, esto último al establecer que “un Túmin es igual a un minuto de trabajo”, contenido en los bienes o servicios ofrecidos, sea este manual o intelectual, rompiendo así con la mirada dicotómica que establece la supremacía del segundo sobre el primero, o las infranqueables fronteras entre uno y otro sostenidas desde el eurocentrismo, como forma hegemónica de saber.

Otros aspectos importantes considerados en la reflexión sobre los 10 años de vida del Túmin, son aquellos relacionadoscon la interculturalidad, la sustentabilidad y la descolonización. El que se pongan en la mesa resulta de gran relevancia, y, aunque sobre algunos de ellos se hacen apenas menciones generales, u otros, como en el caso de la sustentabilidad, son tratados con cierta renuencia –“la mayoría necesitamos digerir antes esta palabrita «sustentable»”‒, el que sean incluidos refleja que la reflexión trasciende el ámbito de la experiencia del Túmin como moneda.

Estos son elementos ineludibles para la transformación social, y sobre los que se debería establecer y mantener un ejercicio permanente de reflexión, dado el carácter polisémico de los términos, significantes vacíos que pueden ser “llenados” con diversos contenidos. Consideramos que la interculturalidad no tendría que ser entendido sólo como un diálogo de saberes, sino aspirar a ella como una igualdad epistémica, política y ontológica, que vaya a contrapelo de las relaciones de dominación y explotación propias de la modernidad/colonialidad capitalista, que descrea de las clasificaciones jerárquicas naturalizadas a partir de criterios como el de “raza”, sexo y clase. Esto es, para nosotros, la descolonialidad. En ese sentido, aunque el Túmin se reivindique principalmente como un proyecto monetario para facilitar los intercambios, no pueden dejar de considerarse otros aspectos de la vida social, pues el cambio social requiere esa mirada global ya que las relaciones de dominación y explotación no se limitan a la dimensión monetaria.

Es deseable que el Túmin persista en su orientación como proyecto integral, que ayude a “generar redes de intercambio, vida comunitaria, a promover los derechos indígenas, o de las mujeres, para producir y consumir productos orgánicos, generar autonomía y cooperativismo, cuidar la naturaleza o para educar a los niños en la economía solidaria y tantas cosas…”. Si es necesario complementar el “atornillador” ─el Túmin─ con el martillo, el serrucho, la lijadora y demás herramientas o instrumentos, hay que tratar de hacerlo, sin que esto signifique una exigencia al Túmin de resolverlo todo. Los problemas que actualmente enfrentamos como humanidad, nos exigen mirar y actuar considerando las diversas interrelaciones en los distintos ámbitos de la vida, desde la complejidad.

Para concluir, queremos dejar patente nuestro profundo respeto y reconocimiento a esta significativa experiencia, una de las más importantes en América Latina en lo que a monedas alternativas y cuestionamiento a la visión dominante de economía, se refiere. El Túmin, en este caminar de 10 años, ha dejado constancia de su capacidad de reflexión y acción, de adaptación y renovación, de despliegue de gran creatividad y pasiones. Se trata de una experiencia que ha alcanzado su madurez, y como otros colegas ya lo han señalado: ¡Larga vida al Túmin!
DANIA LÓPEZ CÓRDOVA
BORIS MARAÑÓN PIMENTEL

Introducción

“No es sano estar bien adaptado a una sociedad profundamente enferma”.
JIDDU KRISHNAMURTI

ara concluir el X aniversario del Túmin en Espinal, el 6 de noviembre de 2020, se elevó un “globo de Cantoya”1 hecho con 350 pliegos de papel de china, de unos 4 o 5 metros de alto, elaborado por jóvenes artesanos del municipio de Zozocolco, quienes llegaron a la hora acordada, a las 6 de la tarde, cuando el sol ya no se veía en el horizonte.
Lo traían en una pequeña bolsa de plástico y no parecía que de ahí fuera a salir semejante globo. De sus mochilas sacaron alambres, amarras, soplete, pinzas y otras herramientas y artefactos para inflarlo en unos minutos.

Aunque modesto en comparación con el tamaño de otros globos, era muy bello y pudo inflarse dentro del amplio auditorio. “Túmin, 10 años”, decía, y por el otro lado mostraba el ambi-
grama que diseñó el tumista Manuel Tapia.

Los jóvenes parchaban pequeñas fisuras con una cinta adhesiva transparente y metían el soplete por su gran boca para calentar el aire y mantener inflado al globo.

Aunque la mayoría de los asistentes ya se había retirado de la celebración, quienes quedaban se tomaron fotografías al pie de la gran bola.

Después lo fueron arrastrando por el aire para sacarlo del auditorio, hasta la plazuela del parque frente al palacio municipal, donde hubo más fotografías y le colgaron una botella de plástico que estabilizaría su vuelo, según se dijo.

Al final, un grupo de tumistas soltaron las amarras y de inmediato el globo se fue elevando, iluminando la noche. Tomó su rumbo hacia el municipio de Papantla, hasta que desapareció.

Los jóvenes afirman que tenía combustible para volar más o menos una hora, pero hay quienes afirman que lo han visto volando alrededor del mundo, esparciendo semillas de economía solidaria, una luz de esperanza para los pueblos. Ahí se fueron muchas cosas. El globo se llevó nuestras ilusiones y alegrías, para rociarlas por doquier. También se llevó todo lo que nos hace daño, aspirando por su boca nuestras malas vibras, envidias, desconfianzas, rencores, que se fueron con- sumiendo con el fuego… y así, por el mundo, limpiando va. Un periodista que no leyó esto, se acercó y preguntó:
─ ¿Qué significa el globo?

─ ¿Es que debe significar algo? ─respondió un compañero, rascándose la barriga, espantado por la pregunta. Pero la maestra

Irene salió al auxilio:

─ Mi vida ─le dijo al periodista─: significa que estamos contentos.

Y nadie preguntó ni respondió más.

II

El primer libro del Túmin, anterior a éste, “Aceptamos Túmin”,se resume en el primer capítulo de este segundo libro, para quienes no tienen el primero; son los primeros tres años de esta moneda comunitaria a partir de 2010. Y los siguientes capítulos completarán más de 10 años de experiencias en el Túmin: Mercado Alternativo, Economía Solidaria y Autogestión.

Esta vez no se tiene una estructura de los capítulos, si bien lleva cierto orden cronológico, por etapas.
En el segundo capítulo se habla del Contexto Académico que impulsó este proyecto, para después hablar del Turismo, debido al atractivo que pronto generó el Túmin. Seguido por el sabor comunitario de las Ferias y Tianguis, en el cuarto capítulo… y es que todo comenzó con un pequeño tianguis.
En seguida, hablamos de algo que no esperábamos, losmAyuntamientos socios, lo que puede ser motivo de otra polémica. Tampoco esperábamos un capítulo 6, donde la Iglesia so-
lidaria participa, en gran sintonía con el Túmin.

El crecimiento del Túmin nos llevó a formar Regiones autónomas y de esto hablamos en el capítulo 7, para después tratar la necesidad de un Consejo General, que viene a ser una asamblea de coordinadores y enlaces.

Ya en la segunda mitad del libro, haremos un recuento de la Emisión de billetes durante más de 10 años. Y en el capítulo diez, Qué ofrecemos, una sistematización de los productos y servicios en siete categorías.

La última parte es quizá más conceptual o reflexiva. El capítulo 11 trata el controvertido tema Túmin y sustentabilidad, para un entorno sistémico. Luego se habla de la Filosofía y pedagogía del Túmin que han ido guiando este caminar. Finalizando con el capítulo 13, Sistema financiero y economía solidaria, sobre la
importancia de un sistema económico alternativo como el Túmin.

Además, hemos incluido diversas opiniones de tumistas al final de algunos capítulos. Y todos los nombres mencionados a lo largo del libro son reales, no hay seudónimos. Lamentamos no poder mencionar a todos.
Tampoco se ha podido testificar todo lo que ha pasado. La fuente principal de información ha sido la revista Kgosni-elvolador, que, si bien no ha dejado de informar cada quincena desde 2010, no tiene toda la información consigo.

III

Pretendemos que estas páginas ayuden a cohesionar lo vivido. Y quizá puedan ser un referente para otras vivencias. Mas no se pretende un manual para hacer una moneda comunitaria, aunque a veces lo parezca; sólo se quiere compartir lo que se ha hecho, a los tumistas principalmente.

Queremos que sirva para impulsarnos en la economía solidaria, siendo el Túmin un motor y no una carga. Nos debe ayudar

a vender nuestros productos, a satisfacer necesidades, a organizarnos, a capacitarnos, a convivir, a conocer otras formas de producir y consumir; nos ha de entusiasmar. Si el Túmin es una carga, no sirve.
Y en este motor todos somos necesarios, indispensables, y líderes:

Todos necesarios. – Nadie necesita del Túmin tanto como el Túmin necesita de todos nosotros. Cada tumista es tan importante como cada uno. Ciertamente hay los más activos, que organizan, que coordinan o simplemente usan más el Túmin, sin embargo, nada de esto se podría sin los demás.
Todos indispensables. – Cada integrante hace que el Túmin sea distinto: si alguien falta el Túmin ya no es lo mismo. Así, el Túmin puede tener muchas carencias, pero, sobre todo, faltarán siempre los que ya murieron o decidieron irse. Siempre estare- mos incompletos. Nada de que “aquí nadie es indispensable”: todos somos indispensables, en algún modo.
Todos líderes. – No hay jefes, cada uno es libre de participar como quiera y de tomar decisiones, líder de sí mismo. Un liderazgo que se ve desde que alguien saca un Túmin y decide comprar; cuando decimos “págame con Túmin”; cuando coloco mi letrero “Aceptamos Túmin”. Y cada día que ese letrero está ahí
colgado, se ejerce cierto liderazgo, porque nadie me da órdenes, yo lo decido. Y si no quiero, ese letrero no se pone.
“La solidaridad es la ternura de los pueblos”.

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Cómo una moneda comunitaria en México se convirtió en una «utopía realizable» en tiempos de crisis económica

Compartimos esta nota publicada en Actualidad RT sobre el Túmin – A 17 de noviembre del 2021

A más de once años de que comenzó a circular el túnim, hay más de 2.200 socios que están distribuidos en 20 estados del país latinoamericano.

Una revolución financiera a nivel comunitario comenzó a gestarse en 2010 en el norte del estado de Veracruz, cuando productores del municipio Espinal decidieron crear el túnim —que significa «dinero» en lengua totonaca—, una moneda que les ofreció sortear la falta de pesos mexicanos derivado de las constantes crisis económicas y que fue la mejor alternativa para incentivar el comercio y la producción local. 

«Porque hay productos, pero no hay dinero, entonces la gente no puede hacer uso de ellos porque no hay un papelito. Entonces decidimos hacer nuestros propios papelitos y con eso comprarnos nuestros propios productos», explica Juan Castro, maestro de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI) y uno de los cofundadores del túmin

Este proyecto de autonomía comunitaria y economía solidaria inició cuando productores, estudiantes y académicos de la UVI, del Centro de Investigación Intercultural para el Desarrollo (Ciides) y de la Red Unidos por los Derechos Humanos (RUDH) reunieron 3.000 pesos (unos 243 dólares al tipo de cambio del momento) e imprimieron billetes de túnim para 100 socios iniciales

Moneda comunitaria túnimCortesía Facebook: @monedatunim

A diferencia de lo que sucede con el trueque, esa herencia prehispánica que consiste en el intercambio de alimentos, el túnim permitió facilitar los acuerdos entre agricultores, artesanos y comerciantes,sin las discrepancias que conlleva ponerle un valor a diferentes productos. 

«Yo quiero tus manzanas, pero tú no quieres mis tomates, entones ya no hubo un trueque. Pero con el túnim que yo te doy, tú vas y compras lo que quieres, no se detiene el comercio«, explica Castro. 

Venta de artesanías donde aceptan túnim en mercado de Papantla, estado de VeracruzCortesía Facebook: @monedatunim

Los comercios y mercados que aceptan esta moneda usualmente tienen letreros con las leyendas: «Aquí se recibe túnim» y «Aceptamos túnim». Estos carteles también resumen, en unas cuantas palabras, la razón de ser de este proyecto: «El túnim es nuestro derecho«, «Viva la economía de los pueblos» y «Otro mundo es posible«. 

A más de once años de que los fundadores del proyecto imaginaron otro mundo posible, actualmente hay más de 2.200 socios que están distribuidos en 20 estados de México. El túnim es aceptado para la compra de alimentos y bebidas; de artesanías; de medicamentos y productos naturistas; de calzado; como moneda válida para cortarse el cabello; y hasta las bodas o festejos de XV años. 

Además, el profesor de la UVI cuenta a RT que los ayuntamientos de Espinal y Teotitlán del Valle (Oaxaca) son socios y es posible pagar con túnim el predial y las multas.

Monedas de túnim en MéxicoCortesía Facebook: @monedatunim

«Cualquier persona puede inscribirse al Túnim, vendiendo lo que venda, no hay una restricción en cuanto al producto, que tenga que ser de determinada calidad o tipo, como sí sucede en las monedas comunitarias», refiere Castro. 

PGR investiga el túnim

En 2011, el Banco de México (Banxico) solicitó a la extinta Procuraduría General de la República (PGR) que investigara si los usuarios del túnim incurrían en un delito federal al supuestamente sustituir la moneda oficial —el peso— por la alternativa comunitaria. Los socios y fundadores respondieron que se trataba de un acuerdo civil, de uso libre y voluntario

El asunto quedó zanjado y más allá de ese incidente, Castro dice que no han tenido más hostigamiento por parte del gobierno federal, estatal o municipal.

Difícil implementar una persecución cuando «todo funciona de nuestros propios bolsillos, no depende de un gobierno, sino de los propios socios y de la solidaridad ciudadana», apunta el académico de la UVI. 

Actualmente, hay unas diez monedas comunitarias, de acuerdo con Castro. Para el académico, la implementación del túnim destaca porque se basa en dos principios que chocan con el sistema capitalista: la confianza y la solidaridad. 

Después de once años de ver un sueño hecho realidad, Castro concluye que la implementación del túnim en México ha sido «una utopía realizable».

Imagen: Facebook Moneda Túmin

Más información:

Vídeo: ¿Qué significa el Túmin en San Cristóbal de Las Casas?

El Túmin toma cada vez más fuerza en la economía local en el Valle de Jovel, cada mes se realiza un tianguis de economía solidaria promoviendo el consumo local. El año pasado se cumplieron 10 años de la creación de esta moneda en Veracruz, para celebrarlo se realizó un tianguis especial donde se entrevisto a la gente para conocer su opinión sobre el túmin y el proceso de adaptación de la moneda en la ciudad. Conoce su opinión a través de este video.

La moneda comunitaria “Túmin” es un instrumento de papel moneda de 1, 5, 10 y 20 Túmin para facilitar el intercambio y dinamizar la circulación de nuestros productos y servicios entre los barrios, las colonias y los pueblos, entre la zona urbana y rural. Es para completar el gasto familiar con el fin de cubrir las necesidades, para mantener nuestras fuentes de ingresos y empleos, para que la riqueza y los beneficios sean para nosotros y se queden entre nosotros y nosotras; pero también para incrementar los lazos de confianza y solidaridad.

Si quieres conocer más sobre el Túmin en San Cristóbal, los proximos tianguis y los socios tumista visita el grupo de Facebook «Túmin San Cristobal«.

Más información:

«El Escaramujo, Un espacio de análisis político, social y cultural» ahora por Radio Kinoki

Estamos muy contentos de presentarles: «El Escaramujo, Un espacio de análisis político, social y cultural» ahora por Radio Kinoki ??

?Escúchanos en nuestro primer programa :El Túmin, La Moneda comunitaria en San Cristóbal de Las Casas


⏰Este martes 24 de noviembre a las 6 de la tarde por Facebook Live de Otros Mundos – Chiapas y Kinoki San Cristóbal